El preso Matas no pierde al ajedrez
El expresidente balear pasa en enfermer¨ªa por problemas de o¨ªdo sus primeros d¨ªas en prisi¨®n Tambi¨¦n permanece invicto en las partidas de parch¨ªs
"Jaume Matas en la c¨¢rcel como cualquier otro preso no es nadie. El sistema penitenciario est¨¢ dise?ado para anular a la persona¡±. La sentencia es de un abogado del entorno del exministro de Medio Ambiente y expresidente de Baleares con el Partido Popular en la ¨¦poca de las vacas gordas. Hace una semana que el expol¨ªtico cumple una pena de nueve meses por corrupci¨®n en el 'caso Palma Arena'. El Gobierno le deneg¨® el indulto. Es el primer ministro de la derecha encarcelado en democracia.
El lunes, provisto solo de dos bolsas con ropa y atuendo informal, entr¨® por su propio pie al centro sin mirar atr¨¢s. No abraz¨® a su hijo Coque que le dej¨® en la puerta. Dentro, le tomaron las huellas y le fotografiaron de perfil mientras le med¨ªan para componer su ficha carcelaria. Inicialmente, accedi¨® al m¨®dulo de los reci¨¦n llegados pero horas despu¨¦s pas¨® al de enfermer¨ªa y all¨ª sigue. Tiene dificultades de o¨ªdo por una dolencia cr¨®nica, de a?os, de la que fue operado hace un mes. ¡°Casi no oye, apenas se comunica y tiene alg¨²n problema de equilibrio¡±, se?ala un amigo. El president todopoderoso que fue no habitar¨¢ este a?o el palacete de Palma (en el origen de todas las sospechas) ni se ba?ar¨¢ en aguas de la isla de Cabrera por las que naveg¨® con Mariano Rajoy cuando era un modelo para su partido y el actual presidente del Gobierno.
Una era pol¨ªtica entre rejas
Una era pol¨ªtica en Baleares ha acabado entre rejas. Cinco excargos p¨²blicos siguen presos. Hay dos periodistas de Mallorca corruptos encarcelados y en septiembre entrar¨¢ otro, el excolumnista de El Mundo Antonio Alemany, escritor de discursos de Matas, condenado a dos a?os y tres meses, en el mismo juicio que el expresidente. La ¨¦poca de plomo de la corrupci¨®n en las islas la evidencian los esc¨¢ndalos y las dos decenas de pol¨ªticos condenados con sentencia firme. Son de la generaci¨®n pol¨ªtica de Matas, de la que trata de borrarse toda huella oficial. Su retrato ya no cuelga de la galer¨ªa de presidentes.
La figura de la c¨¢rcel mallorquina, desde julio de 2013, es Maria Ant¨°nia Munar, ex l¨ªder de UM, expresidenta del Parlamento, del Consell de Mallorca y socia clave para gobiernos de PP y PSOE, alternativamente. Munar como bisagra tuvo la llave del poder y los negocios paralelos. Aquellos tiempos le depararon dos condenas y once a?os de c¨¢rcel por los casos Maquillaje y Can Domenge. Un rosario de causas por dirimir puede agravar su calvario. ¡°Est¨¢ deshecha, hundida. Aquella mujer poderosa y exuberante tiene la mirada perdida, muerta, y ha adelgazado un mont¨®n. Habl¨¦ con ella, es otra¡±. El retrato lo traza un profesor de Derecho que visita la c¨¢rcel con sus alumnos. ¡°Impresiona¡±, apunta otro letrado que la ve ¡°l¨¢nguida, fatal de aspecto¡±.
En verano es peor porque los cursos se interrumpen. Munar va del Ingl¨¦s al Tai-chi. Cautiva de su propia imagen y millonaria como Matas, se centra en el estudio, las visitas a la capilla y en caminar. En la calle goz¨® de 20 a?os de poder y coche oficial y ten¨ªa varias sesiones semanales de peluquer¨ªa, manicura, maquillaje y masaje. En la c¨¢rcel, el tinte y la permanente los hacen otras presas, por intercambio. Ella paga con tabaco pero le molesta mucho el humo del resto de internas. Antes de ser condenada fue tratada de un c¨¢ncer.Al poco de ingresar en prisi¨®n, lider¨® una petici¨®n de presas para ampliar el horario de calefacci¨®n. Lleg¨® a cantar villancicos con reclusas gitanas y sudamericanas, ella que desde el poder coquete¨® con un discurso casi xen¨®fobo. Las siglas que la auparon son historia, agonizaron por sus esc¨¢ndalos con derivaciones carcelarias. Tiene a dos presidentes y un secretario general presos e imputada a la totalidad de su c¨²pula y cargos p¨²blicos.
Su directora de Comunicaci¨®n de entonces, ¡ªla periodista Margarita Sotomayor, penada con cinco a?os de c¨¢rcel¡ª, narr¨® al diario Ara que lo m¨¢s duro es ¡°no gozar ni un segundo de intimidad¡±. Narr¨® el ruido, los gritos, los malos olores, la falta de higiene, las peleas, las drogas. ¡°Aqu¨ª eres una mierda y te lo hacen saber¡±, concluy¨®.
