Los consejeros de seguridad de EE UU y China se re¨²nen 12 horas en secreto en Malta para tratar sobre Ucrania y Taiw¨¢n

Los consejeros de seguridad nacional de EE UU, Jake Sullivan, y de China, Wang Yi, se han reunido este fin de semana en Malta, en un encuentro guardado en el mayor de los secretos hasta su conclusi¨®n. Ambos altos cargos han celebrado conversaciones ¡°sinceras, sustanciales y constructivas¡±, para tratar sobre asuntos que han incluido la guerra en Ucrania, seg¨²n comunicados de ambos Gobiernos. Las dos grandes potencias econ¨®micas tratan de estabilizar sus complicadas relaciones desde hace meses, tras una etapa de congelaci¨®n casi absoluta, pero su profundo antagonismo se mantiene.

Sullivan y Wang Yi se han reunido durante un total de 12 horas en diversas sesiones a lo largo del s¨¢bado y el domingo, seg¨²n ha especificado un alto funcionario estadounidense que habl¨® bajo la condici¨®n del anonimato. Se registraron ciertos progresos: Washington ha percibido se?ales ¡°limitadas¡± de que China permitir¨¢ ciertas comunicaciones entre los ej¨¦rcitos de los dos pa¨ªses. Desde la visita de la entonces presidenta de la C¨¢mara de Representantes, Nancy pelosi, a Taiw¨¢n en agosto de 2022 no hab¨ªa ning¨²n tipo de interlocuci¨®n, lo que, en opini¨®n de Estados Unidos, pod¨ªa conducir a que alg¨²n incidente desencadenara una crisis de consecuencias imprevisibles.

Seg¨²n la citada fuente, Sullivan plante¨® la preocupaci¨®n de su Gobierno sobre el apoyo de China a Rusia en la guerra en Ucrania y sobre la presi¨®n militar de Pek¨ªn a Taiw¨¢n. Este lunes, la isla denunciaba la incursi¨®n de 103 aeronaves y nueve buques militares chinos en sus inmediaciones. Por su parte, Wang Yi advirti¨® de que la isla es la ¡°primera l¨ªnea roja que no debe traspasarse¡± en la relaci¨®n.

Los contactos entre Estados Unidos y China continuar¨¢n este mismo lunes: el secretario de Estado, Antony Blinken, tiene previsto conversar en Nueva York con el vicepresidente chino, Hang Zheng, que encabeza la delegaci¨®n de su pa¨ªs en la Asamblea General de Naciones Unidas.

Los dos pa¨ªses han celebrado una intensa serie de contactos desde un primer encuentro en Viena en mayo entre Sullivan y Wang Yi, tambi¨¦n mantenido en secreto hasta el ¨²ltimo momento. Aquella reuni¨®n supuso un punto de inflexi¨®n en las relaciones bilaterales, ca¨ªdas en picado despu¨¦s de que Estados Unidos derribara a principios de febrero sobre sus aguas territoriales un globo chino al que achac¨® funciones de espionaje.

Desde entonces, todo un elenco de representantes del Gobierno de Estados Unidos han viajado a Pek¨ªn, a ritmo casi mensual: en junio, Blinken, se reuni¨® con el presidente chino, Xi Jinping. En julio, la visitante fue la secretaria del Tesoro, Janet Yellen. La responsable de Comercio, Gina Raimondo, concluy¨® su gira hace apenas dos semanas.

Xi se abstuvo de viajar a Nueva Delhi para la cumbre del G-20 presidida por India la semana anterior, lo que impidi¨® un encuentro cara a cara con el presidente estadounidense, Joe Biden, que desde hace meses asegura que se reunir¨¢ con su hom¨®logo y que se declar¨® ¡°decepcionado¡± por la ausencia. El propio Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca se?alaba, en declaraciones previas a la reuni¨®n de las principales econom¨ªas del mundo, que desconoce a¨²n si el l¨ªder chino acudir¨¢, como desea Washington, a la cumbre del Foro de Cooperaci¨®n Econ¨®mica Asia-Pac¨ªfico (APEC, por sus siglas en ingl¨¦s), prevista para noviembre en San Francisco.

