EE UU, preocupado ante el avance de China en Latinoam¨¦rica
Washington presiona a la nueva presidenta de Honduras, Xiomara Castro, para que mantenga las relaciones con Taiw¨¢n, tras la ruptura del r¨¦gimen de Daniel Ortega con la Isla y el acercamiento de otros pa¨ªses latinoamericanos a Pek¨ªn

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La embajadora nominada por el Gobierno de Joe Biden para representar a su pa¨ªs en Honduras, Laura Dogu, llegar¨¢ a Tegucigalpa con una misi¨®n que Washington considera estrat¨¦gica: convencer a la presidente Xiomara Castro de que mantenga sus relaciones con Taiw¨¢n, la isla que China considera rebelde y cuya diplomacia ha estado centrada en repartir millones de d¨®lares a los pa¨ªses centroamericanos a cambio de que reconozcan su soberan¨ªa. A pesar de ese apoyo, Centroam¨¦rica cada vez m¨¢s vuelve a ver a China y Taiw¨¢n pierde poco a poco sus aliados en la regi¨®n. El ¨²ltimo en romper relaciones con la isla ha sido el r¨¦gimen de Daniel Ortega, que incluso embarg¨® la sede diplom¨¢tica taiwanesa en Managua. Ortega, desesperado por hallar apoyos tras el aislamiento impuesto por la comunidad internacional, incluso ha enviado a sus hijos a China como emisarios, con la esperanza de obtener un nuevo salvavidas que le permita mantener su r¨¦gimen autoritario.
La abrupta ruptura de Ortega tom¨® por sorpresa al Gobierno taiwan¨¦s, que se hab¨ªa convertido en el principal aliado del r¨¦gimen, en una relaci¨®n muy criticada en Nicaragua: mientras la comunidad internacional aislaba a Ortega, Taiw¨¢n mantuvo su financiamiento en Managua a pesar de la brutal represi¨®n contra multitudinarias manifestaciones que exig¨ªan un cambio de tim¨®n, el asesinato de centenares de manifestantes, el encarcelamiento de opositores, el cierre de medios de comunicaci¨®n y las denuncias sucesivas de violaciones a los derechos humanos.
La sede diplom¨¢tica taiwanesa, interesada en mantener el reconocimiento de Managua, mantuvo un elocuente silencio frente a estas atrocidades. Taiw¨¢n financiaba 27 proyectos en ¨¢reas de producci¨®n de alimentos, cultivos de frutales y cr¨ªa de cerdos de calidad superior, por valor de entre 30 millones y 50 millones de d¨®lares, seg¨²n datos del Gobierno nicarag¨¹ense. ¡°Lamentamos que el Gobierno del presidente Ortega haya hecho caso omiso de los muchos a?os de amistad entre los pueblos de Taiw¨¢n y de Nicaragua¡±, expres¨® el ministerio de Exteriores taiwan¨¦s. ¡°Como miembro de la comunidad internacional, Taiw¨¢n tiene el derecho a intercambios y al desarrollo de relaciones diplom¨¢ticas con otros pa¨ªses¡±, agreg¨®. Washington fue el primer pa¨ªs en criticar la decisi¨®n de Ortega y asegur¨® que Taiw¨¢n da ¡°beneficios econ¨®micos y de seguridad significativos a los ciudadanos de aquellos pa¨ªses¡± con los que mantiene lazos diplom¨¢ticos.
La ruptura fue violenta y humillante, a tal punto que Ortega orden¨® la confiscaci¨®n de la sede diplom¨¢tica de Taiw¨¢n en Managua, que la Isla hab¨ªa vendido de forma simb¨®lica a la Iglesia cat¨®lica nicarag¨¹ense. ¡°Taiw¨¢n emprender¨¢ los procedimientos legales internacionales apropiados para proteger su propiedad diplom¨¢tica y garantizar que Nicaragua rinda cuentas por su acto, il¨ªcito desde el punto de vista del derecho internacional¡±, inform¨® el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado. Para Taipei, la confiscaci¨®n de su embajada ¡°forma parte de la intenci¨®n expl¨ªcita y agresiva de China de anexionarse Taiw¨¢n, lo que contraviene gravemente las normas internacionales y da?a la paz y la estabilidad regionales.
