Los pescadores de pl¨¢stico del Nilo

El Cairo amanece con los primeros rayos de sol filtr¨¢ndose a trav¨¦s de la calima ma?anera del r¨ªo Nilo. En este vasto cuerpo de agua, en la que varias islas de distintos tama?os emergen ¡ªalgunas urbanizadas, otras no tanto¡ª, varios pescadores inician su jornada.

Arafa Saber rema en silencio, junto a su hermano Mohamed, por unas aguas tranquilas que absorben el ruido de la ca¨®tica ciudad de m¨¢s de 20 millones de habitantes que va despertando. Con cuidado, va lanzando su red y recogiendo su captura. ¡°Mi padre era pescador y, cuando falleci¨®, tuve que cuidar de mi madre, as¨ª que empec¨¦ a trabajar de lo mismo¡±, comenta. Pero, a diferencia de su padre, este hombre de 37 a?os, que lleva m¨¢s de 25 dedic¨¢ndose a la pesca, no s¨®lo busca sacar del agua peces, sino tambi¨¦n, y cada vez m¨¢s, pl¨¢stico.

Saber vive en la isla de Qursaya, una peque?a extensi¨®n de tierra de dos kil¨®metros donde habitan unas 5.000 personas y que, como la vecina isla de Dahab o la de Warraq, algo m¨¢s al norte, flota en las aguas del Nilo como si el tiempo en ellas transcurriera de forma m¨¢s lenta, ajenas a una megal¨®polis que no descansa. Muchos de sus vecinos son originarios de zonas rurales del sur de Egipto y se han dedicado a la pesca o al cuidado de ganado durante generaciones. En los ¨²ltimos a?os, sin embargo, la presencia de peces en el r¨ªo ha ido menguando debido a su poluci¨®n, por lo que la recolecci¨®n de pl¨¢stico se ha convertido en una estampa cada vez m¨¢s frecuente entre los pescadores de estos singulares lugares. ¡°Ahora me centro m¨¢s en recoger pl¨¢stico que peces debido a los ingresos, pero tambi¨¦n por limpieza¡±, espeta Saber.

Un estudio de 2019 del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) concluy¨® que Egipto es responsable de m¨¢s de un 40% de los residuos pl¨¢sticos vertidos en el Mediterr¨¢neo, parte de los cuales proceden directamente del Nilo. En total, la investigaci¨®n se?al¨® que el pa¨ªs vierte al a?o alrededor de 1,3 millones de toneladas de pl¨¢sticos sin tratar.

Egipto es responsable de m¨¢s de un 40% de los residuos pl¨¢sticos vertidos en el Mediterr¨¢neo, seg¨²n un estudio de 2019 del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF)

Los peces que viven en el Nilo son testigos directos de este problema. Aunque no se han realizado estudios exhaustivos al respecto, una investigaci¨®n a peque?a escala realizada en 2020 diseccion¨® y examin¨® los tractos gastrointestinales de una muestra de dos especies diferentes de pez del Nilo comprados a vendedores de El Cairo, y hall¨® que m¨¢s del 75% de ellos conten¨ªan micropl¨¢sticos, uno de los niveles m¨¢s elevados del mundo.

En un intento de combatir esta invasi¨®n, un grupo de egipcios empez¨® a organizar encuentros semanales en El Cairo para limpiar las aguas del Nilo. Pero, en vista de la magnitud del desaf¨ªo, en 2018 decidieron impulsar la iniciativa VeryNile comprando el pl¨¢stico que las comunidades de pescadores de las islas de la capital recojan directamente del r¨ªo. ¡°Cuando el proyecto del pl¨¢stico naci¨®, trabajaba como pescador, as¨ª que decid¨ª probarlo para aumentar mis ingresos y tambi¨¦n para limpiar el r¨ªo¡±, explica Saber. ¡°Antes de la iniciativa, el Nilo era un escenario muy sucio¡±, evoca el pescador, que nota que ¡°ahora hay una gran diferencia, no del 100%, sino del 1.000%: hay m¨¢s peces, el Nilo est¨¢ m¨¢s limpio, el olor, todo¡±.

Uno de los primeros en sumarse al proyecto fue Arafa Gaber, un pescador de 50 a?os nacido y crecido en la isla de Warraq, en el norte de El Cairo, que comenz¨® a atrapar peces en el Nilo durante su primer a?o en la escuela primaria de la mano de su padre, l¨ªder entre los pescadores de su zona. Gaber nota que la contaminaci¨®n del r¨ªo comenz¨® a ser un problema hace ya 25 o 30 a?os, y asegura que la falta de ingresos y de perspectivas de futuro para su profesi¨®n le convencieron de unirse a la empresa de pescar pl¨¢stico.

