T¨²nez se adentra en un callej¨®n sin salida tras el fiasco en las urnas del r¨¦gimen

T¨²nez se ha adentrado en un callej¨®n sin salida que amenaza la estabilidad de la ¨²nica democracia surgida hace una d¨¦cada de la ola de revueltas de la Primavera ?rabe. Los ciudadanos dieron el s¨¢bado la espalda en las urnas al presidente Kais Said, con una abstenci¨®n cercana al 90% en las elecciones legislativas, con las que el mandatario buscaba completar un modelo de r¨¦gimen autocr¨¢tico. Los mismos partidos que hace a?o y medio le acusaron de protagonizar un autogolpe al suspender y disolver el Parlamento le reclaman ahora que renuncie al poder para dar una salida a la crisis.

¡°El simulacro de elecciones legislativas confirma que el efecto Said, que le permiti¨® dar un autogolpe en julio de 2021, se ha diluido. Salvo un milagro, la acumulaci¨®n de crisis econ¨®micas, sociales y pol¨ªticas llevar¨¢n a un choque y a una ruptura con el modelo de gobierno de un solo hombre que (el presidente) intenta imponer¡±, argumenta Haizam Amirah Fern¨¢ndez, investigador principal de Mediterr¨¢neo y mundo ¨¢rabe del Real Instituto Elcano. ¡°La duda es si T¨²nez volver¨¢ a tener la misma suerte que en 2011, para que la ruptura se produzca de forma pac¨ªfica y ordenada¡±, advierte este experto en un intercambio de mensajes.

Moody¡¯s, La principal agencia internacional de calificaci¨®n crediticia, ha anunciado este lunes que estudia rebajar la actual nota que asigna a T¨²nez (Caa1), juzgada ya de muy alto riesgo, tras el retraso en la aprobaci¨®n del plan de rescate por importe de 1.900 millones de d¨®lares (1.790 millones de euros) que ten¨ªa previsto aprobar esta semana el Fondo Monetario Internacional (FMI). Moody¡¯s considera que el aplazamiento del programa dise?ado para el pa¨ªs magreb¨ª puede exacerbar los riesgos de financiaci¨®n exterior y erosionar las reservas de divisas, dejando expuesto a T¨²nez a un eventual impago de su deuda.

Pocas horas despu¨¦s de las autoridades electorales tunecinas anunciaran que solo el 11,2% de los votantes censados hab¨ªa acudi¨® a las urnas (la menor tasa de participaci¨®n en 11 a?os de democracia), el Banco Europeo de Inversiones aprob¨® un pr¨¦stamo de 220 millones de euros para T¨²nez, de los que 150 millones corresponden a ayuda urgente de seguridad alimentaria.

Con el Parlamento disuelto y clausurado, el bloqueo pol¨ªtico dificulta la b¨²squeda de una salida pactada a la crisis desencadenada por el fiasco de las legislativas. El partido islamista Enhada, que encabez¨® las protestas de la Primavera ?rabe y fue la fuerza m¨¢s votada en las legislativas celebradas en 2019, ha pedido este lunes la suspensi¨®n de la segunda vuelta de los comicios del s¨¢bado, prevista en principio en enero y en la que quedan pendientes de adjudicar 154 de los 161 esca?os en liza.

En un comunicado citado por Efe, Enhada ha instado a Said a que renuncie a su cargo para ¡°permitir una v¨ªa de salida¡± tras el claro rechazo sufrido en las urnas por su modelo de r¨¦gimen ¡°ca¨®tico y autoritario¡±, seg¨²n el partido liderado por el veterano Rachid Ghanuchi. En las legislativas celebradas hace tres a?os la participaci¨®n super¨® el 40%, y en el refer¨¦ndum constitucional que el propio presidente convoc¨® el pasado mes de julio la afluencia a las urnas alcanz¨® un 30%.

El Frente de Salvaci¨®n, coalici¨®n que agrupa al Enhada con otras fuerzas laicas de oposici¨®n a Said, ha convocado protestas populares para exigir la dimisi¨®n del presidente. Desde el sector m¨¢s conservador, el Partido Desturiano Libre, heredero del r¨¦gimen del presidente Zin el Abidin Ben Ali, depuesto en enero de 2011 por la primera revuelta de la Primavera ?rabe, ha declarado que considera ¡°vacante¡± el puesto de jefe del Estado. La poderosa Uni¨®n General Tunecina del Trabajo (UGTT), central sindical que cuenta con m¨¢s de un mill¨®n de afiliados en un pa¨ªs con cerca de 12 millones de habitantes, hab¨ªa rechazado tambi¨¦n la celebraci¨®n de las legislativas junto con la mayor¨ªa de los partidos.

¡°Said lleg¨® a la presidencia en 2019 con los votos de castigo contra el establishment pol¨ªtico del pa¨ªs. La poblaci¨®n tunecina mostraba as¨ª su desesperanza y frustraci¨®n por la falta de mejoras econ¨®micas, ocho a?os despu¨¦s de haber derrocado al aut¨®crata Ben Ali¡±, recuerda Amirah Fern¨¢ndez.

Varios partidos laicos y el sindicato UGTT le prestaron entonces su apoyo para que pusiera fin al desgobierno, la corrupci¨®n y la crisis econ¨®mica. ¡°Said utiliz¨® ese capital pol¨ªtico para concentrar poderes en sus manos, poniendo fin a la joven transici¨®n democr¨¢tica¡±, recapitula este analista especializado. ¡°La realidad hoy es que la econom¨ªa va de mal en peor y la desesperaci¨®n se extiende por el pa¨ªs¡±, concluye.

La Uni¨®n Europea y Estados Unidos observan con preocupaci¨®n el desarrollo de los acontecimientos en T¨²nez. En Washington, el Departamento de Estado ha urgido a fomentar la participaci¨®n en las legislativas, mediante ¡°reformas inclusivas y transparentes¡± para ¡°restaurar la trayectoria democr¨¢tica del pa¨ªs¡±. Los partidos tunecinos parecen descartar, sin embargo, toda v¨ªa de salida a la crisis que no sea la dimisi¨®n del presidente Said. ¡°La gente le ha respondido en las urnas como se merece¡±, resalt¨® Rachid Ganuchi, l¨ªder hist¨®rico de Enhada, ¡°y la bofetada ha sido estruendosa¡±.

Once a?os despu¨¦s de que un joven se prendiera fuego en un desesperado gesto contra la arbitrariedad de las autoridades en Sidi Buzid (centro), los tunecinos se encuentran sumidos en la incertidumbre pol¨ªtica. La protesta a lo bonzo del vendedor ambulante Mohamed Buazizi prendi¨® las llamas que abrasaron a los dictadores de T¨²nez, Egipto y Libia.

La miseria ha empujado a miles de personas hacia la puerta de salida de la emigraci¨®n. Muchos de ellos en pateras. En los primeros 11 meses de este a?o, 17.500 tunecinos han arribado clandestinamente a las costas de Italia, la cifra m¨¢s alta en una d¨¦cada frente a los 15.000 de todo el a?o 2021.

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