La oposici¨®n turca consens¨²a una candidatura conjunta para hacer frente a Erdogan en las elecciones de mayo
Kemal Kili?daroglu, veterano l¨ªder del centroizquierda, se impone como el candidato que tratar¨¢ de desmontar el actual r¨¦gimen presidencialista tras d¨ªas de tensiones entre las fuerzas opositoras
El veterano pol¨ªtico socialdem¨®crata Kemal Kili?daroglu ser¨¢ el rival del actual presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, en las elecciones presidenciales previstas para el pr¨®ximo mayo. El l¨ªder del Partido Republicano del Pueblo (CHP), de 74 a?os, fue elegido candidato ¨²nico de la principal plataforma opositora tras unas tensas negociaciones que amenazaron con desmembrar el pacto entre las formaciones contrarias a Erdogan, que llevan desde el a?o pasado trabajando en una estrategia conjunta para, en caso de victoria en los comicios, desmontar el actual r¨¦gimen presidencialista ¡ªque concentra inmensos poderes en una sola persona¡ª y devolver Turqu¨ªa a un sistema parlamentario.
El parto de la candidatura estuvo rodeado de complicaciones. La decisi¨®n de elegir a un candidato com¨²n se hab¨ªa pospuesto durante meses, oficialmente para que los medios oficialistas y el Gobierno no desgastasen su imagen. La realidad es que no hab¨ªa acuerdo entre los miembros de la oposici¨®n. El viernes, Meral Aksener, la l¨ªder del partido de derecha nacionalista (IYI), segundo mayor de la coalici¨®n, anunci¨® que se retiraba de las negociaciones y pidi¨® a los alcaldes de Estambul y Ankara ¡ªEkrem Imamoglu y Mansur Yavas, ambos del CHP, pero mucho m¨¢s populares que Kili?daroglu en las encuestas¡ª que diesen un paso al frente y presentasen su candidatura.
El problema es que el alcalde de Estambul est¨¢ pendiente de una sentencia del Tribunal Supremo que podr¨ªa confirmar su inhabilitaci¨®n. En el caso de Yavas, aunque milita en el CHP desde 2014, las reticencias se derivan de que procede del movimiento de ultraderecha nacionalista ¨¹lk¨¹cu (Idealistas), en el que se originan tambi¨¦n el partido IYI y otra formaci¨®n, el MHP, aliada de Erdogan, lo que har¨ªa muy dif¨ªcil que su candidatura fuese apoyada por la minor¨ªa kurda (entre un 15% y un 20 % de la poblaci¨®n). Ambos, adem¨¢s, rechazaron la propuesta de Aksener y certificaron su apoyo al l¨ªder de su partido.
Finalmente, tras varias jornadas de negociaciones entre bastidores, se logr¨® que IYI volviese a la coalici¨®n, y en la tarde-noche del lunes, Kili?daroglu fue anunciado como candidato conjunto en un acuerdo que contempla la posibilidad de que, en caso de victoria, Imamoglu y Yavas sean nombrados vicepresidentes.
El candidato m¨¢s d¨¦bil
¡°Las encuestas indican que Kili?daroglu era el candidato m¨¢s d¨¦bil frente a Erdogan de los nombres que se barajaban. Y no creo que esto cambie antes de las elecciones¡±, opina el experto en pol¨ªtica turca Gareth Jenkins: ¡°Lo que ha ocurrido en los ¨²ltimos d¨ªas es muy malo para la oposici¨®n. Muchos se preguntar¨¢n c¨®mo van a resolver los grandes problemas del pa¨ªs si tienen estos problemas para elegir un candidato¡±.
¡°No podemos aceptar una campa?a cuajada de peleas, discusiones y disputas pol¨ªticas cuando una parte de nuestro pa¨ªs est¨¢ destruida y 10 millones de personas han perdido sus hogares, sus empleos y su paz¡±, afirm¨® Erdogan en referencia al da?o causado por los terremotos del mes pasado. Pese a las cr¨ªticas por su gesti¨®n del desastre, en el que han muerto m¨¢s de 46.000 personas solo en Turqu¨ªa, el presidente turco intenta presentarse como el ¨²nico capaz de dirigir la reconstrucci¨®n del pa¨ªs, frente a una oposici¨®n peleada entre s¨ª.
