El Departamento de Justicia de EE UU denuncia el historial de abusos y el racismo de la polic¨ªa de Minneapolis

La reforma policial que en 2020 pareci¨® derivarse como resultado de las protestas por la muerte del afroamericano George Floyd en Minneapolis a manos de un agente blanco sigue pendiente, pese a la promesa de la Administraci¨®n de Joe Biden de acometer una profunda revisi¨®n sobre el uso excesivo de la fuerza y otras manifestaciones de brutalidad policial. Nada o muy poco ha cambiado desde entonces: negros e hispanos siguen siendo los sospechosos habituales, interrogados y arrestados a diario en las calles de EE UU en una proporci¨®n desproporcionada en comparaci¨®n con los blancos. De ah¨ª que las conclusiones de una investigaci¨®n iniciada en 2021 a ra¨ªz de la muerte de Floyd no hayan sorprendido a nadie. Los agentes de polic¨ªa de Minneapolis hacen un uso rutinario de la fuerza excesivo y discriminan a los negros y a los nativos americanos, ha constatado este viernes el Departamento de Justicia de EE UU al presentar la investigaci¨®n que promovi¨®. Es decir, la prueba, documentada, del racismo sist¨¦mico en la instituci¨®n.

Adem¨¢s del abuso de la fuerza, la polic¨ªa de la ciudad tambi¨¦n recurre con frecuencia al uso de tasers (pistolas paralizantes) y a abrir fuego innecesariamente, seg¨²n el informe; tambi¨¦n a discriminar a personas con discapacidad y reprimir indebidamente, violando la Constituci¨®n, a manifestantes y periodistas. La investigaci¨®n se inici¨® en abril de 2021 despu¨¦s de que un expolic¨ªa blanco blanco, Derek Chauvin, fuera condenado por asesinar a Floyd, un hombre negro, al que asfixi¨® con la presi¨®n de su rodilla sobre el cuello mientras le manten¨ªa esposado y tirado en el suelo durante m¨¢s de nueve minutos, una maniobra de inmovilizaci¨®n que seg¨²n el informe es pr¨¢ctica habitual del cuerpo.

La prometida reforma policial tendr¨¢ que abordarse ahora, gracias a los resultados de la investigaci¨®n. Ser¨¢ parte de un acuerdo, o decreto de consentimiento, que se negociar¨¢ con el Departamento de Justicia y ser¨¢ supervisado por un juez federal, ha anunciado en Minneapolis el fiscal general Merrick Garland (ministro de Justicia de EE UU). ¡°Descubrimos que el Departamento de Polic¨ªa de Minneapolis utiliza habitualmente fuerza excesiva, a menudo cuando no es necesaria, incluida la fuerza letal injusta y el uso irrazonable de pistolas paralizantes¡±, ha declarado Garland en una conferencia de prensa en el tribunal federal de la ciudad.

Garland, flanqueado por el alcalde y el jefe de la polic¨ªa de la ciudad en la conferencia de prensa, dijo que los agentes de polic¨ªa disparan a la gente sin evaluar si existe alguna amenaza y violan sistem¨¢ticamente los derechos civiles de los residentes. ¡°Muchos agentes hacen su dif¨ªcil trabajo con profesionalidad, coraje y respeto, pero los patrones y pr¨¢cticas que observamos hicieron posible lo que le ocurri¨® a George Floyd¡±, dijo el fiscal general.

El asesinato de Floyd a finales de mayo de 2020, captado en el v¨ªdeo del tel¨¦fono m¨®vil de una transe¨²nte, desencaden¨® la mayor oleada de protestas contra la brutalidad policial y el racismo en EE UU, con r¨¦plicas en el resto del mundo. Puso tambi¨¦n el foco en habituales incidentes en que afroamericanos eran v¨ªctimas de errores o abusos policiales, como el asesinato de la joven Breonna Taylor en 2020, poco antes que el de Floyd, por el ¡°estilo agresivo, especialmente contra los negros¡± de la polic¨ªa, seg¨²n constat¨® en marzo pasado otro informe del Departamento de Justicia. Una investigaci¨®n de ONG de derechos civiles constataba recientemente que la polic¨ªa de Nueva York interpela y arresta en la calle a negros e hispanos en una proporci¨®n incomparable con la sufrida por los blancos.

Muchos en Minneapolis denunciaron en mayo de 2020, mientras a¨²n resonaban las ¨²ltimas palabras de Floyd durante su agon¨ªa (¡°No puedo respirar¡­ no puedo respirar¡±), que el uso excesivo de la fuerza por el polic¨ªa Chauvin no fue un caso excepcional, sino uno m¨¢s de la rutina de abusos policiales contra los habitantes negros. El informe presentado este viernes en Minneapolis lo corrobora, dejando constancia de varios incidentes en los que los agentes de polic¨ªa de la ciudad ¡°no rindieron cuentas por su conducta racista¡± hasta que se produjo una protesta p¨²blica por su intervenci¨®n.

Chauvin acab¨® siendo condenado a 22 a?os de prisi¨®n por homicidio en junio de 2021 y a otros 20 m¨¢s tras declararse culpable por uso excesivo de la fuerza y por discriminaci¨®n. Otros tres agentes implicados en el caso han sido tambi¨¦n juzgados y condenados por cargos federales y estatales.

Desde el caso Floyd, con la eclosi¨®n del movimiento Black Lives Matter (Las vidas negras importan), el escrutinio sobre la actuaci¨®n policial contra minor¨ªas se ha incrementado, aunque la prometida reforma policial de Biden no se haya sustanciado salvo circunstancialmente, y s¨®lo ahora, como consecuencia del informe, se acometa la del departamento de Minneapolis, en lugar de una sistem¨¢tica o general de todos los departamentos metropolitanos del pa¨ªs. Hasta ahora, Justicia ha negociado similares acuerdos de supervisi¨®n federal en Ferguson (Misuri), Baltimore y Cleveland. Se espera que la negociaci¨®n con la polic¨ªa de Minneapolis dure varios meses. El a?o pasado, al cumplirse los dos a?os de la muerte de Floyd, Biden recurri¨® a una orden ejecutiva para limitar el uso de las armas y de la fuerza, pero s¨®lo con aplicaci¨®n federal, no local.

El alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, acogi¨® sin sorpresa los resultados del informe. ¡°Los datos y los hechos que el Departamento de Justicia ha presentado en estas conclusiones est¨¢n en consonancia con lo que las comunidades de color llevan dici¨¦ndonos desde hace muchos a?os, de hecho generaciones¡±.

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