Raquel S¨¢nchez, exministra: ¡°Madrid es el modelo del ¡®s¨¢lvese quien pueda¡±
La extitular de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana cuestiona que varios gobiernos auton¨®micos defiendan el inmovilismo y la gentrificaci¨®n en sus ciudades
Raquel S¨¢nchez (Gav¨¤, Barcelona, 48 a?os), hoy directora de Paradores Nacionales, dirigi¨® entre julio de 2021 y noviembre de 2023 la cartera de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Bajo su mandato se aprob¨® la pol¨¦mica ley de vivienda que acaba de cumplir un a?o en vigor. En estos 12 meses, las cifras han empeorado, pero S¨¢nchez sostiene que hay que dar tiempo a la nueva norma para que se vean los resultados. En esta entrevista mantenida el pasado 22 de julio en su despacho de las oficinas de Paradores, la exministra y exalcaldesa de Gav¨¤ sostiene que, dado que la mayor¨ªa de las autonom¨ªas se niegan a aplicar la ley, los ciudadanos deben exigir responsabilidades a esos gobernantes que, con su actitud, rechazan una mejora de las condiciones de vida de sus gobernados. S¨¢nchez destaca el ejemplo de Madrid: ¡°Es el modelo del s¨¢lvese quien pueda¡±.
Pregunta. La ley de Vivienda ha cumplido un a?o en mayo, pero los alquileres han subido un 13% y la oferta ha retrocedido un 15%. ?Ha fallado la ley?
Respuesta. No creo que est¨¦ fallando la ley. La que aprobamos hace un a?o sigue siendo hist¨®rica, la primera de la democracia en materia de vivienda. Tambi¨¦n es cierto que ya dec¨ªamos que no pod¨ªa solucionar un problema que se ha convertido en estructural en nuestro pa¨ªs. La ley sienta unas bases y marca el modelo a construir, pero no es la soluci¨®n por s¨ª sola. Tambi¨¦n hay que darle un recorrido temporal. Un a?o es poco tiempo para poder valorar si funciona o no.
P. La mayor¨ªa de las comunidades aut¨®nomas la han rechazado.
R. Las competencias en materia de vivienda son auton¨®micas. Son las comunidades las que tienen que aplicar el contenido de la ley. Hay materias que tienen que aplicar obligatoriamente, como la regulaci¨®n del precio de alquiler, pero otras no. Muchas autonom¨ªas gobernadas por el PP ya dijeron que no iban a aplicar la ley incluso antes de aprobarse, aunque creo que finalmente caer¨¢ por su propio peso porque es un instrumento que tiene que servir para que el resto de las pol¨ªticas que aplicamos y que aplican las comunidades aut¨®nomas y los ayuntamientos sean eficaces y efectivas. La ley consolida la vivienda como el quinto pilar del estado del bienestar, pero hace falta que pongamos m¨¢s vivienda a disposici¨®n de la gente y a precio asequible. La ley necesita del consenso de todas las administraciones y tambi¨¦n interpela al sector privado.
P. ?C¨®mo interpela al sector privado?
R. Hemos defendido contar con el sector privado. La colaboraci¨®n p¨²blico-privada es clave para que el modelo de vivienda protegida, de vivienda a precio concertado, funcione y sea tambi¨¦n una oportunidad para la empresa. Si el sector privado es capaz de ver que se pueden generar beneficios razonables garantizando a la vez el acceso a la vivienda de las clases medias y trabajadoras, todos ganaremos.
P. La ley en s¨ª no obliga a la construcci¨®n de nueva vivienda, que escasea.
R. El Gobierno present¨®, paralelamente a la ley, un plan de construcci¨®n de m¨¢s de 180.000 viviendas que a¨²n est¨¢n en proceso. Las viviendas no pueden construirse de hoy para ma?ana. Contamos con la financiaci¨®n de los fondos europeos para construir gran parte de esas viviendas, en torno a 20.000.
P. Las cifras eran negativas hace un a?o y lo son ahora.
R. Nunca dijimos que en un a?o presentar¨ªamos unos resultados ¡°X¡±. La pelota est¨¢ ahora en el tejado de las comunidades aut¨®nomas. Las que no apliquen los mecanismos previstos tendr¨¢n que rendir cuentas ante sus ciudadanos.
P. ?Escucharon a esas comunidades aut¨®nomas que hoy rechazan la ley?
R. Claro que s¨ª. Esta ley fue ampliamente debatida. Hablamos con las conferencias sectoriales de vivienda y con representantes de las comunidades aut¨®nomas. Todos tuvieron voz a trav¨¦s de la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias. La voz de los alcaldes y alcaldesas es fundamental, ya que la vida de los ciudadanos se desarrolla en los pueblos y en las ciudades. Tambi¨¦n hablamos con las asociaciones municipalistas. Pese a todo, el PP siempre estuvo en contra de esta ley. Sin conocerla, se negaron a aplicarla.
