¡°Si la UE no est¨¢ en los Balcanes, lo har¨¢n Rusia, Turqu¨ªa y China¡±
El expresidente de Serbia Boris Tadic acusa a algunas capitales europeas de centrarse ¨²nicamente en el asunto de Kosovo e ignorar el "desmantelamiento de las instituciones democr¨¢ticas" en su pa¨ªs
Cuando Boris Tadic (Sarajevo, 61 a?os) presid¨ªa Serbia, entre 2004 y 2012, pasaron muchas cosas cuyos ecos resuenan hoy en los Balcanes. Montenegro puso fin a su uni¨®n con Serbia, Kosovo declar¨® unilateralmente su independencia y Belgrado se convirti¨® en candidato a ingresar en la UE tras arrestar a responsables de la agresi¨®n en Bosnia y Croacia como Radovan Karadzic, Goran Hadzic y Ratko Mladic. Hoy, Montenegro est¨¢ en la OTAN despu¨¦s de un fallido intento de golpe de Estado prorruso, Kosovo est¨¢ reconocido por un centenar de pa¨ªses, el horizonte comunitario est¨¢ lleno de nubarrones y Karadzic y Mladic cumplen cadena perpetua por el genocidio de Srebrenica.?
Psic¨®logo social de formaci¨®n y afable en las distancias cortas, Tadic ha vuelto a enfundarse el traje de opositor que visti¨® en el pasado: primero contra las autoridades yugoslavas, en una organizaci¨®n disidente universitaria; y m¨¢s tarde contra Slobodan Milosevic, ca¨ªdo en 2000. Su diana ahora es el presidente Aleksandar Vucic y apoya, aunque con dudas (¡°estoy 51% a favor, 49% en contra¡±), el boicot a las elecciones que celebra su pa¨ªs en unos meses. Tambi¨¦n le preocupa el reciente portazo comunitario a Macedonia del Norte y Albania. ¡°Si la UE no est¨¢ en los Balcanes, lo har¨¢n Rusia, Turqu¨ªa y China¡±, advierte con tono serio en una entrevista con EL PA?S durante su paso el mes pasado por Madrid ¡ªciudad de la que tiene las Llaves de Oro¡ª con motivo del di¨¢logo de pol¨ªticas anual del Club de Madrid, organizaci¨®n integrada por m¨¢s de 100 exjefes de Estado y de Gobierno a la que pertenece.
¡°En la UE existe la filosof¨ªa de que no es posible afrontar la ampliaci¨®n hasta que no se defina la estrategia¡. ?pero hace 10 a?os que los l¨ªderes de la UE no definen la estrategia! ?Cu¨¢l puede ser el resultado? Influencia rusa; turca, muy importante ahora mismo, y china, que es cada d¨ªa mayor. China est¨¢ invirtiendo [en los Balcanes] m¨¢s que la UE. Cuando era estudiante, en la entonces Yugoslavia, so?¨¢bamos con la democracia, con la UE¡ Me temo que ese sue?o est¨¦ desapareciendo¡±, asegura.
A lo largo de la entrevista, Tadic repite una idea: que Serbia es tratada por algunas capitales europeas como ¡°un pa¨ªs de un solo tema¡±, Kosovo. Es decir, que ponen todo el foco en que Belgrado alcance un acuerdo con su exprovincia (con la perspectiva de la adhesi¨®n a la UE como zanahoria) y pasan por alto la calidad de las libertades. ¡°La situaci¨®n democr¨¢tica de Serbia es simplemente un desastre. Algunos l¨ªderes europeos han permitido a los l¨ªderes actuales desmantelar todas las instituciones democr¨¢ticas. Y si no hay democracia en Serbia, es un problema para toda la regi¨®n, porque tiene frontera con el resto de pa¨ªses de la zona y hay serbios en otros pa¨ªses de la regi¨®n. No puedo entender ese enfoque hacia mi pa¨ªs¡±.
Cuando Kosovo declar¨® la independencia, en 2008, Tadic fue tajante: ¡°Serbia jam¨¢s la reconocer¨¢¡±. Once a?os m¨¢s tarde y con el Estado de Kosovo bendecido por un centenar de pa¨ªses, el expresidente se reafirma y cree a¨²n posible negociar una mayor autonom¨ªa, sin soberan¨ªa plena. ¡°No propuse el reconocimiento de la independencia de Kosovo, sino que las autoridades de Kosovo se considerasen como independientes. Creo que podemos negociar desde ah¨ª, aunque el punto de partida negociador no es mejor que el que hab¨ªa hasta 2012¡±.
