Bruselas observa con inquietud el auge en Francia de la extrema derecha de Le Pen
El aterrizaje de los ultras en el Ejecutivo franc¨¦s ser¨ªa un se¨ªsmo para la UE; ya solo su crecimiento puede marcar la agenda europea
Bruselas observa con preocupaci¨®n los resultados electorales en Francia y contiene el aliento ante una segunda vuelta que puede encumbrar a la extrema derecha en la segunda econom¨ªa de a UE. La llegada de un partido ultra, euroesc¨¦ptico (casi eur¨®fobo), xen¨®fobo y ultranacionalista como el Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen y su delf¨ªn, Jordan Bardella, que aspira a sentarse en el sill¨®n de primer ministro, ser¨ªa un se¨ªsmo colosal en la UE. Francia es uno de los pa¨ªses fundadores del club comunitario y, junto a Alemania, uno de sus motores. Si el RN logra formar Gobierno, Francia, y con ella, la UE, se adentrar¨ªa en terreno desconocido. Y puede frenar el avance del proyecto europeo en un momento clave para su supervivencia en una convulsa situaci¨®n global, advierten varias fuentes comunitarias que observan la situaci¨®n en inquieto silencio.
No todos los escenarios en Francia (67,9 millones de habitantes) son malos para la agenda europea, pero ninguno es bueno, advierte una veterana diplom¨¢tica. El RN ha obtenido alrededor de 10 millones de votos en la primera vuelta de las legislativas, seg¨²n las estimaciones; y unos siete millones en los comicios europeos del 9 de junio, que llevaron al presidente Emmanuel Macron a marcarse el ¨®rdago de convocar a los franceses a las urnas y que ha supuesto un enorme varapalo para el centro y para su partido.
¡°Los resultados de Francia han mostrado tambi¨¦n el patr¨®n del auge de la ultraderecha y de cierto euroescepticismo. Y eso, llegue el partido de Le Pen al Gobierno o no, se va a notar en la pol¨ªtica francesa en Bruselas¡±, advierte la diplom¨¢tica, que habla con la condici¨®n de anonimato. La consigna general es no comentar elecciones ¨Dtampoco las europeas¡ª y menos las de otro Estado miembro, pero tambi¨¦n que nada est¨¢ decidido y que habr¨¢ que ver qu¨¦ sucede el pr¨®ximo domingo. En cualquier caso, las incertidumbres no disminuyen, sino que se incrementan en una Uni¨®n en la que la ultraderecha forma o sostiene gobiernos ya en ocho pa¨ªses.
El terremoto franc¨¦s llega, adem¨¢s, en un momento crucial para el club comunitario que, en la legislatura que va a iniciar, debe emprender cambios sustanciales para lograr una autonom¨ªa estrat¨¦gica, una econom¨ªa competitiva, en un continente en guerra ¨Dla de Rusia contra Ucrania¡ª y en tensi¨®n por la ofensiva de Israel en Gaza en un conflicto que puede extenderse por la regi¨®n de Oriente Pr¨®ximo; y que, adem¨¢s, observa con inquietud el resultado de otras elecciones cruciales: las de EE UU, que podr¨ªan suponer el regreso del populista republicano Donald Trump.
¡°Francia es esencial para tirar del carro europeo¡±, advierte una alta fuente comunitaria. La UE ha lidiado con socios d¨ªscolos, como Polonia y Hungr¨ªa, con su deriva autoritaria, y con un divorcio complicado, como el de la salida del Reino Unido de la UE en un traum¨¢tico Brexit. ¡°Pero, ?qu¨¦ pasar¨¢ si Par¨ªs empieza a frenar todas las pol¨ªticas europeas? Que no saldr¨¢n adelante¡±, remarca la fuente.
Una cohabitaci¨®n de Macron con un Gobierno del RN, que clama por pol¨ªticas de ¡°Francia primero¡± y menos Bruselas, y con una visi¨®n absolutamente opuesta de la UE a la del presidente franc¨¦s, puede derivar en choques en las instituciones comunitarias. Incluso ahora, cuando todav¨ªa no se conoce el resultado de los comicios del domingo, Le Pen asegura que es competencia del Gobierno nombrar al comisario franc¨¦s, mientras que el El¨ªseo asegura que es suya, como toda la pol¨ªtica exterior. Francia es miembro del Consejo de Seguridad de la ONU, del G-7 y es el ¨²nico pa¨ªs de la Uni¨®n con armas nucleares (y una doctrina al margen de la OTAN sobre su uso).
Una victoria de la ultraderecha de Le Pen puede, por ejemplo, lastrar el apoyo de la UE a Ucrania, advierten fuentes europeas. ¡°Aunque tambi¨¦n puede afectar un gran aumento del frente republicano de izquierdas¡±, sostiene un alto cargo de la UE. La izquierda ha llamado a un frente unido y el presidente Macron ha instado a votar ¡°republicano¡± para formar de nuevo un dique contra la ultraderecha. Pero ya se est¨¢n viendo grietas en el cord¨®n sanitario.
El RN ha estado durante a?os en el ojo del hurac¨¢n por sus v¨ªnculos con el Kremlin ¨Del partido recibi¨® en 2014 un pr¨¦stamo de nueve millones de euros de un banco ruso y Le Pen declar¨® compartir la visi¨®n global de Vlad¨ªmir Putin¡ª, aunque se distanci¨® de Rusia tras la invasi¨®n de Ucrania y ha tratado de que el tema no empa?e su campa?a. Aun as¨ª, en las propuestas tem¨¢ticas sobre Defensa del partido ¨Dese apartado se retir¨® del ¨ªndice de temas clave de la web poco despu¨¦s de que Macron convocase elecciones¡ª aboga por una ¡°alianza¡± con Rusia en ¡°asuntos de fondo¡±, como en temas de seguridad europeos.
Un Gobierno del RN o un Ejecutivo franc¨¦s muy d¨¦bil y tocado por el auge de la ultraderecha puede impedir tambi¨¦n nuevos acuerdos comerciales, aguar y lastrar la agenda medioambiental ¨Dque ya cuenta con m¨¢s detractores en la UE¡ª y aparcar las perspectivas de la pr¨®xima gran ampliaci¨®n del club comunitario hacia el Este. El RN no apoya la uni¨®n del mercado de capitales, y sin Francia, advierte un diplom¨¢tico, esa iniciativa tampoco tendr¨¢ futuro.
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