Nace ¡®S¨²per Puntalilla¡¯, la superhero¨ªna que ense?a feminismo a los estudiantes de un colegio de Murcia

Una nueva superhero¨ªna surca los cielos de Murcia. Se trata de S¨²per Puntalilla, un personaje creado antes del inicio de la pandemia por el CEIP El Puntal, un centro p¨²blico de atenci¨®n preferente que cubre Infantil y Primaria.

M¨¢s informaci¨®n

¡°El color rosa no tiene la culpa, pero forma parte de la construcci¨®n de g¨¦nero en las ni?as, eso s¨ª es cierto¡±

¡°Ni?as y ni?os tienen que saber que viven en una sociedad patriarcal que favorece a la parte masculina¡±

?Qu¨¦ saben los adolescentes sobre el feminismo?

Del mismo modo que a Spiderman le pic¨® una ara?a radioactiva, Superman vino de otro planeta y Batman se limit¨® a heredar mucho dinero, S¨²per Puntalilla cuenta tambi¨¦n con su propio origen. En su caso, hay que remontarse al curso escolar 2018-2019. Un a?o tras otro, la misma historia: actitudes de desprecio de los ni?os hacia unas ni?as que no vislumbran un futuro m¨¢s all¨¢ de ser madres y amas de casa. Un a?o tras otro, el mismo resultado: cumplidos los 12 a?os, momento de ingresar en un instituto para cursar Secundaria y empezar a orientar su formaci¨®n hacia una FP o hacia una carrera universitaria, ellas abandonan la escolaridad para adiestrarse en el manejo de las labores del hogar y poder ser unas madres hechas y derechas antes de los 15. Preguntadas por los docentes sobre por qu¨¦ lo quieren ser, se dan cuenta de que ni tan siquiera se trata de algo vocacional. Simplemente, responden las estudiantes, las cosas han sido as¨ª siempre: justo como deben ser.

Al igual que sucede tambi¨¦n en los primeros n¨²meros de la mayor¨ªa de personajes de Marvel y DC, S¨²per Puntalilla responde a una necesidad, pero es tambi¨¦n hija del azar. En esta historia, este se traduce en un encuentro fortuito en unas jornadas de innovaci¨®n pedag¨®gica entre un grupo de docentes de El Puntal y Pedro Antonio Garc¨ªa-Tudela, docente e investigador de la Universidad de Murcia que pertenece al departamento de Did¨¢ctica y Organizaci¨®n Escolar. Preguntado por los profesores sobre c¨®mo pod¨ªan mejorar la convivencia entre chicos y chicas en clase y, sobre todo, c¨®mo pod¨ªan ayudarlas a ellas a imaginar un futuro m¨¢s all¨¢ de las tareas dom¨¦sticas, Garc¨ªa-Tudela dio con la clave: ese trabajo era tan dif¨ªcil que necesitar¨ªan la ayuda de un superh¨¦roe. O de una superhero¨ªna, en este caso: S¨²per Puntalilla.

La invenci¨®n del personaje sirvi¨® para vertebrar cerca de una treintena de actividades que, tras ser preparadas con mimo durante todo el mes de abril, se desarrollaron durante los lunes y los viernes de los meses de mayo y junio. Todas ten¨ªan al menos un par denominadores comunes. El primero es que deb¨ªan privilegiar lo manipulativo sobre lo estrictamente te¨®rico, es decir, pintar, escribir o jugar antes que limitarse a escuchar en silencio una explicaci¨®n¡ª ah¨ª entr¨® en juego, por ejemplo, la ¡°femitina¡±, una sustancia que los alumnos introduc¨ªan en c¨¢psulas al acabar con ¨¦xito cada ejercicio y que es lo que daba a S¨²per Puntalilla sus poderes¡ª. La segunda cuesti¨®n esencial es que todas deb¨ªan girar en torno a la igualdad entre hombres y mujeres.

¡°Era emocionante ver c¨®mo los lunes y los viernes los alumnos te preguntaban por S¨²per Puntalilla¡±, explica Garc¨ªa-Tudela. Entre las actividades que m¨¢s recuerda, por ejemplo, figura la elaboraci¨®n de un anuncio que sirvi¨® para vender las 500 pulseras con las que recaudaron los 1.500 euros necesarios para cerrar el cap¨ªtulo 0 con un gran colof¨®n, la grabaci¨®n de una canci¨®n que cont¨® con la colaboraci¨®n del grupo de rap Machete en boca y que se hizo en un estudio profesional ubicado en Totana. ¡°Esper¨¢bamos alguna que otra resistencia, pero la verdad es que, durante el desarrollo del proyecto, todo fue como la seda¡±, relata este experto.

