Bolsonaro apuesta por presionar al Congreso desde la calle ante la falta de apoyo parlamentario

El lunes por la ma?ana, el presidente Jair Bolsonaro dio una de cal. En un discurso descalific¨® al establishment pol¨ªtico, del que forma parte hace tres d¨¦cadas. ¡°Brasil es un pa¨ªs maravilloso, lo tiene todo para funcionar bien. El gran problema es nuestra clase pol¨ªtica¡±, dijo quien fuera diputado hasta las elecciones, en las que se impuso al candidato del Partido de los Trabajadores (PT) Fernando Haddad. Despu¨¦s, provoc¨® a los parlamentarios: ¡°Si la C¨¢mara y el Senado tienen propuestas mejores que la nuestra, que las sometan a votaci¨®n¡±. Y por la tarde, en otro evento, dio una de arena. ¡°Valoramos el Parlamento brasile?o, s¨ª, que ser¨¢ quien tenga la ¨²ltima palabra en la cuesti¨®n de [la reforma de] las pensiones, tan rechazada en los ¨²ltimos a?os¡±.

El vaiv¨¦n del discurso del mandatario brasile?o no altera, de momento, el plan A del bolsonarismo esta misma semana: el intento del presidente de poner contra las cuerdas a los parlamentarios transformando la movilizaci¨®n de sus seguidores en las redes sociales en un movimiento de las calles convocado para este domingo. El discurso que considera al presidente un reh¨¦n del Parlamento y de la ¡°vieja pol¨ªtica¡± ¡ªy que a veces hasta menciona el cierre del Congreso como medida¡ª es diseminado por los grupos de WhatsApp bolsonaristas, que fueron determinantes en la campa?a electoral. Estos grupos son estimulados, m¨¢s o menos expl¨ªcitamente, por una parte del bolsonarismo puro: desde el propio clan familiar hasta nombres vinculados al escritor Olavo de Carvalho, como el asesor de la presidencia Filipe Martins. El movimiento en el mundo virtual inspira desconfianza en Brasilia, ya que se trata de un terreno donde los ¡°radicalismos se superponen al di¨¢logo¡±, seg¨²n defini¨® el lunes el presidente de la C¨¢mara de los Diputados, Rodrigo Maia, del partido Dem¨®cratas (m¨¢s conocido como DEM).

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?Funcionar¨¢ la estrategia? Todo depender¨¢ del impacto de las manifestaciones de apoyo al Gobierno que los fieles al presidente planean en al menos 50 ciudades del gigante latinoamericano. Ser¨¢ una suerte de desagravio, despu¨¦s de que el mi¨¦rcoles pasado miles de personas salieran a la calle para protestar contra el congelamiento del 30% en los recursos destinados a educaci¨®n, una marcha que est¨¢ previsto se repita el pr¨®ximo jueves. El presidente del Partido Social Liberal (PSL, la formaci¨®n de Bolsonaro) ha asegurado este martes que la marcha en favor del presidente no tiene sentido: "No necesita (que la gente se manifieste) porque fue constitucional y democr¨¢ticamente alzado al poder. No ha cometido ning¨²n crimen de deshonestidad, ni administrativo. Tiene una red social inmensa", ha declarado el tambi¨¦n diputado Luciano Bivar.

En el caso de las protestas a favor de un presidente que gobierna hace casi cinco meses y que tiene la popularidad m¨¢s baja de un l¨ªder en su primer mandato desde 1992 (apenas el 35% de aprobaci¨®n), no est¨¢ totalmente claro qui¨¦nes son, de hecho, sus organizadores. Si son partidos pol¨ªticos (o al menos el suyo, el PSL), la sociedad civil o grupos organizados, como el de los camioneros. ¡°No se trata de un tercer turno electoral. Son actos convocados por militantes. Yo misma decid¨ª unirme despu¨¦s que los vi en las redes sociales¡±, afirm¨® la diputada federal Bia Kicis (PSL), una de las m¨¢s f¨¦rreas defensoras de Bolsonaro en el Congreso.

Dentro del propio PSL y entre los activistas m¨¢s escorados derecha, como el Movimiento Brasil Libre (MBL) o el Vem Pra Rua (Ven a la Calle), la adhesi¨®n no est¨¢ siendo autom¨¢tica. Al contrario: considerado uno de los principales activistas a favor de la destituci¨®n de la expresidenta Dilma Rousseff, del PT, y de la consecuente elecci¨®n de Bolsonaro, el MBL anunci¨® el pasado fin de semana que no apoya la protesta. Renan Santos, uno de los l¨ªderes del grupo, dijo que la manifestaci¨®n crea tensi¨®n contra el Congreso y el Supremo Tribunal Federal, y tambi¨¦n asusta a los militares. ¡°Todo lo que pretenden es generar caos. Solo sobreviven en el desorden. Pidieron la intervenci¨®n militar en 2014, la invasi¨®n del Congreso en 2015, la revoluci¨®n camionera en 2018 y ahora creen que ha llegado el momento de la verdad¡±, afirm¨® en la red social Twitter.

En las propias huestes del partido presidencial, la diputada Jana¨ªna Paschoal (PSL), que lleg¨® a barajarse para el puesto de vicepresidente de Bolsonaro, afirm¨® que no apoya las manifestaciones, que considera irracionales: ¡°El presidente fue elegido para gobernar dentro de las reglas democr¨¢ticas, seg¨²n lo previsto en la Constituci¨®n Federal. Est¨¢ confundiendo adrede discusiones democr¨¢ticas con el toma y daca¡±. La reacci¨®n negativa suscit¨® tambi¨¦n una reacci¨®n entre quienes s¨ª defienden la medida. ¡°El PSL est¨¢ unido. Solo Jana¨ªna est¨¢ en contra¡±, minimiz¨® la tambi¨¦n legisladora Kicis. El MBL, dice, fue un importante movimiento conservador que actu¨® contra la gesti¨®n del PT de Lula da Silva, pero no son fundamentales para dar apoyo al Gobierno. ¡°No son los due?os de las calles ni de las manifestaciones de derecha¡±, ponder¨®. En la opini¨®n de Kicis, la protesta servir¨¢ para presionar a los diputados para que aprueben tres proyectos del Gobierno: la reforma de las pensiones, el pacto anticrimen del ministro de Justicia Sergio Moro y la medida provisional 870, una reforma administrativa para reducir de 29 a 22 el n¨²mero de ministerios.

Mientras tanto, en el Congreso, el Gobierno se depara con once medidas provisionales a punto de caducar. Bolsonaro no tiene apoyos: 305 diputados de 21 partidos se declaran independientes y otros 134 diputados de 6 formaciones est¨¢n en la oposici¨®n. Solo quedan los 54 diputados del PSL y otros 20 con los que EL PA?S no pudo contactar para que manifestasen sus posiciones pol¨ªticas.

Sin ese apoyo, Bolsonaro pone en riesgo tambi¨¦n su reforma de las pensiones. El fin de semana pasado, circul¨® entre la clase pol¨ªtica la informaci¨®n de que el Parlamento estaba elaborando un nuevo proyecto para alterar la propuesta del Gobierno. R¨¢pidamente, el ministro de Econom¨ªa, Paulo Guedes, y el secretario de Seguridad Social y Trabajo, Rog¨¦rio Marinho, se reunieron con Maia y con el ponente de la reforma, Samuel Moreira, para intentar superar obst¨¢culos. ¡°Hubo ruido en la comunicaci¨®n. Las alteraciones se har¨¢n a partir del proyecto presentado por el Gobierno, como siempre se ha hecho en el Parlamento¡±, minimiz¨® Marinho.