La maldici¨®n electoral fractura a la derecha en un Israel ingobernable

Mientras los contagios alcanzan las tasas m¨¢s altas desde el fin de la segunda ola de la pandemia en octubre, Israel se dirige en rumbo de colisi¨®n hacia las cuartas legislativas en menos de dos a?os. La maldici¨®n electoral ha fracturado ya a la derecha y por primera vez en m¨¢s de una d¨¦cada los sondeos auguran un frente alternativo a la hegemon¨ªa en el poder del conservador Benjam¨ªn Netanyahu. Si un improbable pacto de ¨²ltima hora para aprobar los presupuestos de 2020, u otra maniobra dilatoria, no lo remedia antes de la medianoche del martes, su coalici¨®n con el centrista Benny Gantz saltar¨¢ por los aires y los israel¨ªes volver¨¢n a ser llamados a las urnas en marzo.

El bloqueo pol¨ªtico entre el jefe del Ejecutivo y su socio y ministro de Defensa ha sido m¨¢s fuerte que las promesas del pacto que ambos suscribieron en mayo para poner fin al desgobierno y afrontar las crisis sanitaria y econ¨®mica derivadas de la covid-19. Netanyahu y Gantz ya no se hablan. Ni el Consejo de Ministros ni el Gabinete que gestiona la pandemia se han reunido en las ¨²ltimas fechas, y el l¨ªder centrista parece haberse enterado por la prensa del reciente acuerdo de normalizaci¨®n de relaciones con Marruecos.

Cuando los dos l¨ªderes se dispon¨ªan a instalarse en la coexistencia para capear el temporal de la previsible reimposici¨®n de restricciones para contener la propagaci¨®n del coronavirus, un antiguo delf¨ªn de Netanyahu en el Likud amenaza con dinamitar el castillo de naipes del centroderecha israel¨ª. El exministro y diputado Gideon Saar, que hace ahora un a?o ret¨® sin ¨¦xito al primer ministro en las primarias del partido conservador, ha abandonado su esca?o para crear otra formaci¨®n pol¨ªtica ¡ªNueva Esperanza-Unidad por Israel¡ª seguido por varios parlamentarios.

¡°Si los sondeos (favorables a Saar) no detienen la loca carrera hacia una nueva elecci¨®n, ya nada podr¨¢ detenerla¡±, vaticina el columnista Ben Caspit en las p¨¢ginas de Maariv. La ¨²ltima encuesta del Canal 12 de televisi¨®n sit¨²a al Likud todav¨ªa en cabeza, con 27 de los 120 esca?os en la Kneset (Parlamento), pero predice 21 diputados para el partido liderado por Saar, que se beneficiar¨ªa as¨ª de una sangr¨ªa de votos sufrida tanto por Netanyahu como por Gantz.

De cumplirse estas previsiones, una eventual alianza con el resto de las fuerzas de centroderecha ¡ªde los exministros Yair Lapid, Naftali Benet y Avigdor Lieberman¡ª y de centroizquierda ¡ªde Gantz y el movimiento pacifista Meretz¡ª sumar¨ªa por primera vez desde 2015 una mayor¨ªa alternativa al bloque de la derecha nacionalista¨Creligiosa del Likud y los partidos ultraortodoxos jud¨ªos. El llamamiento a la unidad frente a Netanyahu lanzado por el nacionalista laico Lieberman ha ca¨ªdo por el momento en saco roto.

¡°Para que los partidos del centro y las escisiones de la derecha puedan formar un Gobierno sin Netanyahu, el Likud debe caer por debajo de los 25 esca?os¡±, explica el analista pol¨ªtico Daniel Kupervaser, quien recuerda que el primer ministro cuenta con el respaldo incondicional de los ultrarreligiosos. ¡°Si se convocan elecciones anticipadas en marzo es muy dif¨ªcil predecir resultados¡±, advierte sobre la volatilidad de la pol¨ªtica israel¨ª.

¡°Cualquiera menos Bibi¡±

¡°Al margen de una Administraci¨®n un poco m¨¢s limpia, no cabe esperar cambios significativos (si se produce la alternancia)¡±, concluye Kupervaser. ¡°La ciudadan¨ªa se ha dejado arrastrar por el debate entre ¡®solo Bibi (apodo familiar de Netanyahu)¡¯ o ¡®cualquiera menos Bibi¡¯ mientras cierra los ojos (a los dem¨¢s problemas)¡±.

La izquierda tradicional ¡ªque hace tres d¨¦cadas pilot¨® desde la mayor¨ªa parlamentaria el proceso que condujo a los Acuerdos de Oslo con los palestinos¡ª casi ha desaparecido de la escena electoral en Israel. Los sondeos sit¨²an ya al Partido Laborista como fuerza extraparlamentaria, mientras Meretz bordea el umbral m¨ªnimo de sufragios que da acceso a la C¨¢mara (3,25%).

Despu¨¦s de haberse visto desbordado por la arrolladora victoria de Netanyahu (m¨¢s del 70% de los votos), en las primarias del Likud, Gideon Saar desaf¨ªa de nuevo a su antiguo jefe de filas, quien en las pr¨®ximas semanas tendr¨¢ que enfrentarse a un juicio bajo las acusaciones de fraude y cohecho. Hijo de un m¨¦dico de origen argentino, Saar (Tel Aviv, 54 a?os) se presenta como un nacionalista conservador de rostro humano. Fue sucesivamente ministro de Interior y de Educaci¨®n entre 2009 y 2014, hasta que el primer ministro le conden¨® al ostracismo por haberse aliado en su contra con el presidente del Estado de Israel, el tambi¨¦n dirigente del Likud Reuven Rivlin. Ahora se define en solitario como ¡°defensor de los derechos hist¨®ricos sobre el Gran Israel (que incluye Jerusal¨¦n Este y Cisjordania)¡± y de su ¡°identidad como Estado naci¨®n jud¨ªo¡±.