El Ranchero, la ¨²ltima detenci¨®n de alto perfil para el ¡®caso Ayotzinapa¡¯

Dentro de la extensa red de procesos, rutas de investigaci¨®n, trabajos de b¨²squeda y desencuentros entre las partes que componen el universo del caso Ayotzinapa, el Gobierno aprovech¨® la ¨²ltima reuni¨®n del sexenio con las familias de los 43 estudiantes desaparecidos, este lunes, para informar de la detenci¨®n de tres personajes presuntamente implicados en el ataque. Son detenciones importantes, que podr¨ªan ayudar a profundizar en los hechos, sobre todo en el caso de uno de ellos, Erick Rom¨¢n Fern¨¢ndez, un cacique del ¨¢rea de Apetlanca, en Guerrero, punto recurrente en las b¨²squedas de los investigadores sobre el terreno estos a?os.

Apodado El Ranchero, Rom¨¢n Fern¨¢ndez es un ganadero conocido en la zona, parte supuestamente del grupo criminal Guerreros Unidos, organizaci¨®n que perpetr¨® el ataque contra los estudiantes normalistas, apoyado por autoridades, en Iguala, Guerrero, el 26 y 27 de septiembre de 2014. Su nombre aparece en el tercer informe del GIEI, el equipo de investigadores que la CIDH comision¨® a M¨¦xico durante el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018), y que volvi¨® a?os m¨¢s tarde, ya con Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador en el poder. Uno de los principales operadores del grupo criminal en la ¨¦poca, convertido en testigo protegido bajo el seud¨®nimo de Juan, se?ala que Rom¨¢n Fern¨¢ndez integraba el segundo escalaf¨®n de mando de la organizaci¨®n.

En el informe del GIEI, Rom¨¢n Fern¨¢ndez aparece en la p¨¢gina 226. Los investigadores, que elaboraron sus pesquisas en paralelo a las autoridades mexicanas, rescataban un documento interno del Ej¨¦rcito, el ¡°F.C.A. N? 0999¡å, referente a ¡°una persona de nombre Erick Rom¨¢n Fern¨¢ndez, que traslad¨® a los alumnos de la escuela Normal Isidro Burgos a la comunidad de Apetlanca, Municipio de Cuetzala¡±. El GIEI se?ala que el documento tiene relaci¨®n con el 41 Batall¨®n de Infanter¨ªa, que lo habr¨ªa elaborado o recibido el 10 de octubre de 2014, unas semanas despu¨¦s del ataque.

Dentro de la documentaci¨®n castrense que revis¨® el GIEI, destaca adem¨¢s una denuncia an¨®nima que recibi¨® el 7 de octubre la polic¨ªa estatal, que se?alaba que ¡°los Guerreros Unidos se encuentran refugiados en Apetlanca¡±, que su jefe en la zona se apoda El 21, personaje que habr¨ªa llegado a la comunidad de la mano de ¡°un joven llamado Erick Rom¨¢n Fern¨¢ndez, que pertenece a los Guerreros Unidos, que participaron en la matanza de los normalistas de Iguala y est¨¢ escondido en Apetlanca y Tianquizolco¡±. Al parecer, esta denuncia habr¨ªa motivado el mensaje posterior, el F.C.A. N? 0999. Se ignora si el Ej¨¦rcito o la polic¨ªa estatal la pusieron en manos de los investigadores.

Apetlanca y otras comunidades de Cuetzala, caso de Tianquizolco, han aparecido desde el principio en el radar de los investigadores. Ya en 2014, se presum¨ªa que los tent¨¢culos de Guerreros Unidos llegaban a ese lado de la sierra, camino de la regi¨®n de Tierra Caliente. A finales de octubre de 2014, la Armada detuvo all¨ª a tres presuntos participantes del ataque y posterior desaparici¨®n, Jonathan Osorio, alias Jona, Patricio Reyes, alias Pato, y Dar¨ªo Morales. Liberados a?os despu¨¦s por falta de pruebas ¨Cinvalidadas sus declaraciones autoinculpatorias por haberse obtenido mediante tortura¨C, Jona y Pato fueron se?alados como parte del grupo de perpetradores principales, primero del ataque y luego de la desaparici¨®n de los muchachos.

En el ¨²ltimo informe de la comisi¨®n presidencial que ha investigado el caso este sexenio, la Covaj, los investigadores apuntan igualmente Apetlanca como uno de los posibles destinos de parte de los muchachos. Lo hacen a partir de las declaraciones de dos implicados. El primero, Walter Deloya, parte de la estructura de Guerreros Unidos, dec¨ªa que ¡°a los estudiantes que trasladaron por a carretera de Cocula, los pudieron haber llevado Tianquizolco, Apaxtla y Cuetzala¡±. El segundo, el testigo protegido Charly, se?ala que a un grupo de los estudiantes se los llevaron ¡°en direcci¨®n a Apetlanca, atravesando por las localidades de Machito de Flores y Tianquizolco. ?l se?ala tres posibles destinos, La Capilla, Loma Alta y Las Cuevillas¡±. La Covaj ha buscado estos a?os en esos tres lugares, sin ¨¦xito.

