El moderado y europe¨ªsta Starmer cobra impulso en la carrera para suceder a Corbyn
Los sondeos otorgan una ventaja al diputado laborista frente a quienes buscan mantener el legado del actual dirigente
La carrera para la sucesi¨®n de Jeremy Corbyn como l¨ªder de los laboristas brit¨¢nicos ya tiene un n¨ªtido e inesperado favorito: el moderado y proeuropeo sir Keir Starmer encabeza el primer gran sondeo entre los miembros del partido, que a¨²pan su nombre frente al de la principal aspirante del ala izquierdista, Rebecca Long-Bailey. A una semana de que arranque el proceso oficial para designar al nuevo liderazgo, la figura centrista de Starmer supera a la de la protegida del corbynismo por m¨¢s de 20 puntos.
La consulta de YouGov (publicada este jueves por The Guardian) a 1.059 miembros del laborismo confirma, adem¨¢s, a Starmer como el preferido en todas las regiones del Reino Unido, en todos los segmentos de edad y todas las clases sociales. Preguntados sobre su primera opci¨®n, entre un ramillete de posibles candidatos, un 31% se decanta por Starmer, seguido por el 20% que apoya a Long-Bailey. Pero en una supuesta liza entre los dos, y una vez culminada la criba de otros nombres, el primero se impondr¨ªa con el 61% frente al 39% de su rival.
Lo cierto es que no se trata de un desconocido. Keir Starmer es un abogado especializado en derechos humanos, de 57 a?os, que en principio tiene todo a la contra para liderar las encuestas. Su condici¨®n de londinense le resta puntos, despu¨¦s de que las clases trabajadoras del norte de Inglaterra hayan desertado en masa en las ¨²ltimas elecciones en favor de la bandera nacionalista y hostil a Europa enarbolada con ¨¦xito por los tories. Portavoz laborista para el Brexit, Starmer fue el encargado durante la reciente campa?a electoral de modular el euroescepticismo que late en las convicciones izquierdistas de Corbyn hacia un pragmatismo que subrayaba la debacle econ¨®mica ¡ªy deterioro de las condiciones laborales¡ª que supondr¨ªa una salida abrupta de la UE sin un acuerdo razonable con Bruselas.
A su favor cuenta, adem¨¢s, con la aureola de quien ha defendido las causas m¨¢s nobles y queridas del progresismo en el ejercicio de la abogac¨ªa, para luego desempe?ar la jefatura de la Fiscal¨ªa de la Corona (Crown Prosecution Service). Esa labor le mereci¨® el t¨ªtulo de sir, concedido por la reina, antes de su desembarco en el Parlamento hace menos de un lustro. Todav¨ªa no ha oficializado una candidatura que aparece inminente despu¨¦s de haberse convertido en la gran esperanza del laborismo, no solo de los centristas , sino tambi¨¦n de quienes buscan una correcci¨®n de los postulados radicales de Corbyn que dif¨ªcilmente pueden convertir al partido en una opci¨®n de poder.
El perfil de Long-Bailey, sin embargo, es bien distinto. Esta inglesa norte?a de 40 a?os entronca con el acervo de un laborismo orgulloso de sus bases obreras. Se crio en el barrio del Old Trafford, la sede del popular equipo de f¨²tbol Manchester United, y desempe?¨® toda suerte de trabajos (en el mostrador de una casa de empe?os, en una f¨¢brica de muebles o como empleada del servicio postal) antes de ultimar sus estudios de Derecho. Su perfil de Twitter le define como una ¡°socialista orgullosa¡±, lo que en los par¨¢metros de la pol¨ªtica actual, nos habla de una convencida seguidora del actual dirigente.
Candidata predilecta del ¡°corbynismo sin Corbyn¡±, el que busca perpetuar el legado del l¨ªder saliente con un nuevo rostro, joven y femenino, esta diputada elegida por primera vez en 2005 cuenta ya antes de haber hecho p¨²blica su candidatura con el aval del movimiento izquierdista Momentum. Fue esta ala el que supo movilizar hace casi cinco a?os decenas de miles de votos de las bases y de simpatizantes. Su posici¨®n ante el Brexit es tan ambigua como la de su principal valedor.
Casi en el mismo momento en que Jeremy Corbyn aceptaba ¡ªtras encajar la peor debacle laborista de las ¨²ltimas ocho d¨¦cadas¡ª que deb¨ªa dar v¨ªa libre a un nuevo l¨ªder, emerg¨ªa la primera candidatura a relevarle bajo la firma de Emily Thornberry (59 a?os). Relegada por el corbynismo durante la campa?a electoral por hablar alto y claro contra el Brexit, pero nunca apartada del todo por su demostrada lealtad al partido a lo largo de cuatro d¨¦cadas de militancia, sus seguidores valoran una flexibilidad ideol¨®gica que ven como un b¨¢lsamo en los actuales tiempos de posiciones enconadas.
El valor de una posici¨®n independiente m¨¢s all¨¢ de las consignas de turno tiene en Clive Lewis al otro ¨²nico aspirante oficial al liderazgo. Encarnaci¨®n de un izquierdismo que avala el programa econ¨®mico de Corbyn, a Lewis (48 a?os) se le atragant¨® sin embargo la posici¨®n complaciente del l¨ªder respecto al Brexit, hasta el punto de abandonar en su momento el gabinete laborista en la sombra. Las inquietudes de este diputado laborista desde 2015 se asemejan a las de tantos j¨®venes que adoran la radicalidad de Corbyn, pero al tiempo no quieren verse descabalgados de las oportunidades que les ofrece ser ciudadanos europeos.
La inc¨®gnita en torno al papel que jugar¨¢ el Brexit
Pese a lo que digan las encuestas se trata solo del inicio del pulso que se dirimir¨¢ en el seno del laborismo entre los sectores moderados y los escorados a la izquierda hasta que se decida qui¨¦n acabar¨¢ reemplazando a Jeremy Corbyn al frente de la formaci¨®n el pr¨®ximo mes de marzo.
Las preferencias de los miembros del partido no concuerdan necesariamente con las de una militancia ¡ªni tampoco con las de los simpatizantes que, previo registro, podr¨¢n tambi¨¦n votar en las primarias¡ª m¨¢s alineada con los postulados de Corbyn. A ello se suma la inc¨®gnita del papel que jugar¨¢ puede acabar jugando el factor Brexit, que culminar¨¢, si el calendario se cumple, el pr¨®ximo d¨ªa 31. El impacto de la salida y el inicio de la negociaci¨®n con Bruselas pueden jugar un papel en esta elecci¨®n. Ah¨ª es destacable que los eur¨®filos duplican a los euroesc¨¦pticos a la hora de apoyar a Keir Starmer. En el caso de Long-Bailey la ecuaci¨®n aparece a la inversa y tiene m¨¢s partidarios entre los que muestran su hostilidad hacia la Uni¨®n Europea.
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