El PP inicia el a?o con errores no forzados
El aborto, la operaci¨®n anti-ETA y la guerra el¨¦ctrica oscurecen la bajada de la prima
Desde hace dos a?os, Mariano Rajoy, en cualquier foro, incluidas las reuniones internas de la c¨²pula, solo quiere hablar de un tema: la econom¨ªa. Cuando Espa?a estaba al borde del rescate, o ahora con la prima de riesgo a niveles de 2010 y bajando, el presidente est¨¢ convencido de que lo ¨²nico que le har¨¢ ganar o perder las elecciones ser¨¢ la situaci¨®n econ¨®mica. Y sin embargo, su Gobierno, y por tanto ¨¦l mismo, m¨¢ximo responsable de todos los movimientos del Ejecutivo con su empe?o de no cambiar a nadie, ha logrado con errores no forzados que esos datos econ¨®micos mejores queden en un segundo plano en las primeras p¨¢ginas de los diarios y en el debate p¨²blico. Es la pol¨ªtica, y sobre todo los errores pol¨ªticos, los que dominan un arranque de a?o m¨¢s complicado para el PP de lo que se esperaba.
El principal de todos ellos es el aborto. Incluso dirigentes muy conservadores, que est¨¢n a favor de la redacci¨®n que ha presentado Alberto Ruiz-Gallard¨®n y que apoy¨® expresamente Rajoy en el Comit¨¦ Ejecutivo del pasado mi¨¦rcoles, creen que se ha cometido un tremendo error de oportunidad. Sencillamente, no era el momento para la ley, analizan. La norma se ha retrasado casi un a?o, y al final llega en un momento en el que Rajoy quer¨ªa colocar todo el foco en la prima de riesgo y algunos datos de recuperaci¨®n econ¨®mica. Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, que es quien controla los tiempos del Gobierno, coloc¨® el aborto un 20 de diciembre, en un Consejo de Ministros en el que no estaba Rajoy ¡ªde viaje en Bruselas¡ª y a las puertas de Navidad. Pensaron que as¨ª la pol¨¦mica quedar¨ªa disimulada. El fracaso ha sido total, la pol¨¦mica sigue en el arranque de a?o, domin¨® la reuni¨®n interna del mi¨¦rcoles, y pese al intento de Rajoy por cerrar la crisis ese d¨ªa ¡ª¡°Os pido a todos que no se hable m¨¢s de este asunto en p¨²blico¡±, lleg¨® a decir¡ª la prensa sigue preguntando a los dirigentes, y los barones, incluso el m¨¢s importante, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, siguen mostrando dudas.
Pero las aguas del PP no est¨¢n revueltas solo por eso. La presi¨®n del sector m¨¢s conservador y de la Asociaci¨®n de V¨ªctimas del Terrorismo es muy fuerte y, en ese contexto, Interior dise?¨® una operaci¨®n contra el aparato de apoyo a los presos de ETA que deb¨ªa haber calmado ese mundo. Pero fue un fiasco pol¨ªtico, porque se anunci¨® por Twitter antes de tiempo y ha provocado la dimisi¨®n del jefe de Comunicaci¨®n, Albert Gimeno, lo que vuelve a poner en primer plano la crisis de un ministerio que ya ha vivido varias (hace un a?o cay¨® el secretario de Estado Ignacio Ulloa). Pero Rajoy no parece dispuesto a cambios.
El PP se prepara ahora para meses de tensi¨®n interna con los movimientos del entorno de ETA. Cada paso, interpretado mayoritariamente en el Pa¨ªs Vasco como un movimiento hacia el fin de la violencia, es visto por la AVT y sectores del PP como una humillaci¨®n. Y el Gobierno tiene muy poco margen para moverse.
Por si fuera poco, la enorme tensi¨®n con las el¨¦ctricas que ha generado la supresi¨®n de la subasta se ha resuelto aparentemente con un golpe de mano, pero el problema sigue abierto y es un quebradero de cabeza para Rajoy y su ministro, Jos¨¦ Manuel Soria, que ha quedado tocado tras su enfrentamiento con el responsable de Hacienda, Crist¨®bal Montoro.
La mejora de la econom¨ªa coincide, pues, con una mala situaci¨®n pol¨ªtica para Rajoy, que tiene a su Gobierno cada vez m¨¢s quemado y una creciente tensi¨®n interna, con unos barones y alcaldes nerviosos y deseosos de alejar su imagen de la del Ejecutivo. ¡°Todos tratan de buscar perfil propio, y eso da una imagen muy mala, el Comit¨¦ Ejecutivo fue lamentable¡±, resume un dirigente.
Pese a todo, la c¨²pula del PP, reunida dos d¨ªas en Toledo, est¨¢ convencida de que los mejores datos econ¨®micos dominar¨¢n la agenda, y Pedro Arriola, el gur¨² de las encuestas, les dice que es casi seguro que, pese a la ca¨ªda de los grandes partidos, ganar¨¢n las europeas al PSOE. Eso, cree Rajoy, bastar¨¢ para calmar las aguas internas bastante tiempo.
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