Encarceladas y separadas de sus familias, la doble condena de las detenidas por abortar en El Salvador
La Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos escucha las denuncias sobre la situaci¨®n que viven en pandemia las presas en las c¨¢rceles salvadore?as
A las mujeres encarceladas por haber sufrido emergencias obst¨¦tricas en El Salvador -penalizadas bajo el delito de homicidio por aborto involuntario- se les ha negado ver a sus familias con la excusa de la pandemia. Desde hace al menos nueve meses, las organizaciones de derechos humanos que siguen sus casos est¨¢n pidiendo que el pa¨ªs tome medidas urgentes para garantizar sus derechos, pero el Estado no las ha escuchado. Este jueves, ante la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) vuelven a exponer lo que est¨¢n padeciendo las detenidas en el pa¨ªs centroamericano.
Ha sido imposible que haya distanciamiento en las c¨¢rceles de El Salvador, que est¨¢n entre las m¨¢s hacinadas del mundo, y la alteraci¨®n en el r¨¦gimen de visitas -que es la forma en que algunas reciben elementos de aseo y medicinas- ha empeorado las condiciones de estas mujeres, muchas detenidas injustamente, dice Morena Herrera, presidenta de la Agrupaci¨®n Ciudadana por la Despenalizaci¨®n del Aborto. ¡°En estos meses de pandemia hemos pedido que se estudien sus casos y que se les otorgue libertad condicional, pero no han querido escucharnos¡±, denuncia.
Los reclamos de los grupos de derechos humanos no han sido atendidos y tampoco se ha cumplido con una sentencia del Tribunal Constitucional de El Salvador que en julio pasado orden¨® una revisi¨®n urgente de los expedientes de 14 mujeres detenidas por abortar, indicar cu¨¢les son sus condiciones de salud y explicar por qu¨¦ se les ha prohibido que se comuniquen con sus familias. ¡±Las restricciones indebidas al r¨¦gimen de visitas o la incomunicaci¨®n coactiva pueden llegar a constituir formas de tratos crueles, inhumanos o degradantes¡±, se?al¨® el tribunal, que cuestion¨® la inoperancia del sistema judicial ante las solicitudes de las que han cumplido el tiempo en prisi¨®n necesario para lograr beneficios carcelarios.
Carmen Mart¨ªnez, gerente regional para Am¨¦rica Latina y el Caribe del Centro de Derechos Reproductivos, dice que desde que el Tribunal respondi¨® a una acci¨®n jur¨ªdica -interpuesta, entre otras, por su organizaci¨®n- que ped¨ªa contemplar la libertad de 14 presas, ¡°no ha pasado nada¡±, a pesar de que para cumplir con las solicitudes de la justicia hab¨ªa un plazo de apenas unos d¨ªas desde que se emiti¨® la sentencia. ¡°Si no se conced¨ªa su libertad deb¨ªa argumentarse, y con fundamentos de peso, pero no ha pasado nada¡±, insiste.
La poblaci¨®n penitenciaria en El Salvador ha aumentado de 7.800 en el a?o 2000 a m¨¢s de 36.600 este a?o y la CIDH ya ha mostrado su preocupaci¨®n por lo que se vive en los reclusorios de ese pa¨ªs. En diciembre de 2019 asegur¨® que, tras una visita, hab¨ªa constatado ¡°graves violaciones de derechos humanos¡±. El pasado abril alert¨® sobre el riesgo al que estaban expuestos los detenidos con las medidas que se estaban decretando para atajar la covid-19. Este mi¨¦rcoles, la CIDH ha vuelto a poner los ojos en las prisiones de El Salvador, particularmente en la situaci¨®n de las mujeres. ¡°Hemos planteado que se incluya el enfoque de g¨¦nero porque en este pa¨ªs muchas est¨¢n procesadas sin haber cometido ning¨²n delito, por problemas de salud como lo es una complicaci¨®n obst¨¦trica¡±, dice Morena Herrera.
Abogar por la libertad de estas mujeres es lidiar con un sistema que parece no querer escuchar y con el acoso de quienes se oponen a verlas fuera de las prisiones. Herrera cuenta que este a?o ha habido semanas en las que las plataformas digitales de la organizaci¨®n que lidera han sido blanco de al menos 13 intentos de hackeo y d¨ªas en los que hasta 40 personas se han parado en la puerta de la instituci¨®n a rezar y reprocharles, Biblia en mano, el trabajo que hacen por las detenidas.
El Salvador es uno de los seis pa¨ªses de Am¨¦rica Latina donde el aborto est¨¢ penalizado en todas las circunstancias. Tiene uno de los sistemas judiciales m¨¢s duros con las mujeres, que terminan siendo perseguidas por una justicia que no entiende de complicaciones durante el embarazo y las condena con penas de hasta 40 a?os. ¡°Ahora m¨¢s que nunca, especialmente en una pandemia que pone la vida en riesgo, exhortamos a la CIDH para que siga abogando y presione a El Salvador para liberar a estas mujeres injustamente encarceladas¡±, pide Herrera, una vez m¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.