El enigma de la Isla Bermeja: qu¨¦ se sabe de su posible desaparici¨®n y su trascendencia geopol¨ªtica

El debate por el cambio de nombre del Golfo de M¨¦xico y la delimitaci¨®n de las fronteras mar¨ªtimas de cada pa¨ªs ha reavivado el misterio de la Isla Bermeja, un territorio que aparece en documentos hist¨®ricos pero que nunca ha sido localizado. Mapas antiguos sit¨²an al islote en las coordenadas 22 grados, 33 minutos latitud norte y 91 grados, 22 minutos longitud oeste, a 100 kil¨®metros de la pen¨ªnsula de Yucat¨¢n, pero las b¨²squedas que se han realizado en los ¨²ltimos a?os no han arrojado evidencias concretas de su existencia.

La Isla Bermeja se menciona tanto en textos de navegaci¨®n escritos por viajeros europeos como en la cartograf¨ªa de los siglos XVI al XIX. La primera vez que apareci¨® en los registros n¨¢uticos fue en 1536. ¡°Es una isleta peque?a y que de lejos bermej¨¦a¡±, escribi¨® Alonso de Chaves en Espejo de Navegantes. Los cart¨®grafos portugueses incluyeron a la Isla Bermeja en sus mapas, que posteriormente fueron replicados por los franceses. De acuerdo con una investigaci¨®n realizada por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica y Geograf¨ªa (Inegi), por siglos no se verificaron las coordenadas del islote, y simplemente se tom¨® como verdad lo que estaba representado en mapas anteriores.

La primera b¨²squeda oficial fue comisionada por Juan Baptista Bonet, jefe de escuadra de la Real Armada en 1775, a esta le sigui¨® la del marino Ciriaco de Cevallos entre 1804 y 1805, en ninguno de los casos se pudo localizar la Isla Bermeja, sin embargo, se le sigui¨® representando en la cartograf¨ªa ante el enigma de su desaparici¨®n.

Su importancia geopol¨ªtica

A finales de la d¨¦cada de los 90, comprobar la existencia de la Isla Bermeja adquiri¨® relevancia para el gobierno de Ernesto Zedillo, puesto que podr¨ªa significar una ventaja en las negociaciones con Estados Unidos por el espacio en el Golfo de M¨¦xico conocido como ¡°Hoyo de Dona¡±, el cual se caracteriza por la riqueza de sus recursos naturales como el petr¨®leo y el gas. En 1997, las autoridades enviaron a un buque de la Armada para tratar de localizar el islote, pero no se encontr¨® rastro alguno.

En su momento comenzaron a circular teor¨ªas de conspiraci¨®n para tratar de explicar qu¨¦ hab¨ªa pasado con la Isla Bermeja. Quiz¨¢ se hab¨ªa hundido a causa de un maremoto, pudo desaparecer a causa del calentamiento global, o incluso se dijo que fue dinamitada por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para beneficiar a Estados Unidos. Curiosamente, las relaciones bilaterales con el pa¨ªs vecino han provocado que esta ¡°isla fantasma¡± sea nuevamente de importancia para el Gobierno mexicano.

Una de las ¨®rdenes ejecutivas firmadas por Donald Trump al asumir su segundo mandato ped¨ªa que el Golfo de M¨¦xico pasara a llamarse Golfo de Am¨¦rica. Aunque se puso en duda su viabilidad, Google anunci¨® que sustituir¨¢ en su aplicaci¨®n Maps el nombre, al menos para usuarios en Estados Unidos. La presidenta Claudia Sheinbaum fue cuestionada en su Ma?anera sobre la posible amenaza que esto representa para la soberan¨ªa de M¨¦xico sobre sus fronteras mar¨ªtimas, tomando como ejemplo lo que pas¨® con la Isla Bermeja. La mandataria explic¨® que ha tenido conversaciones al respecto con el secretario de Marina, el almirante Raymundo Pedro Morales ?ngeles, y que pr¨®ximamente lo invitar¨¢ a su conferencia para informar m¨¢s detalles.

?Qu¨¦ han revelado las investigaciones?

Hasta ahora, las investigaciones oficiales han determinado que nunca existi¨® la Isla Bermeja, y que se trata de un error cartogr¨¢fico que se repiti¨® por siglos sin que nadie lo verificara. La b¨²squeda m¨¢s completa es la de la Universidad Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM), que en 2009 realiz¨® una investigaci¨®n multidisciplinaria que incluy¨® un an¨¢lisis hist¨®rico y cartogr¨¢fico, un recorrido en el buque Justo Sierra, y un levantamiento a¨¦reo en el que participaron siete entidades universitarias. ¡°La batimetr¨ªa incluy¨® una profundidad de mil 472 metros y la superficie analizada por el buque fue de 223 kil¨®metros cuadrados. La observaci¨®n a¨¦rea abarc¨® 10 mil 488 kil¨®metros cuadrados, aunque en torno a una superficie de 454 kil¨®metros cuadrados se levantaron 933 impresiones fotogr¨¢ficas digitales¡±, se lee en el bolet¨ªn. Finalmente, se estableci¨® que actualmente no existe la Isla Bermeja, y tampoco se encontraron vestigios de su posible ubicaci¨®n en esas coordenadas.