El preso expol¨ªtico con mayor condena en Espa?a por hechos ligados a su gesti¨®n Jos¨¦ Juan Cardona, exconsejero con Matas y exl¨ªder del PP de Ibiza, cumpli¨® uno de sus 16 a?os de c¨¢rcel en Ibiza. Es soltero y eligi¨® penar cerca de su madre anciana. Ha perdido 25 kilos, era obeso y es diab¨¦tico. El PP solo abon¨® parte de su defensa, antes del juicio, seg¨²n sus amistades. Quema horas escribiendo art¨ªculos en Paso a paso, la revista del centro. De historia, f¨²tbol, cambio clim¨¢tico y fiestas Flower Power. Otro preso, de UM ha transformado su figura obesa, el ex consejero de Turismo, Xisco Buils, se ha dejado cerca de 30 kilos. Fue entrenador de baloncesto y hoy recupera el oficio junto a otros reclusos.
En la prisi¨®n de Segovia es un recluso m¨¢s.¡±En las prisiones no hay VIP ni consideraciones especiales¡±, advierte un directivo de centros penitenciarios. Intramuros sorprende la rapidez con que el expresidente balear se ha adaptado a su r¨¦gimen penitenciario. Ya hay apuestas entre presos para ver si alguno es capaz de ganaerle al ajedrez. Hasta el jueves permanec¨ªa invicto. En el ajedrez y en el parch¨ªs, otro de sus entretenimientos, invierte estos d¨ªas Matas parte de su ocio carcelario desde que ingres¨® en prisi¨®n para cumplir una condena de nueve meses por entregar dinero p¨²blico a un periodista amigo, entre otros delitos.
El reo carga con una carpeta plagada de casos penales por imputaciones pendientes de juzgar. Eligi¨® este centro por su tama?o mediano y por ser escasamente conflictivo. Tambi¨¦n para no toparse con otros tantos reos ex pol¨ªticos conocidos de las islas y para evitar el escarnio de ingresar en la c¨¢rcel de Palma, que ¨¦l mismo inaugur¨® en 1999 y cuya placa a¨²n sostiene su nombre. Especialmente quiso alejarse de su madre, anciana, en Palma. Opt¨® por Segovia porque su mujer y sus tres hijos viven en Madrid y le podr¨¢n visitar los s¨¢bados. Cada d¨ªa los internos pueden efectuar una llamada por tel¨¦fono.
Est¨¢ acompa?ado por uno de esos presos de apoyo que tratan de suavizar el primer contacto con el presidio. En una c¨¢rcel donde unos 300 (de sus menos de 400 internos) est¨¢n clasificados en segundo grado ¡ªno peligrosos¡ª. Mata sale a diario al polideportivo, con sus compa?eros. Trata de ser uno m¨¢s. Juega al ping pong y hace pesas durante una hora y media. Est¨¢ en forma. En la enfermer¨ªa acata con educaci¨®n las instrucciones de los funcionarios. El comportamiento es fundamental para acortar la estancia entre rejas. El pasado jueves pudo comunicar con su esposa, que se desplaza desde Madrid a visitarle.
Los reclusos no poseen m¨®viles, tabletas, ordenadores, ni dinero en efectivo. A la semana pueden gastar hasta 100 euros de una tarjeta de descuento, son los euros que cuesta en el economato la peque?a televisi¨®n para la celda. Introducir un plasma desde la calle es engorroso en los tr¨¢mites y registros.
En la prisi¨®n ha cundido cierta alerta y preocupaci¨®n porque esta semana han sido hallados cuatro pinchos carcelarios. Algo raro en una prisi¨®n como la de Segovia, con un perfil de internos poco dado al conflicto. Es una c¨¢rcel nueva, inaugurada en 2000. Por ella desfil¨® el expresidente de Nuevas Generaciones del PP de Madrid ?ngel Carromero. Su estancia fue casi fugaz, porque solo unas semana despu¨¦s de su llegada fue trasladado al centro de r¨¦gimen abierto Victoria Kent de la capital de Espa?a (que se caracteriza porque sus internos solo acuden a ¨¦l para dormir). Muy poco despu¨¦s Carromero obtuvo el tercer grado (es decir, la libertad). El tercer grado, obtenerlo lo cuanto antes, es una de las razones que han llevado a Matas a la c¨¢rcel de Segovia. Los internos son clasificados (imprescindible para obtener ese r¨¦gimen) antes que otras muchas prisiones. Su adaptaci¨®n est¨¢ siendo, seg¨²n fuentes penitenciarias, muy positiva. Si sigue as¨ª no tardar¨¢ mucho en abandonar las rejas. Pero en lo que respecta a este delito. Aun tiene por delante otros procedimientos penales, y m¨¢s graves si cabe.
En seis meses Matas aspirar¨¢ al tercer grado y, antes, a su clasificaci¨®n para obtener un r¨¦gimen aliviado, ir solo a pernoctar entre rejas. Lo intentar¨¢. Segovia es ¨¢gil en estos tr¨¢mites. Matas repasar¨¢ los 130.000 folios del 'caso Palma Arena' (con el 'caso Urdangarin) - porque ¨¦l quiere ser siempre, el director de su propia defensa. Lo atestiguan dos de los cinco abogados que ha tenido desde 2008 cuando estall¨® el asunto. Varios tienen minutas pendientes.
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