Ambos l¨ªderes se hab¨ªan reunido el a?o pasado en los m¨¢rgenes de la cumbre del G-20 en Bali (Indonesia) para enderezar la marcha de la relaci¨®n bilateral. Acordaron entonces dar pasos para gestionar su rivalidad y restablecer la confianza mutua. Pero el incidente del globo aerost¨¢tico hizo saltar temporalmente esos planes por los aires.

Los dos pa¨ªses rivalizan en casi todos los aspectos, desde el liderazgo tecnol¨®gico al poder¨ªo militar, pasando por el peso econ¨®mico y diplom¨¢tico. Ambos difieren diametralmente en asuntos como la situaci¨®n de Taiw¨¢n. China considera esa isla de gobierno democr¨¢tico y alineado ideol¨®gicamente con Washington, parte inalienable de su territorio, y no renuncia a utilizar la fuerza para conseguir la unificaci¨®n. Estados Unidos estipula que el estatus de Taiw¨¢n no est¨¢ resuelto. Aunque insiste en que no apoya la independencia de la isla, y mantiene una ¡°ambig¨¹edad estrat¨¦gica¡± acerca de si acudir¨ªa en su ayuda militarmente en caso de ataque, ha intensificado con rapidez sus lazos con ella, especialmente desde el mandato del anterior presidente, Donald Trump.

Al mismo tiempo, las econom¨ªas de Estados Unidos y China se encuentran ¨ªntimamente imbricadas en una relaci¨®n comercial de m¨¢s de medio bill¨®n de d¨®lares anuales. Estados Unidos insiste en que desea gestionar de modo ¡°responsable¡± la relaci¨®n, para colaborar con China en asuntos de inter¨¦s mutuo ¡ªel cambio clim¨¢tico, por ejemplo¡ª y gestionar sus diferencias, de modo que se evite que los desacuerdos puedan llevar a consecuencias indeseadas.

En un comunicado distribuido por la agencia de noticias china Xinhua, el Ministerio de Exteriores chino ha indicado que en la reuni¨®n de Malta ambas partes acordaron mantener intercambios de alto nivel ¡ªun lenguaje que podr¨ªa abrir la puerta a la presencia de Xi en la cumbre de la APEC¡ª y mantener consultas bilaterales sobre temas clave en los que ambos Gobiernos divergen: cuestiones de la regi¨®n de Asia-Pac¨ªfico, asuntos mar¨ªtimos y pol¨ªtica exterior.

Por su parte, en otro comunicado, la Casa Blanca ha apuntado que ambas partes est¨¢n ¡°comprometidas a mantener este canal estrat¨¦gico de comunicaci¨®n y continuar los contactos y consultas de alto nivel en ¨¢reas clave en los pr¨®ximos meses¡±.

Ambos pa¨ªses hicieron menci¨®n espec¨ªfica a Taiw¨¢n: Wang advirti¨® de que la isla es ¡°la primera l¨ªnea roja que no debe traspasarse en las relaciones entre China y Estados Unidos¡±. Por su parte, Sullivan destac¨® la ¡°importancia de la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiw¨¢n¡±.

La reuni¨®n de Malta se produc¨ªa entre rumores sobre la desaparici¨®n del ministro de Defensa, Li Shangfu, al que no se ha visto en p¨²blico en las ¨²ltimas dos semanas y de quien Washington sospecha que pueda haber sido sujeto a una purga. Ser¨ªa el segundo ministro relevado sumariamente en este verano, despu¨¦s de que el entonces ministro de Exteriores, Qin Gang, quedara sustituido por Wang tras apenas unos meses en el cargo. Una alta personalidad estadounidense que habl¨® bajo la condici¨®n del anonimato indic¨® que el asunto no se abord¨® en estas conversaciones.

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