Human Rights Watch: el oleoducto entre Uganda y Tanzania ser¨¢ ¡°un desastre¡± para el planeta y ¡°no debe construirse¡±
La ONG publica un informe en el que pide que este megaproyecto petrol¨ªfero se suspenda, debido al perjuicio financiero que sufrir¨¢n miles de familias y a los da?os medioambientales que causar¨¢ si entra en funcionamiento
El Oleoducto de Petr¨®leo Crudo del Este de ?frica (EACOP, por sus siglas en ingl¨¦s), un inmenso proyecto que aspira a transportar crudo desde Uganda hasta las costas de Tanzania, ha devastado, en la fase inicial de su construcci¨®n, los medios de subsistencia de miles de familias y, si se termina, m¨¢s de 100.000 personas perder¨¢n permanentemente sus tierras y la crisis clim¨¢tica mundial se ver¨¢ exacerbada, denuncia la ONG Human Rights Watch (HRW) en un informe publicado este lunes.
¡°EACOP ser¨¢ un desastre continuo para el planeta y, por lo tanto, no debe construirse¡±, afirma HRW, bas¨¢ndose en los testimonios de m¨¢s de 90 familias entrevistadas para esta investigaci¨®n titulada Nuestra confianza est¨¢ rota. P¨¦rdida de tierra y medios de subsistencia en pro del desarrollo petrolero en Uganda.
Este conducto de 1.443 kil¨®metros, desde los yacimientos petrol¨ªferos de Tilenga y Kingfisher, en Uganda occidental, hasta el puerto de Tanga, en Tanzania, ser¨¢ el oleoducto calentado m¨¢s largo del mundo, con una tecnolog¨ªa para transportar el crudo por encima de 50 grados en todo su recorrido. Por ¨¦l circular¨¢n al d¨ªa el equivalente de 246.000 barriles de petr¨®leo. El proyecto, poco conocido pese a ser una de las infraestructuras de combustibles f¨®siles m¨¢s importantes que se desarrollan actualmente en el mundo, est¨¢ liderado por la petrolera francesa TotalEnergies (62% de las acciones), a trav¨¦s de dos de sus filiales en ?frica oriental (TotalEnergies EP Uganda y TotalEnergies East Africa Midstream), junto a la china CNOOC (8%), y las petroleras de los dos pa¨ªses africanos. En este momento, y seg¨²n informaciones de las compa?¨ªas, ya se han perforado los primeros pozos en los dos yacimientos petrol¨ªferos y el desarrollo de la infraestructura est¨¢ en marcha.
¡°EACOP ha sido un desastre para las decenas de miles de personas que han perdido las tierras que proporcionaban alimentos a sus familias e ingresos para enviar a sus hijos a la escuela, y que recibieron una indemnizaci¨®n demasiado peque?a de parte de TotalEnergies¡±, denuncia en el informe Felix Horne, investigador principal sobre medioambiente de HRW.
Horne se refiere a las denuncias formuladas por los entrevistados, que resaltaron que el monto de las indemnizaciones fue insuficiente y no correspond¨ªa a lo prometido por TotalEnergies y que el pago tard¨® entre tres y cinco a?os en realizarse. Tambi¨¦n describieron presiones por parte de las empresas para aceptar cantidades que no les permiten comprar tierras de reemplazo de id¨¦ntica calidad. Muchos aseguraron adem¨¢s que firmaron documentos en ingl¨¦s que no entendieron y quienes se negaron a firmar se siguen enfrentando ¡°a amenazas de acciones judiciales y al acoso del gobierno local¡±.
La ONG estima que estos ¡°retrasos, falta de comunicaci¨®n y compensaciones inadecuadas¡±, han dejado a muchas familias ¡°m¨¢s pobres e inseguras con respecto a su futuro¡±. Por ejemplo, hay personas que eran autosuficientes antes de que comenzara el proyecto petrolero y utilizaban los ingresos del caf¨¦, pl¨¢tanos y otros cultivos para pagar sus gastos y ahora deben comprar alimentos que antes produc¨ªan, lo que les exige vender bienes, incluido el ganado, o pedir pr¨¦stamos para seguir pagando la escuela de sus hijos, cita HRW.
