Los feudos conservadores de EE UU registran colas de seis horas para votar de forma anticipada

A menos de 20 d¨ªas de las elecciones presidenciales, el voto anticipado est¨¢ haciendo historia. Cerca de 15 millones de estadounidenses ya han votado, ya sea por correo o en persona, en medio de la pandemia del coronavirus. En los comicios de hace cuatro a?os, por estas mismas fechas, hab¨ªa votado un mill¨®n y medio de ciudadanos. En Texas y Georgia, feudos conservadores con una creciente poblaci¨®n latina y afroamericana, algunos votantes han hecho colas durante seis horas para ejercer su derecho, lo que no ha estado exento de dificultades. Se han registrado fallos t¨¦cnicos en las m¨¢quinas de votaci¨®n, y ha habido una reducci¨®n de los buzones habilitados para depositar la papeleta. Una alta afluencia de electores en el voto anticipado suele indicar una elevada participaci¨®n general en las elecciones.

Los ciudadanos de Georgia han solicitado casi 1,6 millones de boletas de voto ausente, con casi un tercio de ellas ya devueltas y aceptadas. En 2016, el n¨²mero apenas super¨® los 200.000. En los dos primeros d¨ªas del voto anticipado, ya han votado un r¨¦cord de 242.000 electores: casi el 40% negros y de ellos, 56% mujeres, seg¨²n los datos estatales. La alta participaci¨®n de una comunidad que suele favorecer a los dem¨®cratas, pero que no acostumbra ir en masa a las urnas, embona las esperanzas de la campa?a del exvicepresidente Joe Biden.

Los sondeos en el sur conservador apuntan a que este a?o puede haber sorpresas. El mandatario republicano gan¨® en Georgia por cinco puntos en 2016 y, seg¨²n el portal especializado en pol¨ªtica Real Clear Politics, Biden lo supera ahora por el m¨ªnimo (0,4 puntos). Georgia no vota a un presidente dem¨®crata desde 1992. Trump, que lleva toda la semana realizando m¨ªtines en Estados bisagra, tiene previsto viajar este viernes al territorio sure?o, dejando en evidencia que no lo da por sentado.

La gran alarma para los republicanos son¨® en las legislativas de 2018, cuando la dem¨®crata Stacey Abrahams estuvo a 75.300 votos de convertirse en la primera gobernadora negra de Georgia, un territorio donde el 31% de la poblaci¨®n es afroamericana. La derrota estuvo plagada de pol¨¦micas por miles de papeletas rechazadas y las dificultades para votar ¡ªsobre todo por los problemas para registrarse en el censo¡ª en las ciudades habitadas principalmente por minor¨ªas raciales. En los pocos d¨ªas que han transcurrido del voto anticipado, ya se han presentado una serie de quejas: la lentitud de los ordenadores para registrarse, errores en las m¨¢quinas de votaci¨®n y que el lunes no abrieron las oficinas electorales de 35 de los 159 condados del Estado.

La duda acecha Texas, un basti¨®n republicano que desde hace cuatro d¨¦cadas no vota a un presidente dem¨®crata. Pero el segundo Estado en votos electorales (38), despu¨¦s de California, ha cambiado en la ¨²ltima d¨¦cada. M¨¢s de la mitad del crecimiento de su poblaci¨®n ha sido de latinos, representando el 30% del electorado en las presidenciales. La ret¨®rica contra los inmigrantes de Trump y el elevado impacto de la pandemia pueden cambiar las preferencias de voto. Trump gan¨® en dicho Estado en 2016 por casi 10 puntos. Ahora los sondeos le dan una ventaja de cinco.

La batalla por el acceso al voto ha cobrado protagonismo en Texas, especialmente despu¨¦s de que el gobernador republicano, Greg Abbott, redujera a menos de un mes de los comicios los sitios para depositar las papeletas solicitadas por correo, limit¨¢ndose a un solo sitio por condado. La medida afecta significativamente al condado de Harris, que tiene una poblaci¨®n de 4,7 millones de habitantes y que se convirti¨® en dem¨®crata con Barack Obama. Jill Biden, esposa de Joe Biden, viaj¨® el martes al Estado para animar a los ciudadanos a participar en el primer d¨ªa de votaci¨®n anticipada. La posible primera dama hizo paradas en El Paso, Houston y Dallas. En su ¨²ltimo evento dijo a los activistas dem¨®cratas que la escuchaban desde sus coches: ¡°Por primera vez en mucho tiempo, es posible ganar Texas¡±.

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