Berber y el polic¨ªa

Las otras dos detenciones resultan igualmente relevantes, por motivos distintos. La de Marco Antonio N, alias La Pompi, es un gui?o a las familias, que estos a?os han visto como un buen pu?ado de acusados sal¨ªa de prisi¨®n por falta de pruebas. La Pompi fue uno de los primeros detenidos del caso, cuando las investigaciones todav¨ªa estaban en manos de la Fiscal¨ªa de Guerrero, a principios de octubre. El tercer detenido es Hugo C. un polic¨ªa de Huitzuco, corporaci¨®n que particip¨® en uno de los dos escenarios de la desaparici¨®n, el Palacio de Justicia de Iguala.

El caso de La Pompi es relevante. En su primera declaraci¨®n, ante los investigadores de Guerrero, se?al¨® que ¨¦l y otros colegas, bajo el mando del presunto jefe de sicarios del grupo criminal en Iguala, alias Choky, acabaron con la vida de nueve de los 43, en un cerro cerca de Pueblo Viejo, a las afueras de Iguala. La Pompi dispar¨® contra dos de ellos, seg¨²n dijo ¨¦l mismo. Ocurre, sin embargo, que La Pompi denunci¨® que los fiscales de Guerrero le hab¨ªan torturado y en posteriores declaraciones, ya ante la Fiscal¨ªa federal, omiti¨® su participaci¨®n activa en estos asesinatos. En la del 6 de octubre solo habla de tres de los muchachos, que ve c¨®mo matan. En la del 21 de octubre, vuelve a hablar de nueve muchachos asesinados, de un grupo total de 13, parte de los 43.

El grupo que refiere La Pompi formar¨ªa parte de los muchachos que, en la ruta de desaparici¨®n, pasaron por la instalaci¨®n de Barandilla de la polic¨ªa de Iguala, que actu¨® de la mano de Guerreros Unidos. As¨ª lo refiere en su declaraci¨®n ante la Fiscal¨ªa de Guerrero. Ignorado al principio, los investigadores tienen claro hoy d¨ªa que un grupo de muchachos pas¨® por all¨ª. No es seguro si fue el grupo detenido en el escenario norte del ataque, el cruce de la calle Juan N. ?lvarez con Perif¨¦rico, o en el sur, el Palacio de Justicia. Pero por los dichos de La Pompi, parecer¨ªa el primero. En sus declaraciones repite varias veces que es all¨ª a donde va, siguiendo a una de las caravanas de buses de los estudiantes, por orden del jefe de halcones ¨Cvig¨ªas¨C del grupo en el municipio, David F. alias Chino.

El nombre de la Pompi aparece tambi¨¦n uno de los documentos m¨¢s importantes del caso, conocido en 2021, intercepciones de mensajes a integrantes de la red criminal en la regi¨®n, llevadas a cabo por el Ej¨¦rcito. En uno de los dos documentos que la Covaj divulg¨® entonces, El Cholo Palacios, presunto cabecilla de Guerreros Unidos en Huitzuco y alrededores, habla con un tal Ram¨®n, al parecer un polic¨ªa del pueblo cercano de Tepecoacuilco. Ram¨®n le dice al Cholo que ¡°se ponch¨® feo La Pompi¡±, aludiendo a su detenci¨®n ese mismo d¨ªa. Era el 4 de octubre de 2014.

La detenci¨®n de La Pompi, torturas mediante, condujo a los investigadores a la primera red de fosas clandestinas halladas durante los primeros meses de investigaci¨®n del caso Ayotzinapa, las fosas de Pueblo Viejo. Decenas de cuerpos salieron del subsuelo, revelando una realidad terrible: el ataque contra los normalistas era la punta del iceberg, Guerreros Unidos y su red de apoyo institucional llevaban a?os matando y desapareciendo personas en la regi¨®n. En todos estos a?os, los investigadores no han encontrado pistas de ninguno de los 43 en Pueblo Viejo y alrededores.

El ¨²ltimo detenido, Hugo C., era parte de la polic¨ªa de Huitzuco en el momento del ataque. En la noche del 26 de septiembre de 2014, los estudiantes de la escuela de Ayotzinapa que hab¨ªan llegado a Iguala a tomar autobuses, salieron de la terminal del centro, a bordo de cinco unidades. Dos se fueron hacia Juan N. ?lvarez y tres hacia el sur, rumbo al Palacio de Justicia. All¨ª, polic¨ªas de Iguala atacaron al que abr¨ªa la marcha. Todos los muchachos que iban a bordo de ese veh¨ªculo, entre 15 y 20 desaparecieron. Se ha especulado mucho estos a?os con el destino de este grupo. De lo que no hay duda es que polic¨ªas de Huitzuco participaron en el traslado de los muchachos. La cuesti¨®n es a d¨®nde. Los principales responsables de la corporaci¨®n, el jefe, Javier N¨²?ez, y sus hijos, Celedonio y Ariel, est¨¢n pr¨®fugos.

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