Nueva manifestaci¨®n multitudinaria en Hong Kong pese a las crecientes advertencias de China
Los organizadores cifran en 1,7 millones los asistentes a una marcha pac¨ªfica contra las autoridades de la antigua colonia brit¨¢nica
Bajo la lluvia torrencial un mosaico multicolor de paraguas ha cubierto las calles adyacentes al parque Victoria. All¨ª se ha reunido esta tarde varios cientos de miles de personas para continuar con las protestas antigubernamentales que sacuden Hong Kong desde hace 11 semanas. Seg¨²n los organizadores, el Frente Civil de Derechos Humanos, la cifra de asistentes se eleva a 1,7 millones de personas, una de las m¨¢s multitudinarias en la historia de la excolonia de 7,4 millones de habitantes. Las autoridades hab¨ªan denegado el permiso a la marcha, la cual iba a cruzar la ciudad, reduci¨¦ndola a una concentraci¨®n en el interior del parque, pero la asistencia ha sido tal que los alrededores han quedado bloqueados y la gente ha acabado por ponerse en movimiento.
La multitudinaria manifestaci¨®n de este domingo reafirma el masivo apoyo popular del que gozan las protestas. La causa no se ha visto da?ada pese a la escalada de tensiones de la ¨²ltima semana, en la que los manifestantes llegaron a bloquear durante dos d¨ªas el aeropuerto de la ciudad, por lo que despu¨¦s pidieron disculpas a los afectados. Benny Tai, uno de los l¨ªderes de la revoluci¨®n de los paraguas y puesto en libertad esta semana, tambi¨¦n ha acudido al parque Victoria. "La marcha del domingo deber¨ªa reunir una vez m¨¢s a un mill¨®n de personas. El pueblo hongkon¨¦s no puede ser derrotado", hab¨ªa afirmado el s¨¢bado la diputada Claudia Mo en una publicaci¨®n en su perfil de Facebook.
A pesar de que el movimiento de la muchedumbre vulnera los permisos oficiales, no se ha visto presencia policial en las calles excepto en los alrededores de la Oficina del Enlace, m¨¢xima representaci¨®n del Gobierno chino y escenario de enfrentamientos en semanas anteriores. A lo largo del recorrido, los manifestantes han insistido en sus cinco reclamaciones ¨Cretirada de la ley de extradici¨®n que est¨¢ en el origen de las movilizaciones, amnist¨ªa de todos los detenidos, investigaci¨®n independiente sobre la actuaci¨®n policial, derogaci¨®n del t¨¦rmino ¡°revueltas¡± e instauraci¨®n de un sufragio universal efectivo¨C frente a las que el gobierno local se niega a dar su brazo a torcer.
Lo m¨¢s destacable de este fin de semana es que por primera vez en mucho tiempo no ha habido enfrentamientos violentos ni gases lacrim¨®genos, lo que es representativo de la tensi¨®n social que experimenta una ciudad famosa hasta hace poco por su orden y estabilidad. Las movilizaciones comenzaron el s¨¢bado con una marcha de miles de profesores y m¨¢s tarde una multitud se dio cita en Hung Hom y To Kwa Wan, dos barrios portuarios frecuentados por turistas chinos del continente. Los gestos de apoyo tambi¨¦n se han extendido a ciudades de otros pa¨ªses como Australia, Reino Unido, Canad¨¢ o Alemania. En Melbourne, Australia, un grupo de nacionalistas radicales chinos trataron de boicotear las protestas recurriendo a la violencia y varios de ellos fueron detenidos. Al mismo tiempo, miles de simpatizantes pro-Pek¨ªn se concentraban en Tamar Park para loar al gobierno local y la polic¨ªa.
Los manifestantes no se han amedrentado ante la acci¨®n policial, que ya ha detenido a 700 personas, ni ante la amenaza de un ataque militar chino. Desde hace unos d¨ªas, el gobierno ha comenzado a concentrar topas en Shenzhen, la ciudad al otro lado de la frontera, a apenas 40 kil¨®metros de Hong Kong. Unas fotograf¨ªas difundidas este viernes por la agencia Reuters, adem¨¢s, mostraban a uniformados chinos ejercit¨¢ndose para aplacar manifestaciones.
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