Coincide con ¨¦l Mar¨ªa Fernanda Pascasio, profesora de Infantil del centro: ¡°Las actividades fueron realmente motivadoras, tanto para los alumnos como para los profesores. Adem¨¢s, sirvieron para relanzar el colegio y cambiaron un poco nuestra manera de hacer las cosas. Nos hemos vuelto m¨¢s manipulativos. Fue el inicio de todo un proceso¡±. Entre sus d¨ªas favoritos del proyecto se encuentra, por ejemplo, el d¨ªa en el que trataron los prejuicios que existen en torno a hombres y mujeres a la hora de vestir.

Si Garc¨ªa-Tudela fue el ide¨®logo, Mar¨ªa Mart¨ªnez, directora del centro, fue quien guio a los docentes, el brazo ejecutor. ¡°Desde el principio, todos se involucraron mucho. Buscaron muchas actividades que tuvieran una metodolog¨ªa din¨¢mica. A m¨ª lo que me gustaba eran las reflexiones a que daban lugar luego los ejercicios¡±, cuenta esta profesora, que, preguntada sobre si el proyecto ayud¨® a cambiar algo la manera de ver el mundo de su alumnado, responde sin dudar: ¡°Taxativamente, s¨ª. Este curso tenemos al menos tres ni?as que quieren seguir estudiando despu¨¦s de Primaria. Esto hace unos a?os era impensable. Tambi¨¦n vemos en los ni?os actitudes m¨¢s respetuosas hacia ellas¡±. Pascasio pone un ejemplo de estos avances: ¡°Ahora alguna chica te puede llegar a decir por ejemplo que quiere ser astronauta o cient¨ªfica. Se lo imaginan porque hemos hablado de mujeres que han llegado hasta ah¨ª¡±.

Continuar¨¢

Pero no todo son buenas noticias para S¨²per Puntalilla. Como todo superh¨¦roe que se precia, ella tambi¨¦n cuenta con enemigos, algunos particularmente poderosos. Lo empez¨® a notar el propio Garc¨ªa-Tudela en la secci¨®n de comentarios del video de la canci¨®n que fue fruto del proyecto y que hoy es el himno oficioso del colegio El Puntal: ¡°Desde 2019, cuando propuse a S¨²per Puntalilla, tengo la impresi¨®n de que la sociedad se ha polarizado. A m¨ª me da miedo que una propuesta as¨ª, que pretende ser un servicio a la comunidad, se tense. Decid¨ª suprimir los comentarios del video porque algunas opiniones solo iban encaminadas a restar credibilidad a todo el trabajo que hab¨ªamos hecho¡±.

Ni Garc¨ªa-Tudela ni la direcci¨®n ni el equipo docente del centro son ajenos a la realidad. Desde el pasado mes de abril, la consejera de Educaci¨®n y Cultura en Murcia es Mabel Campuzano, que se ha hecho con la consejer¨ªa tras militar en el partido de extrema derecha Vox y que ya ha prometido que el a?o que viene implantar¨¢ un pin parental en la regi¨®n para que los padres puedan vetar actividades que tengan que ver, por ejemplo, con la educaci¨®n sexual o con el feminismo, una cuesti¨®n que, tratada en las aulas, es definida por el partido liderado por Santiago Abascal como un intento de adoctrinar en ¡°ideolog¨ªa de g¨¦nero¡±.

¡°Contamos con un proyecto educativo de centro aprobado por las familias que recoge la necesidad de hablar de igualdad entre hombres y mujeres. Adem¨¢s, hay Reales Decretos que nos obligan a tratar este tema de manera transversal en todas las asignaturas. No hacemos nada del otro mundo, solo cumplimos la ley¡±, explica la directora de El Puntal.

Aunque el ¨²ltimo a?o la pandemia impidi¨® a profesores y equipo directivo de este centro pensar mucho m¨¢s all¨¢ de los protocolos a aplicar contra el coronavirus en el d¨ªa a d¨ªa, Mart¨ªnez adelanta que ya ha habido contactos con otros colegios de la zona que se han interesado por el proyecto y quieren darle continuidad, al menos, en un futuro cap¨ªtulo uno. La idea, esbozada r¨¢pidamente la directora de El Puntal, es que la siguiente aventura de la superhero¨ªna murciana no abarque solo un par de meses, sino que se pueda desarrollar durante todo un a?o y que sirva para que varios colegios puedan unir fuerzas. S¨²per Puntalilla continuar¨¢.

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