Las fuerzas de seguridad vuelven a usar balas contra las protestas de Irak

Las fuerzas de seguridad iraqu¨ªes han vuelto a utilizar este lunes munici¨®n real para reprimir las protestas en Bagdad, donde han matado por lo menos a cinco manifestantes. Este endurecimiento sigue a una intervenci¨®n anoche del primer ministro, Adel Abdelmahdi, en la que pidi¨® que cese la movilizaci¨®n popular porque ya se han atendido gran parte de las reclamaciones y tiene graves costes econ¨®micos. Adem¨¢s, otras cuatro personas resultaron muertas en Kerbala, tambi¨¦n por armas de fuego, cuando intentaban asaltar el Consulado de Ir¨¢n en esa ciudad.

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Un fot¨®grafo de la agencia Reuters presenci¨® c¨®mo un hombre recib¨ªa un disparo cuando los polic¨ªas abrieron fuego contra los manifestantes en las proximidades del puente de Ahrar, uno de los 13 que conectan las dos orillas del Tigris en Bagdad. Adem¨¢s, vio otros cuatro cad¨¢veres. Tambi¨¦n France Presse ha recogido testimonios de personas que afirman que las fuerzas de seguridad dispararon balas reales contra los manifestantes que avanzaban hacia la sede de la televisi¨®n estatal, que se encuentra muy cerca del citado puente.

Sin embargo, fuentes m¨¦dicas y de seguridad cifran las v¨ªctimas en 4 muertos y 34 heridos, pero s¨®lo confirman un muerto por heridas de bala; otros dos, dicen, murieron alcanzados por pelotas de goma y cartuchos de gas lacrim¨®geno, y no facilitan datos sobre la muerte del cuarto. Al parecer dos de los muertos, incluido un polic¨ªa, fallecieron cuando las fuerzas especiales que protegen la Zona Verde dispararon contra los manifestantes. Otras 22 personas resultaron heridas.

Seg¨²n un portavoz del primer ministro, un grupo logr¨® cruzar el puente de Al Yumhuriya y prendi¨® fuego a un restaurante, lo que motiv¨® la reacci¨®n de los agentes. Sin embargo, la agencia Efe cita a una fuente del Ministerio del Interior que eleva a siete los muertos y los atribuye a la estampida que provoc¨® el uso de gases lacrim¨®genos y ca?ones de agua para dispersar a quienes intentaban atravesar ese paso que conecta la plaza de Tahrir, epicentro de las protestas, con la Zona Verde, donde se encuentran las principales sedes del poder pol¨ªtico contra el que se han levantado los iraqu¨ªes.

Sea como fuere, es la primera vez que los polic¨ªas utilizan fuego real en Bagdad desde que se reanudaron las protestas el viernes 25 de octubre. En la primera semana de octubre hubo 157 muertos, 149 de ellos civiles en todo el pa¨ªs. El informe oficial al respecto concluy¨® que el 70 % de las muertes hab¨ªan sido causadas por heridas de bala en la cabeza o el pecho, y responsabiliz¨® a los cuerpos de seguridad de un excesivo uso de la fuerza. A estas alturas las v¨ªctimas mortales superan los 300.

El primer ministro rompi¨® su silencio el domingo por la noche para reclamar "la vuelta a la normalidad". En un mensaje televisado asegur¨® que "ya se han satisfecho muchas de las reclamaciones". Abdelmahdi dijo que estaba dispuesto a dimitir si los partidos pol¨ªticos llegaban a un acuerdo para sustituirle, algo que por ahora parece lejano. Sin embargo, los manifestantes no quieren simplemente reemplazar un pol¨ªtico por otro, ni se f¨ªan de las promesas de elecciones anticipadas, cambio en el sistema de acceso al funcionariado y revisi¨®n de las pensiones.

Tambi¨¦n se volvi¨® a usar munici¨®n real en Kerbala, donde cuatro manifestantes resultaron muertos tras enfrentarse a los polic¨ªas que proteg¨ªan el Consulado de Ir¨¢n en esa ciudad. Alrededor de las diez de la noche del domingo, varios cientos de personas se congregaron frente a esa representaci¨®n diplom¨¢tica. Seg¨²n la Alta Comisi¨®n de Derechos Humanos de Irak, la multitud pretend¨ªa entrar en el Consulado y arriar la bandera de Ir¨¢n que ondea sobre el edificio. Seg¨²n fuentes policiales, intentaba incendiarlo.

Es el segundo incidente similar que tiene lugar en Kerbala, a un centenar de kil¨®metros al sur de Bagdad y sede de uno de los principales mausoleos chi¨ªes, en una semana. En ambos casos, y tambi¨¦n en las protestas de la capital, Ir¨¢n est¨¢ en el centro de las cr¨ªticas. Los manifestantes rechazan su influencia sobre la clase pol¨ªtica iraqu¨ª y, sobre todo, las milicias que apadrina. Aunque dos tercios de los 39,5 millones de iraqu¨ªes comparten el islam chi¨ª que es religi¨®n oficial de Ir¨¢n, han terminado hartos de los partidos islamistas (la mayor¨ªa de ellos vinculados al pa¨ªs vecino) y quieren dejar el sectarismo fuera de la pol¨ªtica.

Hace una semana, al menos 18 manifestantes resultaron muertos en la misma ciudad de Kerbala cuando las fuerzas de seguridad y, seg¨²n algunos testigos, ¡°hombres vestidos de negro¡± no s¨®lo dispararon contra ellos, sino que persiguieron por los callejones a quienes intentaban escapar. El incidente, negado por las autoridades, se produjo poco despu¨¦s de que un influyente l¨ªder de las Fuerzas de Movilizaci¨®n Popular ordenara a sus hombres ¡°oponerse al desacuerdo¡± a ra¨ªz de que los participantes en las protestas quemaran un retrato del l¨ªder supremo iran¨ª, el ayatol¨¢ Ali Jamenei, y atacaran sedes de partidos y milicias asociados con Ir¨¢n.