Lula acusa a Bolsonaro de mentir en un debate final tenso y repleto de ataques

Brasil asisti¨® este jueves por la noche al debate final televisado de las elecciones m¨¢s re?idas y decisivas de los ¨²ltimos tiempos. El favorito en la carrera electoral, el expresidente Lula da Silva, de 76 a?os, respondi¨® una a una las acusaciones de corrupci¨®n que le llovieron desde todos los lados. ¡°Gracias a lo que hicimos para combatir la corrupci¨®n, fue descubierta y los culpables fueron castigados¡±, dijo. Hubo varios momentos notablemente agresivos como cuando el presidente Jair Bolsonaro, de 67 a?os, llam¨® a Lula ¡°mentiroso, expresidiario, traidor a la patria¡±. En el cara a cara, organizado por el canal Globo, participaron otros cinco candidatos al cargo que est¨¢n por debajo del 6%. Los ¨²ltimos sondeos apuntan a que Lula tendr¨ªa opciones de vencer en primera vuelta el pr¨®ximo domingo por la m¨ªnima.

A tres d¨ªas de la votaci¨®n, el debate era considerado como un momento crucial para que Lula, que encabeza todas las encuestas desde hace meses, pudiera sentenciar el duelo que libra con el presidente Bolsonaro. Consisti¨® en tres horas de preguntas, avanzada la noche, entre los siete candidatos, incluido un falso sacerdote de la Iglesia ortodoxa que estaba all¨ª para hacer preguntas amables a Bolsonaro y que pudiera explayarse sobre las acciones de Gobierno de las que se enorgullece, como la paga de 600 reales a 20 millones de compatriotas pobres.

Poco antes del inicio del pulso televisado, la estrella de la selecci¨®n brasile?a, Neymar, pidi¨® el voto para Jair Bolsonaro en un v¨ªdeo colgado en TikTok, donde tiene m¨¢s de ocho millones de seguidores. Es un valioso apoyo para el mandatario, que va segundo en las encuestas a 14 puntos de Lula, que seg¨²n el Datafolha difundido este jueves lograr¨ªa el 50% de los votos v¨¢lidos.

¡°Yo no lo voy a ver porque mi voto ya est¨¢ decidido. Voy a votar a Lula porque es el ¨²nico que puede echar a Bolsonaro¡±, explicaba Nedivaldo de Souza, t¨¦cnico de laboratorio. El duelo electoral televisado comenz¨® a las 22.30, justo despu¨¦s del cap¨ªtulo diario de la telenovela estrella de Globo, Pantanal. Como muchos brasile?os, el se?or Souza tiene reticencias hacia Lula pero lo considera el ¨²nico capaz de derrotar al actual presidente. ¡°A m¨ª me gustar¨ªa que ganara (Simone) Tebet (de centro-derecha), que es inteligente, una intelectual¡±, dec¨ªa este trabajador que por las noche conduce un Uber para poder llegar a fin de mes. Cuenta que hace cuatro a?os vot¨® nulo. Pero ahora su prioridad es echar a Bolsonaro, sobre todo, por la gesti¨®n de la pandemia.

Lula mostr¨® una actitud muy distinta de la exhibida en el ¨²nico cara a cara que hab¨ªa tenido hasta ahora con Bolsonaro. Esta vez el izquierdista estuvo a la ofensiva, sin dejar de replicar ninguna de las m¨²ltiples ocasiones en las que fueron mencionados los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n que sacudieron al Partido de los Trabajadores (PT) y a ¨¦l mismo. Y se quej¨® una y otra vez sobre Bolsonaro: ¡°Es insana la desfachatez con la que miente¡±, dijo el l¨ªder del PT, que durante dos d¨ªas se ha encerrado a preparar el duelo televisado. Las condenas contra ¨¦l por corrupci¨®n fueron anuladas por el Tribunal Supremo por defectos de forma. Otros casos contra ¨¦l fueron archivados o result¨® absuelto.

El presidente Bolsonaro tambi¨¦n oy¨® referencias a los variados casos de supuesta corrupci¨®n que han ido floreciendo en el Gobierno y en su entorno familiar desde que lleg¨® al poder, como los presuntos sobornos en el Ministerio de Educaci¨®n o los sueldos ficticios aparentemente pagados por su primog¨¦nito, el senador Fl¨¢vio, a miembros de su Gabinete en los tiempos en que era concejal en R¨ªo de Janeiro.

Los dos favoritos quedaron quedaron bastante desdibujados entre los siete candidatos y las barrocas reglas para repartir intervenciones, preguntas y tiempos. Tanto Lula como Bolsonaro aprovecharon los turnos de r¨¦plica para ir contestando a las acusaciones.

El ultraderechista arranc¨® el debate con una salva de acusaciones en las que incluy¨® su repertorio favorito. Aparecieron la llamada ideolog¨ªa g¨¦nero, el riesgo de que Brasil se convierta en una Nicaragua, la combinaci¨®n ni?os y sexo, y hasta el misterioso asesinato de un antiguo alcalde que persigue al PT de Lula desde hace d¨¦cadas. En otro momento agit¨® el miedo a la izquierda mencionando las camisetas del Che Guevara, ¡°asesino de sacerdotes¡± despu¨¦s de haber afirmado: ¡°No podemos volver a la fase anterior, esto era realmente una cleptocracia¡±.

La nota extravagante la puso el falso padre Kelmon Souza, que se ha hecho famoso en esta campa?a electoral. Ascendi¨® a candidato presidencial despu¨¦s de que el cabeza de lista de su partido fuera vetado por una antigua condena por corrupci¨®n. Acudi¨® vestido con un h¨¢bito de cura ortodoxo aunque pertenece a una agrupaci¨®n no reconocida por la instituci¨®n religiosa.

Brasil no tiene jornada de reflexi¨®n. Hasta el s¨¢bado los candidatos har¨¢n m¨ªtines --Lula viaja este viernes a tres Estados-- y se publicar¨¢n encuestas. La mayor democracia latinoamericana se aproxima al final de una campa?a electoral que empez¨® hace m¨¢s de dos a?os, cuando Lula fue pol¨ªticamente rehabilitado por los jueces. De un d¨ªa para otro, Bolsonaro, que hab¨ªa gobernado al principio de su mandato pr¨¢cticamente sin oposici¨®n, se encontr¨® con un adversario de envergadura. Si ninguno de los aspirantes logra el 50% de los votos v¨¢lidos, habr¨¢ una segunda vuelta dentro de cuatro semanas.

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