Reducir la deuda y mejorar los servicios, las tareas pendientes de Portugal
El futuro Gobierno tendr¨¢ que gestionar la econom¨ªa en un escenario de menor crecimiento que en a?os anteriores
El futuro Gobierno portugu¨¦s se va a enfrentar a problemas que han quedado sin resolver o a medias. Quiz¨¢s el m¨¢s importante de todos sea la sustituci¨®n de M¨¢rio Centeno, el Ronaldo de las finanzas ¡ªcomo le bautiz¨® el exministro alem¨¢n Wolfgang Sch?uble¡ª, que cogi¨® el pa¨ªs con un crecimiento del 1,5% y un d¨¦ficit del 4,4% en 2015 y lo dej¨® en 2,6% de PIB y el 1,4% de d¨¦ficit para pasmo de Bruselas.
Centeno, que fue nombrado presidente del Eurogrupo en 2017, se ha comprometido a aceptar el cargo de ministro si el socialista Ant¨®nio Costa es reelegido, pero no se ha comprometido a cumplir la legislatura, como ya ocurri¨® en el anterior Gobierno. Hace cuatro a?os, Centeno fue encargado por el secretario general del Partido Socialista (PS) para dise?ar el cuadro macroecon¨®mico cuatrienal. Aunque despu¨¦s fue corregido por la formaci¨®n, sus l¨ªneas maestras se mantuvieron y se presentaron en la campa?a electoral.
Una de las batallas de Centeno desde 2015 ha sido la reducci¨®n de la deuda del pa¨ªs, que se encontraba entonces en el 129% del PIB y este a?o cerrar¨¢ con 10 puntos menos. Los buenos datos de la econom¨ªa portuguesa en el periodo 2015-2019 se deben fundamentalmente a la disciplina implementada por Centeno, respaldado por su primer ministro.
El pr¨®ximo Gobierno tendr¨¢ que afrontar tambi¨¦n el enfado de la opini¨®n p¨²blica con los servicios sanitarios y los transportes p¨²blicos, y la irritaci¨®n de los profesionales de la sanidad y de la educaci¨®n. En el caso de la seguridad social, el Bloco de Esquerda (BE) pide la contrataci¨®n de 18.000 profesionales ¡ªm¨¦dicos y enfermeros¡ª para compensar la rebaja del horario laboral de 40 a 35 horas. Porcentualmente, la inversi¨®n en sanidad ha sido inferior estos a?os a la realizada cuando el pa¨ªs estaba bajo la vigilancia de la troika (el BCE, la Comisi¨®n Europea y el FMI).
Tambi¨¦n las infraestructuras han sufrido un recorte de presupuesto con el fin de cuadrar cuentas. Desde la reparaci¨®n de carreteras secundarias hasta el primer aeropuerto, el pa¨ªs necesita algo m¨¢s que una mano de pintura. El tren de alta velocidad ni se menta. Tanto el PS como el Partido Social Dem¨®crata (PSD) han renunciado a cualquier conexi¨®n con Espa?a a trav¨¦s del AVE. El plan de Costa es mejorar las infraestructuras ferroviarias, principalmente entre Lisboa y Oporto.
Con la mayor carga fiscal de la historia, el futuro Gobierno deber¨¢ rebajar? la presi¨®n a las clases medias en la declaraci¨®n de la renta
En el caso del aeropuerto de Lisboa, la soluci¨®n llega tarde y obsoleta. Absolutamente congestionado en pistas, accesos y servicios, solo en 2021 podr¨¢ estar en funcionamiento la alternativa del aeropuerto de Montijo, al otro lado del r¨ªo, aprovechando una base a¨¦rea militar. Su capacidad es insuficiente desde el primer d¨ªa si contin¨²a la progresi¨®n tur¨ªstica y econ¨®mica de los ¨²ltimos a?os. Adem¨¢s, cuenta con el rechazo de los ecologistas y los partidos a la izquierda del PS, que le pueden dar a Costa los votos que necesite para gobernar.
El a?o pasado los portugueses sufrieron la mayor carga fiscal de la historia, el 34,9%. Los dos principales partidos, PS y PSD, han prometido rebajas en la declaraci¨®n de la renta, principal fuente de recaudaci¨®n del pa¨ªs. El futuro Gobierno tiene trabajo asegurado; y todo ello en un escenario de menor crecimiento econ¨®mico que en a?os anteriores.
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