P. La presidenta de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, reconoce que en Madrid hay ¡°zonas tensionadas¡±, pero se niega a aplicar la ley, que prev¨¦ precios regulados en esas ¨¢reas.
R. Ella misma puso un ejemplo de lo que pagaba de alquiler, y vino a decir que, si uno no se puede permitir un piso determinado, lo que ten¨ªa que hacer es irse a un lugar en el que s¨ª se lo pueda permitir. Al fin y al cabo, lo que defienden es el inmovilismo, la gentrificaci¨®n y el desplazamiento. Es Ayuso quien tiene que explicar a sus ciudadanos por qu¨¦ no la aplica. Los madrile?os deben exigir responsabilidades, porque tienen a un dirigente p¨²blico que est¨¢ desatendiendo una necesidad b¨¢sica: el acceso a una vivienda que te da derecho o que te abre la puerta para poder ejercer otros derechos.
Sin ser un derecho fundamental, evidentemente tenemos que garantizar el derecho a la vivienda
P. ?Deber¨ªa tener en la Constituci¨®n ese derecho a la vivienda la protecci¨®n especial con la que cuentan otros fundamentales como el de asociaci¨®n, reuni¨®n o difusi¨®n de ideas y opiniones?
R. Siempre hemos defendido que, sin ser un derecho fundamental, evidentemente es un derecho que tenemos que garantizar. La propia Constituci¨®n, sin calificarlo como un derecho fundamental, prescribe a los poderes p¨²blicos la obligaci¨®n de garantizar el acceso a la vivienda y eso es lo que intentamos hacer aprobando esa ley. La norma fue recurrida precisamente porque el Partido Popular entend¨ªa que el Estado no pod¨ªa entrar a regular esa materia, cuando estamos hablando de un derecho que la Constituci¨®n obliga a los poderes p¨²blicos y a las administraciones a que lo protejan y garanticen.
P. Como alcaldesa de Gav¨¤ (Barcelona) continu¨® un proyecto iniciado hace 30 a?os, llamado ¡°Pla de Ponent¡±, criticado por sectores a la izquierda del PSC. El plan incluye la construcci¨®n de m¨¢s de 5.000 viviendas en el municipio, de 46.000 habitantes. ?Eran necesarias tantas viviendas?
R. Sigo defendiendo las bondades de ese plan. Estamos hablando de una situaci¨®n de emergencia habitacional y yo creo que nadie puede cuestionar que el ¨¢rea metropolitana de Barcelona sufre esas tensiones por la escasez o de la falta de vivienda. Quiero tambi¨¦n aclarar que ese era un proyecto que siempre defendimos con un modelo de crecimiento concreto y sostenible, en funci¨®n de las necesidades de la ciudad y dando respuesta a las clases medias y trabajadoras, y a los j¨®venes con especiales dificultades para encontrar una vivienda digna y asequible. Siempre defendimos que el plan deb¨ªa desarrollarse por fases, como de hecho se est¨¢ haciendo, y con m¨¢s de un 40% de las viviendas de protecci¨®n oficial. La clave es el desarrollo sostenible, la sostenibilidad en su triple vertiente econ¨®mica, social y ambiental.
La okupaci¨®n es un problema relevante, pero est¨¢ mitificado. En los ¨²ltimos a?os ya se ha producido un descenso muy sustantivo
P. ?Supone un problema relevante la okupaci¨®n a la vista de los casos que se registran cada a?o?
R. S¨ª es un problema relevante, pero est¨¢ mitificado. En los ¨²ltimos a?os ya se ha producido un descenso muy sustantivo, seg¨²n datos del Ministerio del Interior, y cada vez se habla m¨¢s de ello. El problema es cada d¨ªa m¨¢s irrelevante. Es un recurso f¨¢cil para aquellos que viven de la demagogia, como tambi¨¦n lo son cuestiones como la inmigraci¨®n.
P. Como presidenta de Paradores, ?c¨®mo valora las nuevas formas de hospedaje tur¨ªstico y su impacto sobre la escasez de vivienda en las ciudades?
R. No podemos perder de vista que el turismo es un gran activo en nuestro pa¨ªs, porque somos un pa¨ªs l¨ªder a escala mundial y un destino tur¨ªstico de primer nivel. Es cierto que hay un turismo que a veces genera externalidades negativas, y eso es lo que tenemos que afrontar. Hay alojamientos tur¨ªsticos ilegales, fuera de control, y esos no pueden estar permitidos y tienen que ser sancionados y eliminados.
P. ?Por qu¨¦ se tarda tanto en regular y sancionar a plataformas que publican un 95% de sus ofertas de alojamiento al margen de la legalidad?
R. En Barcelona, por ejemplo, ya se han puesto encima de la mesa medidas de control y sanci¨®n a estos apartamentos tur¨ªsticos ilegales. Madrid es el modelo del s¨¢lvese quien pueda y parece que todo se puede hacer con independencia de sus consecuencias negativas para la inmensa mayor¨ªa de ciudadanos.
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