Espa?oles
La propuesta de facilitar que gobierne la lista m¨¢s votada sin posibilidad de pactos supone no s¨®lo una decisi¨®n anticonstitucional, sino tambi¨¦n un esfuerzo por dejar fuera de las instituciones al 70% de la ciudadan¨ªa
Me reconozco de manera inevitable como un hombre sesent¨®n. En Artes de ser maduro, Gil de Biedma nos ense?¨® que envejecer tiene su gracia, igual que aprender a bailar cuando uno es joven. Con la torpeza y las limitaciones de la edad, uno procura acomodarse a la m¨²sica que suena en las puertas del destino. Yo nac¨ª, perdonadme, en un pa¨ªs de voz aflautada y ¨®rdenes agresivas en las que un dictador nos llamaba espa?oles y luego contaba historias oficiales que se parec¨ªan poco a la verdadera realidad nacional. La apuesta por la democracia supuso una b¨²squeda de la Espa?a real a lo largo y a lo ancho de sus rincones, matices, ilusiones y olvidos. Haber vivido ayuda a valorar la dimensi¨®n hist¨®rica de la existencia.
P¨¦rez Gald¨®s ten¨ªa mi misma edad, 64 a?os, cuando en 1907 public¨® una carta en El Pa¨ªs de entonces para anunciar su paso a la representaci¨®n pol¨ªtica institucional. Cansado de que la palabra patriotismo fuese un arma agresiva, vieja y enmohecida, quiso darle un coraz¨®n c¨ªvico en contacto con la realidad del pueblo. La pol¨ªtica democr¨¢tica es eso, la apuesta por una vida institucional que responda a las verdades sociales del pa¨ªs que representa. Por eso me ha preocupado desde hace tiempo la voluntad de regresi¨®n de una derecha espa?ola que, en defensa de unos sectores privilegiados y sin voluntad de convivencia, procura un camino de vuelta: una Espa?a oficial ajena a los matices y extensiones de la Espa?a real.
La propuesta de facilitar que gobiernen las listas m¨¢s votadas sin posibilidad de pactos supone no s¨®lo una decisi¨®n anticonstitucional, sino tambi¨¦n un esfuerzo por dejar fuera de las instituciones al 70% de la ciudadan¨ªa. Se trata de un rumbo peligroso. Aceptar las tensiones es la ¨²nica manera de evitar que las falsas normalidades estallen un d¨ªa sin control y nos hagan saltar a todos por los aires.
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