En una carta a la ONG, TotalEnergies se ha defendido de estas acusaciones y ha garantizado que ya se ha indemnizado al 93% de los hogares afectados por el proyecto de adquisici¨®n de tierras y que los montos cumpl¨ªan la norma del ¡°valor de sustituci¨®n total¡±. Seg¨²n la compa?¨ªa, si ha habido tardanza en los pagos, se ha debido a retrasos en ¡°la finalizaci¨®n de los diversos documentos legales y jur¨ªdicos necesarios para la adquisici¨®n de tierras¡± y a las limitaciones impuestas por la pandemia de coronavirus.
¡°Pongamos que alguien quiere una de tus vacas. Se acuerda un precio, pero no te pagan durante cinco a?os. Durante ese tiempo t¨² tienes que cuidar de la vaca, pero no puedes usar la leche que da. No tiene sentido¡±, compar¨® Cattle Rancher, de 50 a?os, a los investigadores de HRW, refiri¨¦ndose a los retrasos en los pagos.
TotalEnergies ha recalcado que se ¡°sigue prestando gran atenci¨®n al respeto de los derechos de las comunidades afectadas¡± y ha reafirmado su compromiso con las normas internacionales sobre adquisici¨®n de tierras. Paralelamente, Atacama Consulting, la consultora medioambiental que facilita la adquisici¨®n de tierras para TotalEnergies EP Uganda en los yacimientos de Tilenga, rechaz¨® las acusaciones de que se presionara a la gente para que firme y consider¨® que las indemnizaciones fueron las que estipulan las reglas internacionales.
¡°Existe una brecha significativa entre los compromisos de TotalEnergies de pagar indemnizaciones adecuadas y la realidad sobre el terreno¡±, responde HRW en su informe, en el que insta a la empresa francesa y a todas las implicadas en la financiaci¨®n, construcci¨®n y explotaci¨®n del proyecto a garantizar que los medios de subsistencia de los hogares afectados se restablezcan hasta alcanzar los niveles anteriores al inicio del proyecto.
Amenaza para la biodiversidad
Seg¨²n HRW y otras ONG, este proyecto en Uganda y Tanzania tambi¨¦n plantea problemas medioambientales m¨¢s amplios, ya que el oleoducto atraviesa ecosistemas sensibles, incluidas ¨¢reas protegidas y humedales de importancia internacional, lo que representa una amenaza para la biodiversidad de la que dependen las comunidades locales para su sustento.
¡°EACOP es tambi¨¦n un desastre para el planeta y no deber¨ªa finalizarse¡±, zanja Horne. Adem¨¢s, el proyecto contribuir¨¢ a las emisiones de gases de efecto invernadero debido a la quema de combustibles f¨®siles. El Climate Accountability Institute calcula que las emisiones de di¨®xido de carbono (CO2) de este oleoducto en 25 a?os de uso llegar¨¢n a 379 millones de toneladas, una cifra equivalente a las emisiones de Australia en 2020.
Mientras el EACOP se sigue construyendo, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Clim¨¢tico (IPCC, por sus siglas en ingl¨¦s), la principal autoridad mundial en la materia, advierte de que no se pueden construir nuevos proyectos de combustibles f¨®siles si el mundo quiere alcanzar los objetivos del Acuerdo de Par¨ªs y limitar los peores impactos del cambio clim¨¢tico. Grupos de la sociedad civil de Uganda y Tanzania, una resoluci¨®n del Parlamento Europeo de 2022 y varias declaraciones de relatores especiales de la ONU se han mostrado a favor de la suspensi¨®n del proyecto, recuerda HRW.
TotalEnergies inform¨® en marzo de 2023 de que a¨²n necesitaba conseguir 3.000 millones de d¨®lares (2.746 millones de euros), el equivalente al 60% de la inversi¨®n total, para que el oleoducto siguiera adelante. HRW calcula que, hasta el momento, ¡°al menos 24 instituciones financieras y 23 compa?¨ªas de seguros han manifestado p¨²blicamente que no est¨¢n dispuestas a apoyar el proyecto debido a sus riesgos clim¨¢ticos, medioambientales y humanitarios¡±. ¡°Las instituciones financieras que est¨¦n considerando financiar EACOP deber¨ªan mantenerse al margen de este proyecto y, en su lugar, ayudar a Uganda a aprovechar su importante potencial de energ¨ªa limpia¡±, pide Horne.
Porque, aunque este pa¨ªs africano tiene importantes necesidades energ¨¦ticas, dispone de otras opciones m¨¢s ¡°limpias¡± para alcanzar sus objetivos, sin necesidad de empobrecer a¨²n m¨¢s a quienes se encuentran en el camino del gasoducto ni de contribuir a agravar el cambio clim¨¢tico, concluye HRW.
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