Dinamarca aprueba una ley para enviar a los solicitantes de asilo a pa¨ªses fuera de la Uni¨®n Europea

Dinamarca ha aprobado este jueves una ley que prev¨¦ abrir centros para solicitantes de asilo en pa¨ªses fuera de la Uni¨®n Europea. El Gobierno pretende enviar a esos pa¨ªses a los peticionarios que lleguen a su territorio mientras se tramita su caso. Pero la que es la ¨²ltima medida antinmigraci¨®n del Gobierno socialdem¨®crata dan¨¦s para disuadir a potenciales solicitantes de asilo no solo prev¨¦ que los aspirantes deban esperar en esos pa¨ªses la posible concesi¨®n, sino que incluso si se les aprueba deber¨¢n permanecer en esos Estados, entre los que la prensa danesa cita a Eritrea y Ruanda. No obstante, el Ejecutivo dan¨¦s deber¨¢ encontrar primero pa¨ªses dispuestos a aceptar centros de acogida a cambio de una compensaci¨®n econ¨®mica.

La ley se ha aprobado en el Parlamento con la oposici¨®n de algunos partidos de izquierda, pero ha contado con el apoyo de la derecha y la extrema derecha. Las medidas que prev¨¦ la norma se suman a otras adoptadas por el Gobierno dan¨¦s de centroizquierda, muy criticadas a causa de su car¨¢cter restrictivo por organizaciones de derechos humanos como Amnist¨ªa Internacional.

Algunas de estas disposiciones legales, cuyo objetivo ¨²ltimo es alcanzar la entrada de ¡°cero refugiados¡± anunciado por las autoridades danesas, son la retirada de permisos de residencia a ciudadanos sirios porque sus regiones de origen se consideran ya ¡°seguras¡± a ojos del Gobierno de Copenhague y una ley antiguetos que limita el n¨²mero de habitantes ¡°no occidentales¡± de los barrios.

Seg¨²n el ¨²ltimo proyecto de ley, una vez registrada su solicitud y salvo raras excepciones ¡ªcomo una enfermedad grave¡ª, los demandantes de asilo en Dinamarca ser¨¢n enviados a un centro de acogida fuera de la Uni¨®n Europea. Si no se les concede el estatuto de refugiado, se les pedir¨¢ que abandonen el pa¨ªs anfitri¨®n.

Quienes s¨ª obtengan ese estatuto, y la consiguiente protecci¨®n internacional, tampoco podr¨¢n volver al pa¨ªs europeo. ¡°En el plan del Gobierno, los solicitantes que obtengan el asilo, simplemente tendr¨¢n el estatuto de refugiado en ese tercer pa¨ªs [el de acogida]¡±, dice Martin Lemberg-Pedersen, especialista en temas de migraci¨®n de la Universidad de Copenhague.

La tramitaci¨®n de las solicitudes se confiar¨¢ a esos pa¨ªses extracomunitarios a cambio de una compensaci¨®n econ¨®mica. Por el momento, ning¨²n Estado ha aceptado acoger un proyecto de este tipo, pero el Gobierno dan¨¦s asegura estar en conversaciones con entre cinco y diez pa¨ªses que no ha identificado. La prensa danesa menciona a Egipto, Eritrea y Etiop¨ªa, pero sobre todo a Ruanda, un pa¨ªs que en su momento se plante¨® acoger solicitantes de asilo procedentes de Israel. A finales de abril, el Gobierno dan¨¦s firm¨® un memorando de entendimiento con Kigali sobre cooperaci¨®n en materia de asilo y migraci¨®n.

Aunque ese documento no mencionaba la externalizaci¨®n del procedimiento de asilo, su anuncio suscit¨® duras cr¨ªticas de Amnist¨ªa Internacional. La organizaci¨®n de derechos humanos advirti¨® a las autoridades danesas de la posible ilegalidad de un pacto de este tipo, que violar¨ªa los derechos que la ley internacional otorga a los refugiados pol¨ªticos y a quienes aspiran a serlo.