Sin embargo, Kemal Can, experto en movimientos nacionalistas de Turqu¨ªa, considera que el haber pasado ¡°la prueba¡± de una casi ruptura de la coalici¨®n eleva las posibilidades de victoria en las elecciones. ¡°La resoluci¨®n de la crisis ha dado el mensaje de que no solo las ¨¦lites de los partidos, sino tambi¨¦n las bases, tienen ganas de unidad y de cambio. Porque han sido las bases del IYI las que han obligado a Aksener a regresar a la mesa. Esto permite ampliar el alcance de la oposici¨®n¡±, sostiene.
Actualmente, la plataforma opositora, conocida como Mesa de los Seis, incluye al centroizquierdista CHP, al nacionalista turco IYI, al peque?o partido islamista Saadet, al a¨²n m¨¢s diminuto Partido Dem¨®crata (derecha) y a dos formaciones de centroderecha capitaneadas por sendos exministros de Erdogan, Ali Babacan y Ahmet Davutoglu.
El mayor ausente de esta plataforma es el partido de la izquierda prokurda HDP, tercera formaci¨®n del pa¨ªs en n¨²mero de esca?os. La noche del lunes, en el plat¨® de la cadena Habert¨¹rk, el copresidente de la formaci¨®n, Mithat Sancar, dio a entender que su partido podr¨ªa no presentar candidato propio a las elecciones presidenciales y apoyar a Kili?daroglu, con la condici¨®n de que pacte algunos temas con el HDP. ¡°Ganemos estas elecciones ya en la primera ronda¡±, propuso.
Las encuestas sit¨²an el apoyo a Erdogan entre el 35% y el 45% del electorado, por lo que, de recibir todos los sufragios contrarios al presidente, Kili?daroglu podr¨ªa alzarse con la victoria sin esperar a la segunda ronda, que se celebrar¨ªa en caso de que ning¨²n candidato supere el 50% de los votos. A su favor, el pol¨ªtico socialdem¨®crata tiene haber sido capaz de consensuar la estrategia de la oposici¨®n en dos campa?as exitosas: la del refer¨¦ndum constitucional de 2017, que Erdogan gan¨® por la m¨ªnima, y las municipales de 2019, en las que el CHP gan¨® en Estambul y Ankara tras 25 a?os de dominio islamista.
Muchos analistas se preguntan si Erdogan reconocer¨ªa, llegado el caso, una derrota electoral tras 20 a?os al frente del pa¨ªs, o si tratar¨ªa de recurrir a alg¨²n truco electoral (en 2019 forz¨® la repetici¨®n de los comicios en Estambul tras la derrota de su candidato). Con todo, los observadores internacionales suelen reconocer que las elecciones en Turqu¨ªa ¡°son limpias¡±, aunque ¡°no justas¡±. Es decir, la oposici¨®n parte en desventaja porque el presidente utiliza todos los recursos del Estado a su disposici¨®n, as¨ª como gran parte de los medios de comunicaci¨®n, mientras reprime a sus adversarios.
Adem¨¢s de ello, la oposici¨®n deber¨¢ salvar importantes obst¨¢culos: Kili?daroglu no ha vencido nunca en unas elecciones a las que se ha presentado, desde que concurri¨® como candidato a la alcald¨ªa de Estambul en 2009. Es alev¨ª, una rama heterodoxa del islam, lo que dificulta atraer los votos de los musulmanes sun¨ªes m¨¢s conservadores. Y, adem¨¢s, debe ser capaz de cuadrar el c¨ªrculo y aunar el voto tanto de nacionalistas turcos como de nacionalistas kurdos. ¡°Sabemos cu¨¢l es el candidato, pero a¨²n no sabemos cu¨¢les van a ser sus propuestas en ciertos temas relacionados con la seguridad¡±, explica el analista y exmilitar Abdullah Agar, apuntando a la dificultad de conjugar el apoyo del partido IYI, ¡°cuyos votantes son nacionalistas¡±, y del HDP, un partido al que se acusa de lazos con el grupo terrorista PKK y sobre el que pesa la amenaza de la ilegalizaci¨®n. ¡°De momento, hay una ola de ilusi¨®n con la candidatura de la oposici¨®n, pero la pol¨ªtica turca est¨¢ llena de subidas y bajadas. Lo importante es llegar a las elecciones en la cresta de la ola¡±.
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