Fiebre, madera de balsa y pandemia en territorio achuar
Los autores, periodistas ind¨ªgenas locales, cuentan, desde lo m¨¢s profundo de la Amazonia ecuatoriana, c¨®mo la explotaci¨®n industrial de la madera de balsa en el periodo de la covid-19 se ha convertido en plaga. Las comunidades reaccionaron prohibiendo la extracci¨®n en su territorio y piden acci¨®n a las autoridades. Primera entrega de la serie ¡®Destellos del Amazonas¡¯
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La pandemia de la covid-19 fue el pretexto que encontraron las empresas extractivas para continuar explotando los territorios ind¨ªgenas con m¨¢s intensidad, mientras todo el mundo est¨¢ mirando hacia otra parte.
En la Amazon¨ªa ecuatoriana, por ejemplo, se dispar¨® la tala indiscriminada de la madera de balsa, ejerciendo una gran presi¨®n sobre la cuenca media y baja del r¨ªo Pastaza, en el territorio de la nacionalidad achuar, as¨ª como el de otras como la kichwa, shuar y waorani; una presi¨®n que pone en evidencia hasta qu¨¦ punto los impactos derivados del extractivismo en la regi¨®n amaz¨®nica est¨¢n siendo desastrosos estos d¨ªas.
Adem¨¢s, en medio de una emergencia sanitaria, las afectaciones sobre la poblaci¨®n local son a¨²n mayores. En la Amazon¨ªa del Ecuador la fiebre de la balsa, con la llegada de cientos de madereros para tala masiva de esta preciada madera amaz¨®nica, se convirti¨® en el fatal foco de contagio del coronavirus en las comunidades ind¨ªgenas amaz¨®nicas.
Ante el creciente impacto de la fiebre de la balsa en el centro de la Amazon¨ªa, provocada por la alt¨ªsima demanda internacional de esta madera, ligera y muy resistente a la vez, que se utiliza para la fabricaci¨®n de las aspas de los generadores de energ¨ªa e¨®lica en Europa y en China, junto a mis colegas Bryan Garc¨¦s y Lenin Montahuano, el equipo de comunicaci¨®n de la Confeniae Lanceros Digitales se decidi¨® a documentar esta realidad a trav¨¦s de visitas a terreno, principalmente al territorio achuar
Ingresamos por la v¨ªa Chico Copataza y ya en el trayecto fuimos viendo al menos unos cinco camiones llevando listones de la madera de la balsa, con presencia de personas que no eran ind¨ªgenas, sino de otros pa¨ªses. Atendiendo a la petici¨®n del l¨ªder achuar, empezamos a llevar un registro audiovisual de todo lo que ocurr¨ªa en el territorio. Cuando arrancamos el recorrido con nuestro equipo para documentar la situaci¨®n ya vimos camiones cargando y descargando balsa, lanchas transportando la madera, personas entrando y saliendo.
Ya en el trayecto en canoa en el r¨ªo Pastaza, observamos c¨®mo decenas de personas se concentraban en cada una de las islas que existen a lo largo de este gran r¨ªo, justamente cortando los ¨¢rboles de balsa m¨¢s grandes para sacar m¨¢s listones, para lo que contaban con campamentos de unos dos kil¨®metros cuadrados en cada isla, apostados en las m¨¢rgenes y riberas del r¨ªo. Esto era solo el inicio, la situaci¨®n iba a complicarse m¨¢s adelante.
¡°No existe autorizaci¨®n para sacar balsa de nuestro territorio, no he dado esa disposici¨®n, se?ores¡±, afirmaba Tiyua Uyunkar, presidente de la nacionalidad achuar del Ecuador, que nos acompa?aba en nuestro recorrido, mientras observaba la efervescencia de la extracci¨®n balsera. ¡°La tala debe detenerse inmediatamente porque pone en riesgo la conservaci¨®n de las orillas de nuestros r¨ªos y esto puede luego desatar inundaciones que afecten a nuestras comunidades. Mantendremos asambleas con los presidentes de las asociaciones y comunidades porque este es territorio comunitario y el pueblo debe tomar decisiones¡±, dec¨ªa Uyunkar, mostrando una preocupaci¨®n bien visible.
En este y otros recorridos, visitamos hasta 15 campamentos ilegales establecidos en las islas del r¨ªo Pastaza. Y esto solo en lo correspondiente al territorio achuar. Sabemos que en otras zonas, como la kichwa y waorani, de igual manera la fiebre se ha disparado y se encuentran puntos similares de explotaci¨®n a lo largo de distintas cuencas hidrogr¨¢ficas.
Pero adem¨¢s de la tala indiscriminada de esta valiosa madera, se ha podido observar en las comunidades otros fen¨®menos de degradaci¨®n derivados y propios de actividades extractivas. Prolifera la prostituci¨®n, el alcoholismo y la desintegraci¨®n social.
