Modelos de poder perpetuo en la antigua URSS

El espacio de 15 pa¨ªses surgidos de la desintegraci¨®n de la URSS en 1991 ha sido f¨¦rtil en l¨ªderes prestos a ejercer el poder de por vida y a disponer su herencia pol¨ªtica de modo que, a su muerte, sus allegados puedan seguir en el puente de mando. Desde Mosc¨², el mandatario ruso, Vlad¨ªmir Putin, ha podido observar un desfile de modelos, confeccionados por dirigentes que, en Europa, el C¨¢ucaso y Asia Central, se han aferrado a sus cargos por diversos medios, desde manipulaciones legislativas y truculentas enmiendas constitucionales, a control de recursos administrativos y aparatos represivos.

En una investigaci¨®n publicada en 2019, el polit¨®logo Kiril R¨®gov afirmaba que en 20 a?os se hab¨ªan registrado 14 intentos de transici¨®n controlada en la antigua URSS, y siete de ellos con ¨¦xito: en Rusia (en 2000, 2008 y 2012), en Azerbaiy¨¢n (2003), Turkmenist¨¢n (2006), Armenia (2008) y Uzbekist¨¢n (2016).

Aunque ninguna tendencia es irreversible, hoy en la ex Uni¨®n Sovi¨¦tica se distinguen varios grupos de pa¨ªses, excluyendo los tres Estados b¨¢lticos, integrados en el club de las democracias occidentales. Con vaivenes y sobresaltos, el primer grupo ¡ªUcrania, Moldavia, Armenia y Georgia¡ª ha escapado (Armenia lo logr¨® en 2018) de los intentos de ¡°privatizaci¨®n¡± emprendidos por l¨ªderes o familias pol¨ªticas locales.

En varios de estos Estados, la transferencia de poder entre la ¨¦lite dirigente ha sido resultado del fallecimiento del l¨ªder ¡ªUzbekist¨¢n y Turkmenist¨¢n y Azerbaiy¨¢n¡ª. Seg¨²n los casos, los mandatarios fueron m¨¢s o menos benignos y m¨¢s o menos apreciados por sus conciudadanos. ¡°Su ¨¦xito no puede atribuirse exclusivamente a la represi¨®n o a trucos de control, pues no debe infravalorarse la p¨¦rdida de atractivo de las democracias occidentales por su pol¨ªtica y por la crisis que atraviesan¡±, subraya el analista pol¨ªtico Togrul Dzhuvarl¨ª desde Bak¨².

Los r¨¦cords de permanencia en el poder recaen en la europea Bielorrusia, donde Alexandr Lukashenko dirige el pa¨ªs desde 1994, y en la centroasi¨¢tica Tayikist¨¢n, donde Emamoli Rajm¨®n lo hace desde 1992.

Lukashenko fue elegido como abanderado en la lucha contra la corrupci¨®n. Utilizando el refer¨¦ndum para ampliar mandato y abolir plazos, el que fuera llamado ¡°el ¨²ltimo dictador de Europa¡± va ya por su quinta renovaci¨®n en el cargo y no da se?al de querer transferir el poder, aunque algunos bromean sobre la eventual preparaci¨®n de su hijo menor, Kolia, para ello. Tras las sanciones por su pol¨ªtica de derechos humanos, Occidente ha suavizado su actitud hacia Lukashenko a medida que se afianzaba la pol¨ªtica expansionista de Rusia. Rajm¨®n, por su parte, lleg¨® al poder en Tayikist¨¢n como jefe del Parlamento de un pa¨ªs en guerra civil y fue elegido jefe del Estado en 1994 despu¨¦s de que una nueva constituci¨®n restableciera el r¨¦gimen presidencial. Nombrado ¡°l¨ªder de la naci¨®n¡±, Rajm¨®n puede hoy mantenerse de por vida en el poder. El esquema sucesorio parece centrarse en su hijo Rustam Emomali, actualmente alcalde de Dushamb¨¦, la capital.

Dos l¨ªderes centroasi¨¢ticos, en Uzbekist¨¢n y Turkmenist¨¢n, murieron en el puesto y su sucesi¨®n, formalmente mediante elecciones, se considera el resultado de pugnas entre sus allegados. En Uzbekist¨¢n, Shavkat Mirziy¨®yev sustituy¨® a Islam Kar¨ªmov, un l¨ªder represivo que llen¨® las c¨¢rceles del pa¨ªs. Tras haber sido primer ministro de 2003 a 2016, Mirziy¨®yev abandera hoy una especie de ¡°deshielo¡± de resultado incierto. Ha apartado de los centros de decisi¨®n a altos cargos de la ¨¦poca de Kar¨ªmov que podr¨ªan ser un peligro para su liderazgo y mantiene el confinamiento de Gulnara Kar¨ªmova, la hija mayor de su antecesor, juzgada a puerta cerrada. Otros responsables de la ¨¦poca de Kar¨ªmov han sido tambi¨¦n juzgados y condenados.

En Turkmenist¨¢n, Saparmurat Niy¨¢zov, un superviviente de la URSS que recibi¨® el estatus de presidente vitalicio en 1999, fue sustituido a su muerte en 2006 por el exministro de Sanidad, Gurbanguli Berdimujam¨¦dov. Reelegido por ¨²ltima vez en 2017 y susceptible de renovar su mandato cuantas veces quiera, Berdimujam¨¦dov contin¨²a el culto a la personalidad de su antecesor, aunque con su propio estilo.

En Azerbaiy¨¢n la sucesi¨®n qued¨® en familia, ya que, a su muerte en 2003, Gueidar Al¨ªev, que fue miembro de la direcci¨®n comunista de la URSS, fue sustituido por su hijo Ilj¨¢m Al¨ªev. Este sigue presidiendo Azerbaiy¨¢n tras suprimir el n¨²mero limitado de mandatos y reforzado la presencia de parientes con el puesto de vicepresidenta que es ocupado por su esposa Mejrib¨¢n.

En los pa¨ªses postsovi¨¦ticos donde los liderazgos se perpet¨²an, la oposici¨®n es d¨¦bil y tambi¨¦n, en distinto grado, ha sido debilitada conscientemente: desapariciones, muertes, encarcelamientos, procesos pol¨ªticos y destierros han sido instrumentos habituales contra aquellos que pod¨ªan hacer sombra a los l¨ªderes.