El Papa y Meloni muestran sinton¨ªa en las pol¨ªticas de fomento de la natalidad

La demograf¨ªa, podr¨ªa decirse, hace extra?os compa?eros de causa. Y Roma asisti¨® este viernes a un acto construido a trav¨¦s de un dato demoledor: Italia ha alcanzado la tasa de natalidad m¨¢s baja de la historia, con solo 393.000 nuevos nacimientos en 2022, algo m¨¢s de un 1% menos que el a?o anterior. El pa¨ªs envejece y el dato abre la puerta a un vendaval ideol¨®gico y religioso. Hermanos de Italia, el partido de la primera ministra Giorgia Meloni, sostiene que la naci¨®n est¨¢ en peligro de sufrir lo que llaman ¡°sustituci¨®n ¨¦tnica¡±, es decir, que la poblaci¨®n de origen italiano termine siendo superada en n¨²mero por personas de otros or¨ªgenes y sus hijos. Lo dijo y se reafirm¨® el jueves Francesco Lollobrigida, ministro de Agricultura y cu?ado de Meloni. Pero tambi¨¦n desangra el principio b¨¢sico del catolicismo, basado en la familia. Por eso, el Papa asisti¨® el viernes a lo que el Gobierno dio en llamar ¡°Los estados generales de la natalidad¡±.

Francisco, siempre cuidadoso en elegir sus viajes internacionales, ven¨ªa de compartir algunas posiciones con el primer ministro de Hungr¨ªa, Viktor Orb¨¢n, la semana pasada. Era la segunda vez que acud¨ªa a Budapest en dos a?os. Un acercamiento en el que muchos vieron una cuesti¨®n de agenda compartida en asuntos como la natalidad, el aborto o la idea de familia. El viernes, cuestiones parecidas le acercaron al Gobierno italiano, formado por la coalici¨®n que lidera la ultraderechista Meloni, que sorprendi¨® vestida de blanco junto al Pont¨ªfice, rompiendo el protocolo conocido como ¡°privilegio del blanco¡±, por el que solo algunas reinas cat¨®licas pueden lucir ese color en actos con el Papa.

El diagn¨®stico de Meloni y el Papa es ligeramente distinto. O al menos los riesgos que entra?a la situaci¨®n. Para el Ejecutivo de la l¨ªder ultraderechista, Italia corre el riesgo de sufrir una sustituci¨®n ¨¦tnica. Una idea claramente extra¨ªda de la teor¨ªa supremacista del Gran Reemplazo de origen franc¨¦s y seg¨²n la cual los blancos cat¨®licos y la poblaci¨®n cristiana europea est¨¢ paulatinamente siendo sustituida por personas de origen no europeo. Concretamente por ¨¢rabes y africanos. La idea, una teor¨ªa de la conspiraci¨®n defendida por pol¨ªticos de extrema derecha como ?ric Zemmour, que obtuvo casi 2,5 millones de votos en la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas del a?o pasado, es el caballo de batalla de los supremacistas blancos y uno de los sustentos intelectuales de muchos de los atentados que se han producido en los ¨²ltimos a?os contra mezquitas, comunidades migrantes o minor¨ªas raciales en Europa y Estados Unidos.

El Papa, obviamente, no considera lo mismo en ese apartado. ¡°La natalidad, as¨ª como la acogida (de migrantes) nunca deben contraponerse porque son dos caras de la misma moneda, nos revelan cu¨¢nta felicidad hay en el mundo¡±, opin¨®. Adem¨¢s, cont¨® dos an¨¦cdotas que ha vivido de mujeres que trataban a sus perros como a sus hijos y que, en una ocasi¨®n durante la audiencia, cuando una le pidi¨® que bendijera ¡°a su ni?o¡± y sac¨® un perro del bolso, ¨¦l ¡°perdi¨® la paciencia¡± y le dijo: ¡°Se?ora, tantos ni?os tienen hambre y usted est¨¢ con el perrito...¡±. Sentado en el escenario de un auditorio de Roma junto a la primera ministra italiana, se?al¨®: ¡°El nacimiento de ni?os, de hecho, es el principal indicador para medir la esperanza de un pueblo. Si nacen pocos significa que hay poca esperanza. Y esto no solo tiene repercusiones desde un impacto econ¨®mico y social, sino que mina la confianza en el futuro¡±.

Meloni y el Papa parecen muy alineados en esta cuesti¨®n. La primera ministra, de hecho, defendi¨® ante el Pont¨ªfice un pa¨ªs donde ¡°no sea escandaloso¡± decir que ¡°todos nacimos de un hombre y una mujer¡± y que los hijos no son productos para vender. ¡°Vivimos en una ¨¦poca en la que hablar de nacimiento, maternidad y familia es cada vez m¨¢s dif¨ªcil, parece un acto revolucionario¡±, asegur¨® la l¨ªder ultraderechista sentada junto a Francisco. Meloni insisti¨® en que la natalidad y la familia son ¡°la prioridad absoluta¡± de su Gobierno: ¡°Queremos que Italia vuelva a tener un futuro, para esperar y creer en un futuro mejor que este presente incierto¡±.

Francisco, a su vez, tambi¨¦n cree que es una cuesti¨®n prioritaria para el pa¨ªs. Y para el mundo. Aunque el crecimiento de la poblaci¨®n sea cada vez m¨¢s insostenible. ¡°Es necesario abordar el problema juntos, sin vallas ideol¨®gicas ni posturas preconcebidas. No podemos aceptar que nuestra sociedad deje de ser generativa y degenere en tristeza. No podemos aceptar pasivamente que tantos j¨®venes luchen por realizar su sue?o familiar y se vean obligados a bajar el list¨®n del deseo, conform¨¢ndose con suced¨¢neos privados y mediocres: ganar dinero, aspirar a una carrera, viajar, guardar celosamente el tiempo libre¡±.

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