Una investigaci¨®n examin¨® dos especies de pez del Nilo comprados a vendedores de El Cairo y hall¨® que m¨¢s del 75% de ellos conten¨ªan micropl¨¢sticos, uno de los niveles m¨¢s elevados del mundo

¡°Tenemos hijos y queremos que se eduquen, por eso entramos. Lo que me gusta m¨¢s es mejorar el Nilo, porque al principio la gente se beneficiaba [de ¨¦l] como pescadores, pero cuando empez¨® a estar muy contaminado, afect¨® al medio ambiente y afect¨® a los peces, ya que los productos de pl¨¢stico no son f¨¢ciles [de desintegrar]¡±, explica Gaber, que se encarga de recolectar el pl¨¢stico recogido por un grupo de pescadores de la isla de Warraq para llevarlo a Qursaya, donde se encuentran las instalaciones de VeryNile. Una vez all¨ª, los residuos se separan, se retiran los tapones de las botellas y se compactan, apunta Hana Tohamy, responsable de sensibilizaci¨®n de la iniciativa. Luego, la mezcla de pl¨¢stico de menor calidad se env¨ªa gratis a una empresa en Asiut, una ciudad a casi 400 kil¨®metros de El Cairo, donde se convierte en un combustible alternativo, mientras que el de mayor calidad se vende a una f¨¢brica en la propia capital que lo reutiliza. Actualmente, el proyecto cuenta con m¨¢s de 100 pescadores de distintos puntos de Egipto que se dedican a recoger pl¨¢sticos del Nilo a diario, y recolecta entre 20 y 30 toneladas al mes, afirma Tohamy.

Para ofrecer m¨¢s oportunidades a los habitantes de Qursaya, una parte del pl¨¢stico que se pesca del Nilo se utiliza, una vez procesado, en un taller que da empleo a tiempo completo a m¨¢s de 20 personas, la mayor¨ªa de ellas mujeres. All¨ª, el pl¨¢stico reciclado cobra nueva vida para producir productos como bolsas, fundas de ordenador y otros accesorios.

¡°Antes de la iniciativa, el Nilo era un escenario muy sucio¡±, evoca el pescador, que nota que ¡°ahora hay una gran diferencia, no del 100%, sino del 1.000%: hay m¨¢s peces, el Nilo est¨¢ m¨¢s limpio, el olor, todo¡±

Arafa Saber, pescador

Umm Kamel, una vecina de Qursaya de 48 a?os cuyo marido es pescador, es una de las cuatro mujeres que empez¨® a trabajar en estas instalaciones cuando se pusieron en marcha hace m¨¢s de tres a?os, en un momento en el que la situaci¨®n de su familia empezaba a ser cr¨ªtica. ¡°Las mujeres de Qursaya no [suelen] trabajar y sus maridos son pescadores, as¨ª que no hay ingresos suficientes¡±, desliza Umm Kamel, que ejerce sobre todo de costurera. ¡°El trabajo aqu¨ª abri¨® nuestros hogares, la educaci¨®n de nuestros hijos, y [nos] arregl¨® la vida, ya que [viv¨ªamos] bajo mucha presi¨®n. Gracias a Dios, ahora todos mejoramos¡±, reflexiona.

¡°Desde que abri¨® la empresa nos ha beneficiado a nosotras y a mucha gente¡±, coincide Umm Donia, otra vecina de Qursaya que empez¨® a trabajar en el taller debido a los pocos ingresos que lograba su marido. ¡°Espero que siga creciendo porque a¨²n hay mucha gente necesitada en la isla (...) La mayor¨ªa de nuestros hombres son pescadores¡­ Un d¨ªa [mi marido] me tra¨ªa cuatro kilos [de pescado], otro d¨ªa un kilo, otro iba a pescar y no hab¨ªa nada¡±, recuerda la mujer, madre de cuatro hijos en edad escolar.

Conscientes de que los pescadores de El Cairo solos no pueden afrontar el tit¨¢nico desaf¨ªo de limpiar de pl¨¢sticos el extenso Nilo, VeryNile espera poder replicar la iniciativa que lanz¨® en la capital egipcia en otras ciudades del pa¨ªs, cuya poblaci¨®n se concentra de forma casi exclusiva a lo largo de la fina l¨ªnea de vida que forma el r¨ªo hasta alcanzar el Mediterr¨¢neo. ¡°Intentamos que todos los modelos sean sostenibles, y queremos que el impacto contin¨²e. Por eso nos estamos expandiendo a otras ciudades. Empezamos en Asiut y ahora buscamos pescadores en Menia [una ciudad 250 kil¨®metros al sur de El Cairo]¡±, avanza Tohamy.

De vuelta a la orilla del Nilo, Saber comenta que, m¨¢s all¨¢ de los ingresos, la iniciativa tambi¨¦n se ha convertido en un motivo de satisfacci¨®n personal. ¡°Estoy feliz porque a mi hijo de seis a?os le gusta el proyecto, viene conmigo y me dice que est¨¢ orgulloso de lo que hago¡±.

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