La media de muertes por la covid-19 en Brasil baja por el descenso de contagios en S?o Paulo

Tras una larga meseta que registraba un promedio diario de m¨¢s de mil muertes por coronavirus en Brasil, la curva ha bajado en las ¨²ltimas dos semanas. Seg¨²n los datos oficiales del Ministerio de Sanidad, entre el 23 de agosto y el 5 de septiembre se ha registrado una media de entre 800 y 900 muertes al d¨ªa. Un estudio realizado por el consorcio de prensa con datos de las secretar¨ªas estatales de Sanidad tambi¨¦n observa una tendencia descendiente en la media de muertes por la covid-19. Las cifras pueden parecer alentadoras, pero todav¨ªa es pronto para afirmar que el pa¨ªs est¨¢ controlando la pandemia, que ya ha matado a m¨¢s de 130.000 personas en Brasil, un saldo mortal solo menor que el de Estados Unidos.

Los especialistas advierten que los datos nacionales deben interpretarse con cautela, ya que la reducci¨®n de la media nacional puede deberse a la disminuci¨®n de muertes en los populosos Estados de S?o Paulo y Minas Gerais. A nivel nacional, la tasa de transmisi¨®n del virus tender¨¢ a ser m¨¢s baja, pero las fases de la epidemia siguen siendo muy diversas en las distintas regiones brasile?as. ¡°La impresi¨®n es que el Estado de S?o Paulo est¨¢ haciendo bajar la media [nacional]. En algunos Estados sigue subiendo, pero el impacto de S?o Paulo es fuerte, porque es muy poblado. Y otros lugares ya no tienen la aceleraci¨®n inicial¡±, observa Paulo Lotufo, epidemi¨®logo y profesor de la Escuela de Medicina de la Universidad de S?o Paulo. Desde el inicio de la crisis sanitaria por la covid-19, S?o Paulo ha tenido los n¨²meros absolutos m¨¢s altos, tanto de contagios como de muertes, y la reducci¨®n de estas cifras desde hace cuatro semanas afecta a las estad¨ªsticas nacionales.

Lotufo explica que en la capital ya se registraban menos muertes, pero en las ¨²ltimas semanas se ha visto esta tendencia en todo el Estado. ¡°Al inicio de la crisis, varias ciudades del interior se mostraron bastante reticentes e interrumpieron las actividades. Pero reabrieron de forma apresurada, lo que las oblig¨® a cerrar de nuevo. Eso ha comportado la actual reducci¨®n de muertes¡±, dice el epidemi¨®logo. El descenso de la curva en S?o Paulo es bastante pronunciado en el gr¨¢fico presentado por el Ministerio de Sanidad, aunque el documento no ofrece cifras espec¨ªficas de la disminuci¨®n en todo el Estado.

El Observatorio Covid-19 BR, que sigue los datos de la pandemia desde el inicio de la crisis, coincide en que las muertes registradas en S?o Paulo han disminuido, incluso con la correcci¨®n estad¨ªstica que se realiza por el retraso en la notificaci¨®n de nuevas muertes. ¡°La posibilidad de que se reduzca el n¨²mero de muertes por covid-19 en Brasil existe, es real. Pero todav¨ªa tenemos que esperar un poco para saber si es una reducci¨®n efectiva o si est¨¢ influida por el retraso en las notificaciones¡±, explica Rafael Lopes, miembro del Observatorio. Tambi¨¦n se?ala que hay que considerar el peso que tiene la reducci¨®n en S?o Paulo en los datos nacionales. ¡°Al mirar a Brasil en su conjunto, tenemos que considerar las diferencias de la din¨¢mica y del momento de la epidemia en las distintas regiones. Una disminuci¨®n de muertes en S?o Paulo siempre pesar¨¢ m¨¢s en los datos nacionales que si se produjera en Cear¨¢, porque el tama?o de las poblaciones es muy diferente¡±, explica.

El ¨²ltimo bolet¨ªn epidemiol¨®gico del Ministerio de Sanidad se?ala que en los Estados de S?o Paulo, R¨ªo de Janeiro y Minas Gerais fue donde se produjeron m¨¢s muertes en la semana epidemiol¨®gica que va del 30 de agosto al 5 de septiembre, pero las cifras de los tres fueron menores en comparaci¨®n con la semana anterior. Los n¨²meros del Estado de Amazonas han aumentado considerablemente, pero ahora incluyen muertes que todav¨ªa se estaban investigando. En los Estados del sur y del centro occidente, donde los pocos casos del inicio de la crisis se han ido multiplicando en los ¨²ltimos meses, tambi¨¦n ha bajado el n¨²mero de muertes por covid-19.

