Las relaciones entre Espa?a y Marruecos, pendientes de la justicia europea

La justicia europea promulgar¨¢ este mi¨¦rcoles dos sentencias clave para la relaci¨®n entre Marruecos y la Uni¨®n Europea. Las decisiones del Tribunal General de la Uni¨®n Europea, con incidencia en el S¨¢hara Occidental, pueden dinamitar las relaciones que mantiene Marruecos con la UE y sobre todo, con su principal socio, que es Espa?a, si resultan desfavorables para Marruecos al anular los acuerdos agr¨ªcola y pesquero que vinculan a Rabat con Bruselas.

El tribunal deber¨¢ pronunciarse sobre sendos recursos que plante¨® el Frente Polisario en abril y junio de 2019 con el fin de suprimir por un lado el acuerdo de libre comercio y productos agr¨ªcolas firmado entre Rabat y la UE y, por otro, el acuerdo pesquero refrendado en 2019 entre ambas partes. Los intereses en juego van mucho m¨¢s all¨¢ de los 128 barcos (93 de ellos espa?oles) que faenan en aguas saharauis amparadas. Para Marruecos, buena parte de su pol¨ªtica exterior, desde los acuerdos sobre emigraci¨®n irregular a la cooperaci¨®n contra el terrorismo islamista, se supeditan en gran parte a que los Estados miembros no cuestionen su control sobre el S¨¢hara Occidental.

Las relaciones entre Marruecos y Espa?a se vieron notablemente perjudicadas desde que el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decret¨® el pasado diciembre el reconocimiento de la soberan¨ªa de Marruecos sobre el S¨¢hara Occidental. Ese mismo d¨ªa, Rabat suspendi¨® la cumbre bilateral o Reuni¨®n de Alto Nivel (RAN) cuya celebraci¨®n estaba prevista para la semana siguiente en Rabat. Cuatro meses despu¨¦s, Espa?a acogi¨® al l¨ªder del Frente Polisario, Brahim Gali, en un hospital de Logro?o sin anunci¨¢rselo a Rabat y eso desencaden¨® otra crisis, agravada con la entrada en mayo de 10.000 personas en Ceuta desde territorio marroqu¨ª. Pero la cumbre bilateral sigui¨® sin celebrarse. Marruecos llam¨® a consultas a su embajadora en Madrid, Karima Benyaich, como protesta. Y Benyaich contin¨²a en Rabat, a pesar de que la ministra de Exteriores que autoriz¨® la entrada de Gali, Arancha Gonz¨¢lez Laya, fue destituida.

El sucesor de Gonz¨¢lez Laya, Jos¨¦ Manuel Albares, est¨¢ intentando recomponer las relaciones con Rabat. Pero a¨²n no ha logrado consensuar un viaje a Marruecos. En medio de este contexto, todos los ojos miran hacia el Tribunal General de la UE. Las dos sentencias de ma?ana podr¨¢n recurrirse, en cualquier caso, ante el Tribunal de Justicia de la UE, la m¨¢s alta instituci¨®n judicial en el bloque comunitario. Pero este organismo ya se ha pronunciado en dos ocasiones, en 2015 y 2016, respecto al acuerdo agr¨ªcola, y en 2018, respecto al pesquero. El Tribunal, con sede en Luxemburgo, ha dictaminado en varias ocasiones que el S¨¢hara Occidental ¡°no forma parte del Reino de Marruecos¡±. Para sortear las objeciones de la justicia, el arreglo que se alcanz¨® en el ¨²ltimo acuerdo consisti¨® en dictaminar que, en todo caso, el pacto deb¨ªa redundar en el beneficio econ¨®mico del S¨¢hara Occidental. El Frente Polisario objeta que esa condici¨®n se haya cumplido.

El letrado Gilles Devers, defensor del Frente Polisario, advierte de que si el Tribunal General de la UE anula este mi¨¦rcoles el acuerdo de pesca habr¨¢ una consecuencia inmediata: ¡°Todos los barcos europeos que pescan en el S¨¢hara Occidental deber¨¢n abandonar de inmediato esas aguas¡±. Devers se?ala que incluso si el Consejo Europeo ¨Drepresenta a los Estados miembros de la UE¨D decide recurrir la sentencia, ese recurso no tendr¨¢ la capacidad de suspenderla.