Combatir la fiebre de la balsa
En la comunidad de Sharamentsa, ubicada en el territorio achuar del bajo Pastaza, se ha decidido no talar los ¨¢rboles de balsa y mantener la protecci¨®n permanente de las islas y los animales que las habitan, ya que forman parte del balance ecol¨®gico de la zona. Adem¨¢s, se ha decidido llevar a cabo distintas alternativas econ¨®micas a la balsa como son la producci¨®n de alimentos, la educaci¨®n y el turismo. Sharamentsa es una comunidad ecol¨®gica modelo que ha decidido resistir.
Nantu Canelos, joven l¨ªder ind¨ªgena de Sharamentsa, nos relat¨® las actividades que, junto a varios comuneros, desarrollan como alternativa para proteger este rinc¨®n biodiverso de selva amaz¨®nica. ¡°Hoy d¨ªa hemos realizado una actividad importante para nuestra comunidad, hemos contabilizado balsa y el ¨¢rea de las islas de nuestro territorio que est¨¢n permanentemente siendo defendidas por la comunidad achuar. Cuando iniciamos las actividades de conteo, encontramos que las islas son el refugio de diferentes aves y animales. Son tambi¨¦n lugar de reproducci¨®n de la fauna. Encontramos diferentes huellas de animales como el jaguar, venados, capibaras y tambi¨¦n de aves de diferentes especies como garzas, loros y guacamayos. Con esto quiero manifestar que no estamos solamente nosotros en la lucha por estos animales, sino que esta biodiversidad es la que act¨²a dentro de la selva cumpliendo la funci¨®n de siembra, dispersi¨®n de semillas y de esta manera reproducen la vida¡±.
En los d¨ªas que estuvimos all¨¢, el presidente de la comunidad convoc¨® a una asamblea para tomar decisiones ante la crisis de la fiebre de la balsa. Primero, en la madrugada, se congregaron para la tradicional toma de guayusa Wais umamu, bebida tradicional energizante para mantener fuerte el esp¨ªritu durante la jornada de trabajo. Horas m¨¢s tarde, se concentraron en la casa comunal de Sharamentsa delegados de las diferentes comunidades aleda?as. Para dar inicio al evento con el saludo ancestral, extendieron sus lanzas unos frente a otros, sentados en bancas de madera con formas de animales, al tiempo que se saludaron con frases vigorosas en su lengua nativa.
El ecosistema en el bajo Pastaza es tan inmensamente rico como fr¨¢gil, y la agresi¨®n que est¨¢ suponiendo la fiebre de la balsa puede acabar con el equilibrio que conserva desde hace miles de a?os
La asamblea plante¨® un intenso debate sobre la necesidad de conservar el bosque del que han dependido hist¨®ricamente las familias de las comunidades como fuente de vida y subsistencia, por lo que entienden que una explotaci¨®n indiscriminada que atente contra el bosque pone en peligro la supervivencia de las actuales y futuras generaciones.
Tras deliberar muy seriamente, las comunidades resolvieron suspender la extracci¨®n balsera en su territorio comunitario, para lo cual sus voceros dieron a conocer las resoluciones a trav¨¦s de comunicados escritos y firmados por las autoridades. Tambi¨¦n se difundieron a trav¨¦s de las plataformas audiovisuales de nuestro equipo comunicacional, que fue invitado para documentar este y posteriores eventos para as¨ª visibilizarlo ante la opini¨®n p¨²blica nacional e internacional.
¡°Se declara la prohibici¨®n de la extracci¨®n de la balsa en todo el territorio de la nacionalidad achuar del Ecuador para precautelar el futuro de nuestras generaciones. La selva es nuestra fuente de vida y es nuestro deber protegerla no dando paso a una tala excesiva y al extractivismo que solo ha dejado problemas y amenazas en la Amazon¨ªa¡±, sentenci¨® el m¨¢ximo represente achuar.
El ecosistema en el bajo Pastaza es tan inmensamente rico como fr¨¢gil, y la agresi¨®n que est¨¢ suponiendo la fiebre de la balsa puede acabar con el equilibrio que conserva desde hace miles de a?os. La prohibici¨®n de la extracci¨®n es un paso decisivo en la conservaci¨®n del territorio y es fundamental que las autoridades respeten la soberan¨ªa ind¨ªgena y colaboren con todos los medios a su alcance en detener esta fiebre que puede ser a¨²n m¨¢s letal que la propia pandemia.
Andr¨¦s Tapia, Bryan Garc¨¦s y Lenin Montahuano forman parte del equipo de comunicaci¨®n de la Confeniae ¨C Lanceros Digitales.
Esta historia es parte de la serie ¡®Destellos del Amazonas¡¯, producida en la Amazon¨ªa por democraciaAbierta. En Ecuador particip¨® el equipo de CONFENIAE junto a periodistas ind¨ªgenas de Lanceros Digitales. La serie est¨¢ apoyada por el Rainforest Jounalism Fund del Pulitzer Center. Agradecemos los testimonios y material gr¨¢fico aportados por miembros de las comunidades retratadas en esta historia, quienes permanecen aislados por causa de la covid-19.
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