Para hacerse una idea del momento actual de la epidemia, hay que examinar los datos sobre las muertes por s¨ªndrome respiratorio agudo grave ¡ªuna complicaci¨®n derivada de la covid-19 y de otras gripes¡ª por la fecha de inicio de los s¨ªntomas. El Ministerio de Sanidad tambi¨¦n observa que se ha producido un descenso. ¡°Quitando las ¨²ltimas semanas [que deben desconsiderarse por el retraso en la notificaci¨®n], vemos que hay una tendencia a la baja en el n¨²mero de muertes¡±, dice Eduardo Mac¨¢rio, secretario suplente de Vigilancia Sanitaria. En cuanto a nuevos contagios, el ministerio se?ala que ha habido un aumento del 5% esta semana, pero que esta variaci¨®n representa una tendencia hacia la estabilidad.

¡°El gran mensaje al analizar los n¨²meros de la epidemia es que tenemos que ser cautelosos. La epidemia, en todos los niveles ¡ªnacional, estatal o municipal¡ª es siempre el resultado de acciones humanas. Aunque la gente se mueva m¨¢s, lleva m¨¢s mascarillas y se protege m¨¢s¡±, afirma Rafael Lopes. Cada vez hay m¨¢s ciudades brasile?as que relajan la cuarentena, pero el investigador se?ala que un comportamiento social menos r¨ªgido que el del confinamiento no puede minimizar la importancia de las medidas de seguridad. ¡°Se ha producido una reducci¨®n de mil a 800 muertes. Es expresiva, pero no significa que las cosas est¨¦n bien. No significa que ya no tenemos que protegernos¡±, a?ade.

Epidemi¨®logos de todo el mundo advirtieron hace meses del riesgo de una segunda ola de contagios en los pa¨ªses que alcanzaron el pico y luego mostraron un control relativo de la epidemia. En Espa?a, por ejemplo, se han producido nuevos brotes, pero la situaci¨®n dista mucho de ser como la de la primera ola. En otros pa¨ªses europeos tampoco ha habido brotes tan graves. El epidemi¨®logo Paulo Lotufo evita hablar de que pueda haber una segunda ola cuando analiza una epidemia inexistente hace ocho meses y cuya estacionalidad a¨²n se desconoce. ¡°Me da miedo esta disputa de nomenclaturas, que no ayuda en absoluto. Lo que est¨¢ claro es que el virus no ha desaparecido, sigue ah¨ª. Todo cuidado es poco¡±, afirma.

Lotufo dice que incluso hacer una comparaci¨®n entre pa¨ªses es complicado. En Italia la pandemia golpe¨® con fuerza la regi¨®n de Lombard¨ªa, pero se lograron contener los impactos en el sur del pa¨ªs. Brasil, un pa¨ªs continental, podr¨ªa haber controlado mejor la epidemia en la regi¨®n sur, seg¨²n el investigador: ¡°R¨ªo Grande del Sur y Minas Gerais, que tuvieron pocos casos al principio de la crisis, podr¨ªan tener n¨²meros mucho mejores si hubieran sido m¨¢s rigurosos en el aislamiento¡±. Lotufo considera que deben seguirse las medidas de distanciamiento social incluso cuando la pandemia da las primeras se?ales de enfriamiento. ¡°La sociedad necesita discutir qu¨¦ es prioritario. Algo que Brasil y los Estados Unidos parecen incapaces de hacer. ?Es una prioridad abrir escuelas o centros comerciales? Hay que tener un control general del contagio. Si se abre una cosa, la posibilidad de reabrir otra va a disminuir¡±, afirma.

Lopes a?ade que la disminuci¨®n del n¨²mero de muertes en Brasil est¨¢ lejos de representar el fin de la pandemia. Para ¨¦l, la reducci¨®n no es representativa para que el pa¨ªs asuma un nivel seguro. ¡°Brasil no consigue entender la epidemia. Estamos en la misma situaci¨®n que hace cuatro o cinco meses. Todav¨ªa hacemos muy pocas pruebas, que se utilizan para confirmar los casos, pero no para controlar la epidemia¡±, afirma. La falta de pruebas, seg¨²n Lopes, se manifiesta en la alta tasa de positivos: un 35,9%, seg¨²n datos del propio Ministerio de Sanidad. ¡°El n¨²mero de muertes parece estar mejorando, pero no significa que la situaci¨®n est¨¦ controlada. Nuestra estrategia nunca ha sido contener los casos, sino administrar los casos graves y las muertes. Brasil todav¨ªa tiene mucho que hacer hasta conseguir controlar la pandemia¡±, dice.