Melania Trump sale en defensa del aborto en sus memorias: ¡°Las mujeres deben tener autonom¨ªa para decidir¡±
La esposa de Donald Trump, que publicar¨¢ el libro el 8 de octubre y no suele pronunciarse sobre cuestiones pol¨ªticas, se expresa contra el sentir general del Partido Republicano
Resulta infrecuente, por no decir rar¨ªsimo, que Melania Trump se pronuncie sobre casi cualquier tema. Es muy poco com¨²n que la ex primera dama de Estados Unidos abra la boca en p¨²blico m¨¢s que para decir ¡°por favor¡± y ¡°gracias¡±, mucho menos para expresar opiniones pol¨ªticas o que puedan resultar controvertidas. De ah¨ª que haya supuesto toda una sorpresa en el pa¨ªs que la esposa de Donald Trump haya alzado la voz ¡ªo, en este caso, la pluma¡ª para hablar nada menos que del derecho al aborto. Y, adem¨¢s, y contra el sentir general del partido que lidera su marido, para defenderlo.
Melania Trump publica un libro de memorias el 8 de octubre del que apenas nada se sabe: su t¨ªtulo provisional es simplemente Melania y a¨²n no se ha desvelado su portada. Pero el diario brit¨¢nico The Guardian ha conseguido una copia y ha adelantado un extracto de la autobiograf¨ªa, en concreto uno en el que habla del derecho al aborto, una cuesti¨®n central en la campa?a de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, y, en general, muy puesto en duda por Trump. Y dice: ¡°Resulta imperativo garantizar que las mujeres tengan autonom¨ªa para decidir su preferencia acerca de tener hijos, bas¨¢ndose en sus propias convicciones, libres de cualquier intervenci¨®n o presi¨®n por parte del Gobierno¡±.
¡°?Por qu¨¦ alguien que no sea la propia mujer deber¨ªa tener el poder de determinar lo que hace con su propio cuerpo?¡±, contin¨²a la eslovena-estadounidense, de 54 a?os. ¡°El derecho fundamental de la mujer a la libertad individual, a su propia vida, le otorga la potestad de interrumpir su embarazo si as¨ª lo desea. Restringir el derecho de una mujer a decidir si interrumpe un embarazo no deseado equivale a negarle el control sobre su propio cuerpo. He llevado esta creencia conmigo durante toda mi vida adulta¡±.
Estos son los ¨²nicos p¨¢rrafos, hasta ahora, conocidos de las memorias, ya que hasta el momento no ha habido adelantos editoriales de las mismas; solo hab¨ªa un peque?o v¨ªdeo de adelanto en redes sociales donde defend¨ªa sus desnudos fotogr¨¢ficos cuando era modelo. Pero estas palabras suponen una enorme sorpresa, tanto por el hecho de poder escuchar por primera vez las ¡±creencias¡±, como ella misma las denomina, de la siempre discreta primera dama, como por el hecho de que su posici¨®n pol¨ªtica en este asunto est¨¦ muy distante de la del partido que comanda quien es su marido desde hace casi 20 a?os.
El aborto ya no est¨¢ protegido a nivel federal desde que en junio de 2022 el Tribunal Supremo derog¨® el precedente de Roe contra Wade, el fallo que en 1973 consign¨® el derecho al mismo en todo el pa¨ªs. El propio Trump fue quien seleccion¨® a jueces ultraconservadores que revisaron esa jurisdicci¨®n y decidieron tumbar un derecho que llevaba 50 a?os vigente en todo el pa¨ªs. ¡°Gracias a la genialidad, el coraz¨®n y la fuerza de seis jueces de la Corte Suprema pudimos hacerlo¡±, lleg¨® a decir, aplaudiendo una decisi¨®n de la que su esposa nada hab¨ªa dicho y que, por lo que se ve ahora, parece contraria. En la actualidad, alrededor de 25 millones de mujeres en Estados Unidos sufren restricciones a la hora de interrumpir sus embarazos por el motivo que sea.
Desde la pasada primavera, la postura oficial de Donald Trump ¡ªque tard¨® meses en aclarar, jugando al gato y al rat¨®n¡ª es que cada Estado del pa¨ªs sea el que decida al respecto del derecho al aborto. ¡°En este asunto, deben hacer lo que les dicte su coraz¨®n. Pero recuerden, tambi¨¦n debemos ganar elecciones para restablecer nuestra ideolog¨ªa y, de hecho, salvar nuestro pa¨ªs, que es actualmente, y de modo muy triste, una naci¨®n en declive¡±, afirm¨® el candidato a la presidencia de EE UU en un v¨ªdeo colgado en abril en su red social, Truth. ¡°Mi opini¨®n ahora es que tenemos aborto donde todo el mundo lo quiera, y desde el punto de vista legal los Estados lo determinar¨¢n mediante el voto, o legislaci¨®n, o quiz¨¢ las dos cosas. Y lo que decidan debe convertirse en la ley de ese territorio¡±. Durante la campa?a, adem¨¢s, ha difundido la mentira de que los dem¨®cratas aceptan el aborto hasta el noveno mes e incluso con el ni?o ya nacido, algo que lleg¨® a asegurar en su debate contra Kamala Harris, y que los presentadores atajaron al momento. En el debate de vicepresidentes, tambi¨¦n desde su red social, afirm¨® que no apoya una prohibici¨®n federal del aborto y que, de hecho, la vetar¨ªa. Tambi¨¦n afirm¨® que, como el presidente Reagan en los ochenta, apoya las excepciones por violaci¨®n, incesto y el riesgo de muerte de la madre.
En esta campa?a, igual que durante la presidencia de Trump (2016-2020), Melania Trump ha estado al lado de su marido, acompa?¨¢ndole en cenas de Estado, eventos de calado o en algunas visitas al extranjero. Sin embargo, nunca ha tenido el papel de otras primeras damas, cuyas funciones no est¨¢n reguladas oficialmente, pero que al llegar a la Casa Blanca suelen adquirir un cierto protagonismo, convirti¨¦ndose en una voz para unas u otras causas. Aunque su presencia medi¨¢tica ha sido constante, est¨¢ lejos de las labores que hicieron otras esposas de presidentes como Michelle Obama, Laura Bush o Nancy Reagan.
Adem¨¢s, la exmodelo tampoco est¨¢ teniendo una enorme presencia en la campa?a electoral. Mientras que Doug Emhoff, el esposo de Kamala Harris, la acompa?a a multitud de actos, la presenta y tiene una cierta agenda paralela a la misma ¡ªal igual que ha ocurrido durante meses con Jill Biden¡ª, Melania Trump apenas se deja ver en p¨²blico junto a su marido, aunque s¨ª sali¨® en su defensa tras el atentado sufrido en julio por el expresidente. Su ¨²ltimo acto conjunto fue hace m¨¢s de dos meses, el pasado 17 de julio, durante la convenci¨®n republicana en Milwaukee, Wisconsin. Ni antes ni despu¨¦s ha participado en ninguno de sus grandes m¨ªtines, ni tampoco estuvo acompa?¨¢ndole en el juicio por el caso Stormy Daniels ¡ªen el que el expresidente fue declarado culpable de ocultar pagos de 130.000 d¨®lares a la actriz de cine porno Stormy Daniels para que guardase silencio y no perjudicase sus opciones electorales en las presidenciales de 2016¡ªahorr¨¢ndose as¨ª el trago de ver declarar a la exactriz porno.
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