Por su parte, Oubi Bucharaya, representante del Frente Polisario ante la Uni¨®n Europea, admite tambi¨¦n su optimismo, aunque alega que ¡°no se puede vender la piel del oso antes de cazarlo¡±. No obstante, recuerda que ya hubo dos sentencias del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE), en 2015 y 2018, que reconoc¨ªan que el S¨¢hara Occidental es un territorio distinto de Marruecos. ¡°Adem¨¢s, se dictamin¨® que cualquier acuerdo comercial deber¨ªa tener el consentimiento del pueblo saharaui. Y se reconoci¨® a nuestra organizaci¨®n como ¨²nico representante del pueblo saharaui. Esperamos que ahora el Tribunal General anule los acuerdos y consolide la personalidad jur¨ªdica del Frente Polisario¡±.

Productos saharauis

El Tribunal de Justicia de la UE, con sede en Luxemburgo, anul¨® en diciembre de 2015 un acuerdo comercial firmado en 2012 entre Rabat y Bruselas por el cual Marruecos pod¨ªa vender productos cosechados en el S¨¢hara Occidental. La instituci¨®n reproch¨® al Consejo Europeo -que representa a los Estados miembros- que no tuvieran en cuenta ¡°que la soberan¨ªa del Reino de Marruecos sobre el S¨¢hara occidental no est¨¢ reconocida ni por la Uni¨®n Europea ni por sus Estados miembros ni, de manera m¨¢s general, por la ONU¡±, seg¨²n el fallo. En 2016, sin embargo, el tribunal dio la raz¨®n a la UE, permitiendo a la aplicaci¨®n del tratado, aunque dejando claro que en ning¨²n caso el S¨¢hara occidental pertenece a Marruecos, y que por tanto este no puede exportar productos saharauis como propios.

Tres a?os despu¨¦s, en febrero de 2018, el mismo tribunal sentenci¨® que el acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos no es aplicable al S¨¢hara Occidental, porque ese territorio ¡°no forma parte del Reino de Marruecos¡±. El 90% de las capturas europeas provienen de esa zona.

Para sortear este obst¨¢culo, la Comisi¨®n Europea realiz¨® consultas con asociaciones de la sociedad civil en el S¨¢hara Occidental bajo control de Marruecos con el objetivo de garantizar que el acuerdo de pesca repercut¨ªa positivamente en el territorio. Pero en ellas no particip¨® el Frente Polisario, que reivindica su condici¨®n de ¡°¨²nico y leg¨ªtimo representante del pueblo saharaui¡±, seg¨²n Naciones Unidas. El Consejo de ministros de la UE dio luz verde al nuevo acuerdo de pesca en noviembre de 2018, solo nueve meses despu¨¦s de la sentencia. El Parlamento Europeo lo refrend¨® en febrero de 2019, con 415 votos a favor y 189 en contra. Y en julio de ese a?o, los barcos espa?oles volvieron a faenar en el S¨¢hara Occidental.

El acuerdo tiene cuatro a?os de vigencia y Rabat percibe de forma escalonada m¨¢s de 50 millones de euros anuales, en calidad de compensaci¨®n, en lugar de los 40 millones del anterior protocolo.

El grupo de Los Verdes/ALE encabez¨® la batalla en el Parlamento Europeo, junto con la sociedad civil saharaui, contra ambos acuerdos. Esta formaci¨®n los tach¨® de ¡°legalmente infundados, moralmente repugnantes y geopol¨ªticamente insostenibles¡±. La eurodiputada belga Saskia Bricmont, del grupo de Los Verdes, se?ala: ¡°Si el Tribunal confirma que la UE no ha respetado el derecho europeo e internacional y anula los acuerdos, esperamos que la Comisi¨®n, el Parlamento y los Estados miembros vuelvan por fin al estado de derecho y dejen de alimentar una ocupaci¨®n y una anexi¨®n ilegales mientras una naci¨®n vive en campos de refugiados¡±.

Este peri¨®dico ha intentado sin ¨¦xito recabar la versi¨®n del Ministerio de Exteriores marroqu¨ª sobre los recursos planteados ante el tribunal.

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