El Gobierno conservador de Portugal busca el apoyo socialista a los Presupuestos para evitar nuevas elecciones
El primer ministro Lu¨ªs Montenegro, que acaba de ser reelegido l¨ªder del centroderecha, trata de alejar el riesgo de los terceros comicios en cuatro a?os
Casi nadie quiere nuevas elecciones anticipadas en Portugal. Sin embargo, el escenario actual parece conducir hacia un paisaje enmara?ado que tal vez obligue al presidente de la Rep¨²blica, Marcelo Rebelo de Sousa, a disolver el Parlamento y convocar comicios por tercera vez en cuatro a?os. A un lado, un Gobierno con una gran debilidad parlamentaria (80 diputados, dos m¨¢s que el Partido Socialista) que busca asentarse despu¨¦s de un ciclo de gobernaci¨®n socialista de nueve a?os antes de medirse en las urnas. Al otro, una oposici¨®n que libra su propia batalla por simbolizar la alternativa de Gobierno, entre los socialistas y la ultraderecha de Chega, que conquist¨® 50 esca?os en los comicios del pasado marzo.
La prueba de fuego ser¨¢ la negociaci¨®n sobre los Presupuestos del Estado de 2025, que se inicia ahora entre el Gobierno y la oposici¨®n. Si el primer ministro, Lu¨ªs Montenegro, que acaba de ser reelegido el viernes 6 presidente del Partido Social Dem¨®crata (PSD, centroderecha) en unas primarias sin oposici¨®n interna, no logra conquistar apoyos suficientes entre sus rivales pol¨ªticos, a derecha o izquierda, Rebelo de Sousa tendr¨¢ que decidir si da por zanjada la legislatura o si permite que el minoritario Gobierno gestione el pa¨ªs con las manos atadas desde el punto de vista financiero con el llamado presupuesto de duod¨¦cimos (solo se permite gastar mensualmente la duod¨¦cima parte de lo gastado en el mismo mes del ejercicio anterior).
El jefe del Estado, adem¨¢s, pondr¨¢ a prueba su coherencia pol¨ªtica, ya que en 2021 opt¨® por disolver la Asamblea de la Rep¨²blica y anticipar las elecciones cuando el Gobierno socialista de Ant¨®nio Costa, entonces sin mayor¨ªa absoluta, no logr¨® apoyos suficientes para aprobar los Presupuestos para el a?o siguiente. Las se?ales que ahora emite el Palacio de Bel¨¦m, sede de la presidencia de la Rep¨²blica, son contrarias a una nueva cita electoral. Rebelo de Sousa repite desde hace meses que los portugueses desean estabilidad y no otra visita a las urnas. Sus mensajes tratan de presionar a la oposici¨®n, en especial al Partido Socialista, para que d¨¦ luz verde a los Presupuestos y permita avanzar el nuevo ciclo en manos del centroderecha, la familia pol¨ªtica del presidente de la Rep¨²blica.
L¨ªneas rojas de los socialistas
A d¨ªa de hoy parece dif¨ªcil. El l¨ªder socialista, Pedro Nuno Santos, ya avis¨® en su primer discurso tras las vacaciones que hay dos l¨ªneas rojas que no traspasar¨¢n y que son medulares para el Gobierno: las rebajas del IRPF para menores de 30 a?os y el impuesto de sociedades. ¡°Una agenda fiscal radical, injusta y cara¡±, en palabras del socialista, que denuncia la creaci¨®n de dos modelos de IRPF paralelos diferenciados por la edad y la disminuci¨®n transversal de la carga fiscal de las empresas, que podr¨ªa retirar 1.500 millones de euros de ingresos anuales al Estado.
Dar luz verde a los Presupuestos del Gobierno, como defienden algunas voces socialistas, es una decisi¨®n con aristas tanto en el partido de Santos como en el resto de la izquierda, que desea fortalecerse como bloque contra el Ejecutivo. ¡°Quien aprueba un Presupuesto de la derecha, apoya un Gobierno de la derecha¡±, advirti¨® la coordinadora nacional del Bloco de Esquerda, Mariana Mort¨¢gua.
Para el Gobierno, en manos de una coalici¨®n entre el PSD y los conservadores del Centro Democr¨¢tico Social (CDS), sacar adelante sus propuestas fiscales son un eje importante del programa reformista que Montenegro defiende para el pa¨ªs. Sus medidas econ¨®micas tienen el aval de las formaciones de la derecha, pero Chega proclam¨® hace unos d¨ªas que probablemente vote en contra de los Presupuestos en noviembre, cuando vayan al pleno. Su l¨ªder, Andr¨¦ Ventura, que no esconde el resentimiento contra Montenegro por negarse a pactar su gabinete con la ultraderecha, afirm¨® que su partido ha hecho todo lo posible ¡°para que este pa¨ªs tuviese un Presupuesto, una mayor¨ªa y un futuro sin crisis pol¨ªticas. Si eso no ha sido posible, se debe al Gobierno del PSD¡±.
No obstante, Chega es un partido de vaivenes, capaz de prometer una cosa y la contraria en poco tiempo. Despu¨¦s de afirmar que no participar¨ªa en la nueva ronda de reuniones sobre Presupuestos con el Gobierno, retomadas este martes, se desdijo a las pocas horas.
Los ¨²ltimos sondeos electorales muestran un continuado descenso de Chega, que ya perdi¨® fuelle en las elecciones europeas. Si en las legislativas de marzo recibi¨® el 18% de los votos, el bar¨®metro de agosto de Intercampus le otorga un 13%. Este retroceso est¨¢ llevando al partido a apostar por una radicalizaci¨®n en sus propuestas, sobre todo en materia de inmigraci¨®n. La formaci¨®n ultra ha convocado una manifestaci¨®n en Lisboa, que coincidir¨¢ con el proceso para regularizar a unos 400.000 extranjeros y ha solicitado la convocatoria de un referendo para consultar a los portugueses si est¨¢n de acuerdo con la imposici¨®n de l¨ªmites a la entrada de inmigrantes.
En paralelo a la negociaci¨®n presupuestaria, Montenegro afronta tambi¨¦n su primer sobresalto pol¨ªtico de calado, tras la divulgaci¨®n del informe de la Inspecci¨®n General de Finanzas sobre la privatizaci¨®n de la aerol¨ªnea TAP en 2015, que aprecia posibles delitos en el proceso negociado por cargos del PSD. ¡°Lo m¨¢s alarmante es la confirmaci¨®n de que la compra de TAP, firmada por un Gobierno en funciones a pocos d¨ªas de terminar su mandato, fue hecha a trav¨¦s de un pr¨¦stamo de 226 millones de d¨®lares de Airbus, lo que implica que fondos de la propia empresa sirvieron para comprar TAP¡±, reprueba la presidenta del grupo parlamentario socialista, Alexandra Leit?o.
La oposici¨®n ha solicitado varias comparecencias parlamentarias de antiguos implicados en la venta, incluido el actual ministro de Infraestructuras y Vivienda, Miguel Pinto Luz, justo cuando se ha abierto un nuevo proceso de privatizaci¨®n de la compa?¨ªa a¨¦rea que pilota su departamento.
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