Macron decreta el ¡°fin de la abundancia¡± y pide ¡°esfuerzos¡± y ¡°sacrificios¡± a los franceses
El presidente franc¨¦s abre el curso pol¨ªtico ante un invierno bajo la amenaza de los recortes y de la crisis
Emmanuel Macron ha pedido este mi¨¦rcoles a los franceses ¡°esfuerzos¡± y ¡°sacrificios¡± ante un oto?o y un invierno amenazados por los recortes energ¨¦ticos, la inflaci¨®n y la recesi¨®n. El presidente franc¨¦s considera que la agresi¨®n rusa contra Ucrania, unida a los efectos acelerados del cambio clim¨¢tico, rompen una triple ilusi¨®n: que los recursos naturales eran inagotables, que la democracia acabar¨ªa triunfando irremediablemente, y que la guerra era una cosa del pasado.
¡°Vivimos un momento de gran convulsi¨®n¡±, ha dicho Macron al inicio del primer Consejo de Ministros, tras una pausa veraniega marcada por la sequ¨ªa, la can¨ªcula y los incendios, y en el arranque del primer curso pol¨ªtico del nuevo quinquenio, despu¨¦s de salir reelegido en mayo. ¡°Es el fin de lo que pod¨ªa parecer una abundancia: la de la liquidez [monetaria] sin coste (...); la de los productos y tecnolog¨ªas que parec¨ªan perpetuamente disponibles, como vimos en la ¨¦poca de la covid, pero ahora lo vemos con m¨¢s fuerza (...); y el fin de la abundancia de tierras y de materias, y del agua¡±.
Macron continu¨® con su an¨¢lisis: ¡°Tambi¨¦n es el fin de las evidencias si miramos a Francia, Europa y el curso del mundo. Si alguien pensaba que la democracia y los derechos humanos era la teleolog¨ªa del orden internacional, los ¨²ltimos a?os han roto algunas evidencias, con el ascenso de los reg¨ªmenes iliberales y el reforzamiento de los discursos autoritarios¡±. Y remach¨®: ¡°Y es el fin, para quien la tuviese, de una forma de despreocupaci¨®n. Hace seis meses la guerra regres¨® en Europa (...). Del mismo modo, la crisis clim¨¢tica, con todas sus consecuencias, est¨¢ aqu¨ª. Y a eso se a?ade el riesgo cibern¨¦tico¡±.
El discurso de Macron ten¨ªa un objetivo doble. Primero, preparar a sus ministros ante un curso pol¨ªtico en el que, como otros a?os, se extiende el temor a la explosi¨®n social en la calle. El sindicato CGT ya ha convocado las primeras jornadas de protesta a finales de septiembre. Que los costes de la energ¨ªa puedan destapar malestares profundos y desencadenar revueltas espont¨¢neas qued¨® demostrado hace cuatro a?os con los chalecos amarillos. Nadie lo ha olvidado. Y el cierre temporal de decenas de reactores nucleares, en proceso de revisi¨®n, puede agravar las restricciones el¨¦ctricas en invierno.
El nuevo contexto pol¨ªtico, con un Gobierno sin mayor¨ªa absoluta en la Asamblea Nacional tras las legislativas de junio, lo complica todo para el presidente. Y las pol¨¦micas t¨ªpicas del verano ¡ªen las ¨²ltimas semanas, una actividad de ocio con karts en una prisi¨®n, y la posibilidad de prohibir los vuelos privados han ocupado buena parte de la actualidad televisiva¡ª han dejado a varios ministros en mala posici¨®n. ¡°No cedamos a la demagogia, que florece en todas las democracias, en un mundo complejo y que da miedo¡±, inst¨® Macron.
La oposici¨®n ha criticado el discurso del presidente. ¡°Vivimos el fin de la abundancia¡¯, dice el presidente, que hace dos semanas posaba con orgullo sobre su jet-ski [moto de agua]¡±, ha escrito en su cuenta de Twitter la diputada de La Francia Insumisa Aur¨¦lie Trouv¨¦. La pol¨ªtica alud¨ªa a las fotos publicadas en la prensa de Macron con una moto de agua por el Mediterr¨¢neo. Philippe Martinez, secretario general de la CGT, ha declarado: ¡°Cuando se habla del fin de la abundancia, yo pienso en los millones de desempleados, los millones de precarios, sobre todo mujeres, y en los que viven con el salario m¨ªnimo. Para muchos franceses los tiempos son duros, los sacrificios ya est¨¢n aqu¨ª.¡±
El segundo objetivo de la intervenci¨®n era explicar a los franceses el porqu¨¦ de los sacrificios que les esperan. La ¡°sobriedad energ¨¦tica¡± es el nuevo mantra del Gobierno franc¨¦s, que ha fijado el objetivo de una reducci¨®n del consumo energ¨¦tico en un 10% en los pr¨®ximos dos a?os respecto a los niveles de 2019. La nueva primera ministra, ?lisabeth Borne, debe presentar un plan detallado en septiembre.
El esfuerzo pedag¨®gico lo exige, sobre todo, la guerra. La extrema derecha, reforzada tras las legislativas, pide el fin de las sanciones a Rusia pues, seg¨²n su l¨ªder, Marine Le Pen, ¡°no sirven para nada, si no es para hacer sufrir a los pueblos europeos y al pueblo franc¨¦s¡±.
Es un argumento que puede calar en la sociedad y que encuentra apoyos en la izquierda. De ah¨ª que Macron lleve d¨ªas ensayando una versi¨®n del ¡°sangre, sudor y l¨¢grimas¡± de Winston Churchill, una ret¨®rica que practic¨® en 2020 durante la pandemia y que recupera en este verano de guerra y cat¨¢strofes medioambientales. Lo repiti¨® el mi¨¦rcoles: ¡°Nuestro r¨¦gimen de libertad tiene un coste que puede exigir sacrificios¡±.
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