Carta a mi hijo con discapacidad: el poder del silencio y del amor sin artificios
La incertidumbre y la indecisi¨®n son de las peores cosas con las que lidiar cuando tienes un adolescente con una enfermedad rara. Aprender a tomar decisiones r¨¢pidas y no cuestionarlas es una gran virtud
Querido Alvarete:
Que tu hijo tenga un reloj con una cuenta atr¨¢s en la cabeza, sin duda, marca car¨¢cter. El tener que luchar por intentar detener la cuenta o, al menos, ralentizarla es una tarea que, inevitablemente, acaba endureci¨¦ndote, ya sea para bien o para mal. Esta cuenta se aceler¨® en el ¨²ltimo mes, lo que nos ha obligado a tu madre y a m¨ª a hacer un sobreesfuerzo por intentar normalizarla nuevamente. Afortunadamente, ya sabemos a qu¨¦ atenernos, tenemos el plan claro y lo hemos puesto en marcha r¨¢pidamente.
La incertidumbre y la indecisi¨®n son de las peores cosas con las que lidiar, por lo que aprender a tomar decisiones r¨¢pidas y no cuestionarlas, en este entorno, es una gran virtud que te ayuda a seguir para adelante. A veces, nos empe?amos en dar tantas vueltas a las cosas que acabamos entrando en una catarsis que nos impide tomar decisiones o estar tranquilos con las tomadas. En mi opini¨®n, una mala decisi¨®n a tiempo puede ser mejor que una buena a destiempo.
Estas experiencias est¨¢n ense?¨¢ndome a valorar a las personas directas y, sobre todo, sinceras. Perdemos demasiado tiempo en el envoltorio y, sin embargo, nos olvidamos de que lo m¨¢s importante es lo que alguien lleva dentro. La pel¨ªcula Silencio, de Martin Scorsese, aborda este tema, le hace plantearse a uno qu¨¦ es lo realmente importante, si las muestras exteriores y tradiciones, tan relevantes en esta sociedad, o lo que realmente llevamos en el coraz¨®n.
Esto hace que basemos las relaciones en rituales que deber¨ªan ayudarnos a tener ¨¦xito en ellas, pero acabamos d¨¢ndoles tanta importancia que dejan de ser un medio para convertirse en un fin, lo que provoca que, cuando desaparecen, se acaben las relaciones.
El ejemplo t¨ªpico de esto es el amor. Puede suceder que nos enamoremos m¨¢s del amor en s¨ª que de la propia persona. Nos gusta el cosquilleo de los primeros meses, el estar acompa?ados, los planes¡ pero en el fondo da igual con qui¨¦n estemos, ya que lo que nos atrae es la situaci¨®n y no tanto la persona. Por eso, ante las dificultades, el amor desaparece.
Cuando una pareja tiene que luchar contra el cron¨®metro de un hijo constantemente las capas que recubren su amor, inevitablemente, van erosion¨¢ndose hasta tal punto que dejan al descubierto el amor en s¨ª, sin nada m¨¢s, y en ese momento es cuando te das cuenta de si lo que realmente est¨¢ construido es de paja o de hormig¨®n.
Para tu madre y para m¨ª, o para otras tantas parejas que se enfrentan a situaciones parecidas, cosas de pareja tan sencillas como salir a cenar, pasear, dormir, viajar o re¨ªrse¡ se convierten en acciones espor¨¢dicas, de corta duraci¨®n y con la dificultad a?adida de ser conscientes de ello.
El amor verdadero se conoce cuando, al igual que las flores florecen, se abre y muestra el interior sin m¨¢s protecci¨®n que el propio amor. En ese momento, te das cuenta de que lo importante es estar con la persona querida y no d¨®nde ni c¨®mo.
Me vienen a la cabeza tantas parejas, padres de ni?os extraordinarios, que me han ense?ado en silencio tanto sobre el amor. Todas ellas con el mismo perfil: directas, sinceras y sin importarles las apariencias, ya que se centran en lo realmente importante, el interior y no el envoltorio.
Soy inmensamente feliz sabiendo que, a pesar de las pruebas y dificultades, mi amor por tu madre es pleno, aunque a veces sea silencioso. Nuestra historia de amor no ser¨¢ la m¨¢s bonita, pero, sin duda, es eterna.
Os quiero.
*?lvaro Villanueva es padre de Alvarete, un ni?o que padece una enfermedad rara, y es fundador de la Fundaci¨®n Luchadores AVA.
Puedes seguir Mamas & Papas en Facebook, Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter quincenal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.