Freno al abuso de las aerol¨ªneas

La multa de 150 millones de euros que el Ministerio de Consumo ha impuesto a cuatro aerol¨ªneas de bajo coste (Ryanair, Vueling, EasyJet y Volotea) por el cobro indebido de servicios considerados complementarios es un parteaguas en la batalla entre asociaciones de consumidores y las aerol¨ªneas que viene de muy atr¨¢s y se mantiene en m¨²ltiples frentes. La impotencia y la confusi¨®n frente a las normas de cada compa?¨ªa a¨¦rea son motivo de especial frustraci¨®n para el usuario. No solo es la mayor sanci¨®n impuesta por las autoridades de Consumo, sino que recoge el malestar que sienten muchos usuarios cuando viajan en avi¨®n e intentan defender sus derechos.

La sanci¨®n es fruto de una investigaci¨®n que se inici¨® en el verano de 2023. El ministerio concluye que cuatro pr¨¢cticas habituales de las aerol¨ªneas son abusivas y quedan prohibidas a partir de ahora: cobrar por reservar asientos contiguos para acompa?ar a menores o personas dependientes; cobrar un suplemento por equipaje de mano; la falta de transparencia sobre el precio final del vuelo (respecto al precio que aparece en las ofertas), y no permitir el pago en met¨¢lico en el aeropuerto por estos servicios. La medida todav¨ªa puede ser recurrida por las empresas ante el ministerio y, llegado el caso, ante los tribunales.

Las aerol¨ªneas aseguran que todo seguir¨¢ igual, al menos hasta que la decisi¨®n sea firme, lo que supone que hasta entonces pueden seguir cobrando costes extras, por ejemplo, por el equipaje de mano, y que no afectar¨¢ a la actual temporada de verano. Defienden adem¨¢s que la sanci¨®n vulnera la normativa europea de libre fijaci¨®n tarifaria y advierten de una posible subida del coste de los billetes si se imponen estos cambios.

La falta de consenso en Europa sobre estos costes es uno de los problemas que afrontan los consumidores. El Parlamento Europeo pidi¨® en octubre unificar los criterios en toda la Uni¨®n Europea sobre equipaje de mano y revisar la legislaci¨®n sobre los derechos de los pasajeros a¨¦reos. La Comisi¨®n Europea trabaja en estos momentos con las aerol¨ªneas para armonizar las pr¨¢cticas comerciales en lo relativo, precisamente, al equipaje de mano y en cabina. La normativa com¨²n es muy necesaria por cuanto el tr¨¢fico a¨¦reo vive un nuevo bum en la UE tras las restricciones de movilidad por la pandemia en 2020 y 2021, y las normas sobre las dimensiones de lo que se puede o no llevar a bordo var¨ªan de una compa?¨ªa a otra y dificultan los viajes con m¨²ltiples escalas. Es, adem¨¢s, especialmente importante para un pa¨ªs como Espa?a que recibi¨® 85 millones de turistas en 2023, buena parte de los cuales llegan a trav¨¦s de los aeropuertos.

Lo cierto es que el cobro de estos servicios complementarios se ha convertido en un elemento muy importante del modelo de negocio de las compa?¨ªas a¨¦reas y m¨¢s entre las de bajo coste, que fueron las pioneras en desagregar tarifas y servicios. El peso de estos servicios en la facturaci¨®n ronda el 15% del total de ingresos del sector, pero alcanza el 45% en algunas de las empresas afectadas, y hasta el 56% en el de la h¨²ngara WizzAir, que sin embargo ha quedado fuera de las sanciones. Si las pr¨¢cticas son consideradas abusivas en cuatro aerol¨ªneas, lo l¨®gico es que la prohibici¨®n se extendiera a todo el sector, aunque cada compa?¨ªa pueda decidir qu¨¦ medidas debe tener el equipaje de mano en sus vuelos.