Aunque las relaciones con una potencia como China pueden traer beneficios econ¨®micos a Nicaragua (se trata de un mercado inmenso de 1.400 millones de personas y con una industria que exporta productos a un menor costo), Tiziano Breda, analista para Centroam¨¦rica del International Crisis Group, estima que tambi¨¦n puede tener ventajas pol¨ªticas para un r¨¦gimen autoritario como el de Ortega. ¡°China ofrece una oportunidad de respaldo en foros multilaterales como el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, o la misma ONU. Tambi¨¦n puede hacer contrapeso a la cr¨ªtica internacional sobre ciertas cuestiones internas de parte de Estados Unidos o Europa¡±, explica Breda, en referencia a las exigencias de Washington y Bruselas de liberar a los presos pol¨ªticos, denunciar los abusos a los derechos humanos y exigir elecciones libres y transparentes en Nicaragua. ¡°Cuando se intent¨® llevar a Nicaragua ante el Consejo de Seguridad de la ONU, China y Rusia se opusieron, vetaron un proyecto de resoluci¨®n¡±, recuerda Breda. ¡°Creo que al final de cuentas lo que busca Daniel Ortega es insertar a Nicaragua en esta contienda geopol¨ªtica entre estas tres potencias [EE UU, China y Rusia] e incomodar a Estados Unidos¡±, advierte el analista.
A Taiw¨¢n le ayuda cada vez menos su diplomacia del d¨®lar y el derroche de millones entre sus aliados, principalmente latinoamericanos. Nicaragua es el octavo pa¨ªs que abandona a Taiw¨¢n por China en cinco a?os, despu¨¦s de Burkina Faso, Rep¨²blica Dominicana, Sao Tom¨¦ y Pr¨ªncipe, Panam¨¢, El Salvador, las islas Salom¨®n y Kiribati. Ello deja al Gobierno de Taipei con solo catorce pa¨ªses con los que mantiene relaciones diplom¨¢ticas formales, concentrados principalmente en Am¨¦rica Latina y el Caribe, informa Macarena Vidal Liy. A inicios de febrero, el presidente de Argentina, Alberto Fern¨¢ndez, inici¨® una gira de cinco d¨ªas por Rusia y China para atraer inversiones. China aspira a invertir miles de millones de d¨®lares en el pa¨ªs sudamericano, en proyectos que incluyen desde represas en la Patagonia a una central nuclear en la provincia de Buenos Aires.
Este avance de China en la regi¨®n mantiene preocupada a la Administraci¨®n del presidente estadounidense Joe Biden, quien ha encargado a la embajada Laura Dogu, designada como su representante en Tegucigalpa, una estrategia de contenci¨®n para evitar que el Gobierno de Xiomara Castro rompa relaciones con Taiw¨¢n, una decisi¨®n que la mandataria hab¨ªa contemplado durante su campa?a, aunque tras su toma de posesi¨®n asegur¨® que mantendr¨¢ los lazos con la isla.
Durante su audiencia de confirmaci¨®n ante el Senado, en Washington, el 9 de febrero, Dogu asegur¨® que trabajar¨¢ para ¡°fomentar¡± la relaci¨®n de Honduras con Taiw¨¢n. ¡°Si soy confirmada, dejar¨¦ en claro la importancia de la relaci¨®n Honduras-Taiw¨¢n y har¨¦ todo lo posible para mejorar las asociaciones de Honduras con otras democracias¡±, dijo la diplom¨¢tica. Para Washington el tema es tan importante que hasta algunos senadores han hecho un llamado a Castro para que no se deje convencer por las promesas de Pek¨ªn. El republicano Marco Rubio, f¨¦rreo cr¨ªtico de gobiernos de izquierda en la regi¨®n, catalog¨® a la isla como ¡°un modelo¡± y exigi¨® a Dogu ¡°usar su amplia experiencia diplom¨¢tica previa, incluidos en lugares muy dif¨ªciles como Nicaragua¡±, para que Honduras se mantenga como aliada de Taiw¨¢n.
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