Las autoridades danesas han salido al paso de estas cr¨ªticas aseverando que respetar¨¢n la legalidad internacional. Este sistema ¡°debe establecerse, por supuesto, en el marco de los convenios internacionales. Esto ser¨¢ una condici¨®n previa para un acuerdo con un tercer pa¨ªs¡±, declar¨® a la agencia France Presse el ministro de Migraci¨®n dan¨¦s, Mattias Tesfaye. El ministro defendi¨® el mes pasado que el contenido de este tipo de acuerdos no afecta a la ¡°calidad democr¨¢tica¡± de su pa¨ªs.

Pol¨ªticas de ¡°extrema derecha¡±

El proyecto para externalizar a pa¨ªses terceros la gesti¨®n de las solicitudes de asilo pol¨ªtico, defendido a capa y espada por la primera ministra, Mette Frederiksen, constituye un giro de 180 grados de la socialdemocracia danesa en materia de migraci¨®n. Tambi¨¦n ¡°la generalizaci¨®n a casi todo el espectro pol¨ªtico de propuestas antes defendidas solo por la extrema derecha¡±, a juicio del polit¨®logo Kasper Hansen, profesor de la Universidad de Copenhague.

Cuando se cumplen cinco a?os de la aprobaci¨®n de una pol¨¦mica ley que permite la incautaci¨®n de los bienes de valor de los inmigrantes que entran en Dinamarca ¡ªque suscit¨® un gran esc¨¢ndalo internacional, pero que se ha aplicado en pocas ocasiones¡ª, las autoridades danesas siguen profundizando su estrategia de disuasi¨®n hacia potenciales demandantes de asilo en ese pa¨ªs.

En 2019, solo 761 personas obtuvieron asilo en el pa¨ªs n¨®rdico, mientras que en 2020 esta cifra se redujo a 600, frente a las m¨¢s de 10.000 solicitudes aprobadas en 2015. Dinamarca acoge, en proporci¨®n a sus habitantes, una d¨¦cima parte de refugiados que sus vecinos alemanes o suecos.

¡°Este proyecto es la continuaci¨®n de una pol¨ªtica simb¨®lica; es un poco como Donald Trump y su muro¡±, precisa Tim Whyte, secretario general de la ONG ActionAid Dinamarca.

La en¨¦sima vuelta de tuerca en relaci¨®n con la cuesti¨®n del asilo pol¨ªtico en Dinamarca preocupa a las organizaciones internacionales. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) considera que las pol¨ªticas danesas son ¡°contrarias a los principios en los que se basa la cooperaci¨®n internacional en materia de refugiados¡±.

¡°Al iniciar un cambio tan dr¨¢stico y restrictivo (...), Dinamarca se arriesga a desencadenar un efecto domin¨®, en el que otros pa¨ªses de Europa y en las regiones vecinas tambi¨¦n explorar¨¢n las posibilidades de limitar la protecci¨®n de los refugiados en su propio territorio¡±, subraya el representante de ACNUR en los pa¨ªses n¨®rdicos, Henrik Nordentoft.

Seg¨²n Tim Whyte, de ActionAid, para Dinamarca esta es una forma de desvincularse de los compromisos asumidos ante sus socios europeos, a pesar de disfrutar ya de varias excepciones a las normas comunitarias en materia de asilo y migraci¨®n. Una de ellas consagra la no aplicaci¨®n de las normas comunitarias relativas a la reagrupaci¨®n familiar de los migrantes, lo que permite a Copenhague imponer las suyas propias.

¡°Los refugiados buscar¨¢n asilo en Alemania, Francia y Suecia. Esto [el proyecto de ley dan¨¦s] no les impedir¨¢ cruzar el Mediterr¨¢neo, simplemente no vendr¨¢n m¨¢s a Dinamarca, que de esta manera se exime de su responsabilidad¡±, afirm¨® Whyte.