El contexto es delicado. Las relaciones bilaterales son tensas y Kosovo mantiene aranceles del 100% a los productos serbios y acaba de apostar en las urnas por un recambio generacional que lleva las ya maltrechas negociaciones a terra incognita. Pristina ser¨¢ el primer destino de Josep Borrell cuando asuma la jefatura de la diplomacia europea, seg¨²n anunci¨® el mes pasado el ministro de Exteriores en funciones de Espa?a.
Tadic ve positiva la decisi¨®n de Borrell, pero habla de Kosovo con cierta fatiga y frustraci¨®n. Parece sentirse una especie de Casandra que se desga?it¨® ¡ªsin ¨¦xito¡ª para convencer a los pa¨ªses occidentales de que, si reconoc¨ªan a Kosovo, abr¨ªan la puerta a que otras regiones europeas anunciasen unilateralmente su secesi¨®n. El tiempo, insiste, le ha dado la raz¨®n. ¡°Mis amigos de las democracias occidentales no pod¨ªan entender el tema de Kosovo. Ignoraron el potencial de generar un efecto domin¨®. Les ped¨ª que fueran muy serios con ese tema. Siempre lo ignoraron. Segu¨ªan la agenda de la independencia de Kosovo, estricta y muy r¨ªgidamente, pero cuando se despertaron con el asunto de Crimea [pen¨ªnsula ucrania anexionada por Rusia en 2014], de Osetia del Sur y de Abjazia [regiones secesionistas de Georgia], fue algo as¨ª como una conmoci¨®n". Un "efecto domin¨®" en el que Tadic incluye a Catalu?a, a Escocia y a "cualquier zona sensible en el mundo" de las que "Europa est¨¢ llena". "Todav¨ªa hoy dicen en los foros internacionales: ¡®Kosovo es un caso distinto¡¯. ?Todo caso es distinto! Es bastante obvio, y todos esos casos est¨¢n conectados. Eso es lo que provoca un efecto domin¨®. No hace falta ser un genio para entenderlo¡±.
Poder absolutista
El expresidente centra ahora sus esfuerzos en la ca¨ªda del presidente de su pa¨ªs. Serbia vive desde el pasado diciembre el mayor movimiento de protesta desde el levantamiento que acab¨® con Milosevic. Las manifestaciones semanales han ido perdiendo fuerza, pero la gran mayor¨ªa de la oposici¨®n ha decidido boicotear los comicios, que se celebrar¨¢n el pr¨®ximo marzo o abril, seg¨²n ha confirmado recientemente el propio Vucic, presidente desde 2017 y antes, primer ministro. ¡°Tras siete a?os de desmantelamiento de la democracia en Serbia, el ¨²nico camino es apelar a algunas fuerzas democr¨¢ticas que tomen en consideraci¨®n la realidad que vivimos, con un poder absolutista. No digo dictador, pero s¨ª populista, demagogo y absolutista. Estamos bajo fake news 24 horas al d¨ªa. Y en esa situaci¨®n la gente no puede decidir. Al mismo tiempo, si no participamos van a tener a¨²n m¨¢s diputados. Pero si legitimamos el proceso, es a¨²n m¨¢s problem¨¢tico. Es ¡ªreconoce¡ª un dilema¡±.
M¨¢s armas, menos reconciliaci¨®n
Como presidente, Tadic recurri¨® a los gestos de alto contenido simb¨®lico para tratar de cerrar las heridas de las guerras de los noventa en los Balcanes: se disculp¨® en nombre de su pa¨ªs ante Bosnia y Croacia y visit¨® en cada uno de ellos los principales s¨ªmbolos de la agresi¨®n serbia: Srebrenica y Vukovar. "Fue un periodo de pol¨ªticas nacionalistas en los Balcanes. Desafortunadamente, esas ideolog¨ªas est¨¢n volviendo", lamenta hoy.
¡°Reconciliaci¨®n significa decir ¡®lo siento¡¯ y, a la vez, mostrar respeto a otra entidad e identidad. Eso es lo que necesitamos. Los actuales liderazgos en Serbia, Bosnia, Croacia¡ son totalmente diferentes. Est¨¢n m¨¢s enfocados en comprar armas que en la reconciliaci¨®n¡±.
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