El objetivo de vacunaci¨®n mundial del 70% contra la covid-19 est¨¢ obsoleto

La semana pasada estaba llamada a ser un hito importante en la lucha mundial contra la covid-19. En 2021, en la cumbre del G-7, el director general de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), Tedros Ghebreyesus, lanz¨® un reto al mundo: ¡°Para acabar realmente con la pandemia, nuestro objetivo debe ser vacunar al menos al 70% de la poblaci¨®n mundial para cuando os volv¨¢is a reunir en Alemania el a?o que viene¡±. Esto hizo que el final de junio fuera la fecha l¨ªmite acordada para que los pa¨ªses de todo el mundo vacunaran a tal porcentaje de su poblaci¨®n.

En aquel momento, este objetivo de vacunaci¨®n del 70% ten¨ªa sentido. Muchos pa¨ªses se enfrentaban a una segunda oleada mortal de covid y las vacunas eran la forma m¨¢s eficaz de evitar la hospitalizaci¨®n y la muerte por la variante Delta. Adicionalmente, y de forma vergonzosa en ese momento, mientras que el 43% de las personas de los pa¨ªses de ingresos altos hab¨ªan recibido al menos una dosis, eso era cierto para menos del 1% de las personas de los pa¨ªses de ingresos bajos. El objetivo aport¨® claridad, igualdad y ambici¨®n, y moviliz¨® a los l¨ªderes mundiales para que actuaran.

Ahora que se cumple este plazo y la mayor¨ªa de los pa¨ªses, incluidos casi todos los africanos, a¨²n no han alcanzado el objetivo, cabe preguntarse si ese 70% sigue siendo importante. Nosotros creemos que no, y que tal medida deber¨ªa pasar a la historia.

Ahora que se cumple este plazo y la mayor¨ªa de los pa¨ªses, incluidos casi todos los africanos, a¨²n no han alcanzado el objetivo, cabe preguntarse si este objetivo del 70% sigue siendo importante

En primer lugar, el virus ha cambiado. Las variantes actuales, como ?micron, son m¨¢s contagiosas, pero han resultado menos mortales que las cepas anteriores. Adicionalmente, las vacunas existentes son menos eficaces para prevenir la transmisi¨®n de estas nuevas cepas. Esto significa que es poco probable que se consiga la inmunidad de reba?o mediante la vacunaci¨®n.

Y no sabemos qu¨¦ nos deparar¨¢ el futuro, ni si las vacunas actuales seguir¨¢n siendo eficaces. Para que quede claro, la vacunaci¨®n sigue siendo muy ¨²til para reducir las enfermedades graves y las muertes. Pero un simple objetivo global del 70% ha perdido su prop¨®sito epidemiol¨®gico para enfrentar la pandemia y limitar la transmisi¨®n en la era ?micron.

En segundo lugar, alcanzar un objetivo universal del 70% no ofrece actualmente la mejor relaci¨®n coste-beneficio para reducir las muertes y mejorar la salud en pa¨ªses con restricciones presupuestarias. Cada d¨®lar, rupia o peso que se gasta en este objetivo ya obsoleto es uno que deja de aportarse a abordar otros retos sanitarios urgentes.

Incluso dentro de la vacunaci¨®n contra la covid, el dinero se gastar¨ªa mejor dando prioridad a personas como los trabajadores de la salud y los que tienen un alto riesgo de resultados graves, en lugar de intentar vacunar a poblaciones enteras que ya tienen altos niveles de inmunidad natural debido a una infecci¨®n previa.

Por ¨²ltimo, los pa¨ªses ricos no han dado los pasos suficientes para ayudar a los pa¨ªses de bajos ingresos a sufragar los costes de las vacunas. Todav¨ªa hay una brecha de 3.500 millones de euros, entre lo que COVAX ¡ªuna colaboraci¨®n mundial destinada a reducir las disparidades en materia de vacunas¡ª necesita para ayudar a los pa¨ªses de bajos ingresos a cumplir el objetivo de cobertura poblacional de vacunas, ya obsoleta, y lo que ha recibido hasta ahora.

En este momento de la trayectoria del virus, ese dinero podr¨ªa invertirse mejor en otras prioridades, como el diagn¨®stico de la covid y el tratamiento para poblaciones de alto riesgo, el fortalecimiento de los sistemas de salud para detectar y responder a nuevas variantes, o la prestaci¨®n de servicios sanitarios esenciales que se han visto interrumpidos durante la pandemia.

El futuro de la pandemia sigue siendo incierto, y a medida que el virus muta, nuestra estrategia de contenci¨®n tambi¨¦n debe cambiar. Es hora de replantear nuestra estrategia global para contener la covid-19 y abandonar el objetivo de vacunaci¨®n del 70%. En su lugar, los pa¨ªses deber¨ªan seguir planes de vacunaci¨®n espec¨ªficos, incluyendo refuerzos, para las personas de los grupos prioritarios que m¨¢s lo necesitan. La OMS deber¨ªa apoyar a los pa¨ªses a que establezcan sus propios objetivos si as¨ª lo desean. Y si se necesita un objetivo mundial para galvanizar a los responsables de la toma de decisiones, este deber¨ªa ser el de vacunar y administrar dosis de refuerzo al 100% de los trabajadores sanitarios y personas vulnerables lo antes posible.

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