India como soluci¨®n a la medicina mundial
La investigaci¨®n m¨¦dica avanzar¨¢ en los pr¨®ximos a?os mediante procedimientos cada vez m¨¢s eficaces y m¨¢s caros. Los economistas de la salud y los ministerios de Sanidad van a tener que hacer muchos n¨²meros
El problema m¨¢s acuciante de la medicina no es cient¨ªfico, sino financiero. El Nusinersen, un medicamento contra la atrofia muscular espinal, cuesta 750.000 d¨®lares el primer a?o de tratamiento, y la mitad a partir del segundo. No se trata de una pastilla, sino de una serie de inyecciones en el l¨ªquido cefalorraqu¨ªdeo que solo puede practicar un personal bien entrenado, y que adem¨¢s consisten en una mol¨¦cula biol¨®gica sofisticada (ARN antisentido, en la jerga) que no se puede comprar en la droguer¨ªa. Argumentos similares se aplican al Elaprase contra el s¨ªndrome de Hunter (660.000 d¨®lares anuales), la Brineura para la lipofuscinosis neuronal (700.000), el Carbaglu para bajar el amoniaco en sangre (700.000) y de ah¨ª para arriba. El avance de la medicina actual se basa casi por entero en unos tratamientos cada vez m¨¢s avanzados, m¨¢s eficaces y m¨¢s caros. Incluso el Ozempic, la droga adelgazante de Hollywood ¡ªque tambi¨¦n reduce la diabetes y el riesgo cardiaco¡ª tiene un coste prohibitivo fuera de Beverly Hills.
La farmacolog¨ªa progresa a un ritmo exponencial en el siglo XXI, pero los gestores sanitarios, las aseguradoras y los pol¨ªticos siguen felizmente instalados en el XIX, cuando todo se arreglaba a base de aspirina, serrucho y opio, por ese orden. La gente de la pasta no est¨¢ a la altura de sus cient¨ªficos. Ni de sus pacientes.
Una de las terapias avanzadas que est¨¢n resultando m¨¢s ¨²tiles contra algunas leucemias y otros c¨¢nceres de la sangre se llama CAR-T (extender las siglas no ayuda a entender el concepto). Consiste en extraer linfocitos (gl¨®bulos blancos) del paciente, modificar sus genes para que ataquen al c¨¢ncer en cuesti¨®n, cultivarlos en masa y reintroducirlos en el cuerpo. No funciona en todos los enfermos, pero, cuando lo hace, sus resultados salvan vidas y hacen que merezcan la pena vivirse. El tratamiento se usa una sola vez ¡ªsi funciona, cura el problema de ra¨ªz¡ª y cuesta 300.000 euros.
Los grandes hospitales p¨²blicos espa?oles est¨¢n autorizados para extraer los linfocitos y reintroducirlos, pero la modificaci¨®n gen¨¦tica es propiedad de Novartis, una farmac¨¦utica suiza. En Espa?a se financia para dos c¨¢nceres raros que afectan a 300 personas al a?o, es decir, 90 millones de euros. Pero es probable que CAR-T, o una t¨¦cnica derivada, vaya aplic¨¢ndose a m¨¢s tipos de tumores, y no necesariamente tan raros. Hay datos prometedores para el tratamiento del c¨¢ncer cerebral y las enfermedades autoinmunes, como la artritis y la diabetes infantil. Las cifras van a ir sumando ceros, y nadie sabe cu¨¢ntos. ?Por d¨®nde se sale de aqu¨ª?
Quiz¨¢ por Bombay. ImmunoACT, una peque?a compa?¨ªa biotecnol¨®gica india, est¨¢ produciendo una versi¨®n propia de CAR-T (llamada NexCAR19) a un precio 10 veces menor que la original de Novartis. De 300.000 euros todo el camino pendiente abajo hasta los 30.000. Esto sigue pareciendo un mont¨®n, pero basta para que los pa¨ªses pobres puedan acceder a estas terapias vitales hasta ahora restringidas al mundo rico. O a parte del mundo rico, por expresarlo con m¨¢s propiedad, porque a los pobres de Estados Unidos no les sirve de gran cosa vivir en un pa¨ªs rico en casos como este. Los ensayos preliminares en Bombay muestran que la leucemia ha desaparecido en 19 de 33 pacientes, y se ha reducido en otros cuatro. El perfil de seguridad de NexCAR19 es incluso m¨¢s alto que el tratamiento de Novartis.
No hay que ser adivino para saber que la medicina va a seguir avanzando en los pr¨®ximos a?os mediante procedimientos cada vez m¨¢s eficaces y m¨¢s caros. Los economistas de la salud y los ministerios de Sanidad van a tener que hacer muchos n¨²meros. Un tratamiento eficaz puede ahorrar un mont¨®n de costes, pero no en una legislatura.
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