Pa¨ªses Bajos se dispone a llevar a Siria ante la justicia internacional por ¡°graves violaciones de los derechos humanos¡±

El Gobierno de los Pa¨ªses Bajos considera a Siria responsable de ¡°graves violaciones de los derechos humanos¡± cometidas por el r¨¦gimen de Bachar el Asad, y est¨¢ dispuesto a acudir a la justicia internacional para que sean castigadas. As¨ª lo ha anunciado este viernes el Ministerio de Asuntos Exteriores en una nota firmada por su titular, el liberal de derecha Stef Blok, que llama a negociar la forma de poner fin a la violencia. De no alcanzarse un acuerdo entre las partes, el caso ser¨ªa elevado ¡°a un tribunal internacional¡±, refleja en el texto. Aunque Blok no especifica cu¨¢l ser¨ªa, s¨ª toma como base legal la Convenci¨®n contra la Tortura, adoptada por la ONU en 1984, de modo que no se descarta que el litigio pueda acabar en el propio Tribunal Internacional de Justicia de Naciones Unidas (TIJ). Hasta la fecha, los intentos de llevar a El Asad ante la Corte Penal Internacional (CPI), encargada en su caso de juzgar el genocidio y los cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad, han sido fallidos porque han chocado con el veto de Rusia y China en el Consejo de Seguridad de la ONU.

¡°El r¨¦gimen de El Asad ha cometido de forma repetida cr¨ªmenes horrorosos, en particular la tortura, y las pruebas son abrumadoras. Tiene que haber consecuencias¡±, dice el escrito del ministro Blok, publicado en la p¨¢gina oficial de web del Gobierno neerland¨¦s. Damasco ha sido informado de la decisi¨®n por v¨ªa diplom¨¢tica, y la misiva invita a El Asad a una negociaci¨®n, "que es el primer paso resolver una disputa¡±. De no lograrlo, el ministro propone acudir entonces a un arbitraje, y la Corte Permanente de Arbitraje, con sede en La Haya, como el TIJ, puede poner la infraestructura. Ambas partes deber¨ªan acordar entonces la composici¨®n del tribunal y su procedimiento. Si eso tambi¨¦n fallara, ¡°Pa¨ªses Bajos elevar¨¢ el caso a un tribunal internacional (¡­) solo habr¨¢ una soluci¨®n pol¨ªtica duradera para Siria si se acaba la impunidad (¡­) las v¨ªctimas deben obtener justicia y vamos en busca de la misma se?alando a los causantes de estos cr¨ªmenes¡±, escribe Blok. Luego incluye las cifras del coste humano de la violencia perpetrada en Siria, que suman 200.000 civiles muertos en la ¨²ltima d¨¦cada; otros 100.000 desaparecidos: m¨¢s de seis millones desplazados dentro de su propia tierra y 5,5 millones huidos a pa¨ªses vecinos, Europa y otros destinos. ¡°El r¨¦gimen de El Asad no ha dudado en ser duro con su poblaci¨®n usando torturas y armas qu¨ªmicas, y bombardeando hospitales¡±, se a?ade.

El art¨ªculo 30 de la Convenci¨®n contra la Tortura, ratificada por ambos Estados, detalla la ruta legal descrita por el departamento neerland¨¦s de Exteriores en el asunto sirio, ¡°y existe un precedente de uso similar de este tratado en el Tribunal de Justicia de la ONU: el caso de B¨¦lgica contra Senegal, en 2012¡±, dice Asier Garrido Mu?oz, profesor de Derecho Internacional P¨²blico en la Universidad de La Haya para las Ciencias Aplicadas. ¡°Se refer¨ªa al hecho de que Senegal no hubiera juzgado a Hiss¨¨ne Habr¨¦ [antiguo presidente de Chad que recibi¨® asilo pol¨ªtico por parte del Gobierno senegal¨¦s] por actos cometidos durante su presidencia, entre ellos tortura. O de no haberlo extraditado a B¨¦lgica (donde estaba acusado y hab¨ªa una ley de jurisdicci¨®n universal). Al no hacerlo, Senegal hab¨ªa violado la Convenci¨®n contra la tortura, con diferencias obvias entre ambos casos al tratarse de situaciones muy distintas¡±, a?ade, en conversaci¨®n telef¨®nica. Los jueces de la ONU ordenaron a Senegal que juzgara a Habr¨¦, y este acab¨® siendo procesado all¨ª en 2016 y condenado a cadena perpetua por cr¨ªmenes de guerra.

El caso de Siria y la Corte Penal Internacional es distinto. Siria no ha ratificado el Estatuto de Roma, texto fundacional de la corte, y esta carece por tanto de jurisdicci¨®n para juzgar los cr¨ªmenes que se hayan podido cometer all¨ª. El propio Estatuto indica que el Consejo de Seguridad de la ONU podr¨ªa referir el caso, pero Rusia y China votaron en 2014 en contra de una propuesta de resoluci¨®n, que ped¨ªa investigar los cr¨ªmenes de guerra perpetrados en suelo sirio.