Las trampas de la ¡®polic¨ªa patri¨®tica¡¯ ponen en riesgo cinco sumarios judiciales
El Caso Pujol, el ¨¢tico de Gonz¨¢lez, el sumario del Banco Madrid-BPA, el Peque?o Nicol¨¢s y, ahora, el chivatazo del Fais¨¢n
El juez Jos¨¦ de la Mata interrogar¨¢ el pr¨®ximo mi¨¦rcoles como testigos a los comisarios Eugenio Pino y Marcelino Mart¨ªn Blas por el informe?sobre el caso Fais¨¢n elaborado por la pol¨¦mica Brigada de An¨¢lisis y Revisi¨®n de Casos (BARC). Con ello se elevan a cinco el n¨²mero de causas salpicadas por la actividad de la bautizada como polic¨ªa patri¨®tica. Antes lo fueron las investigaciones sobre la familia Pujol, las pesquisas sobre el ¨¢tico de Ignacio Gonz¨¢lez, el caso del Banco Madrid-BPA y el sumario del Peque?o Nicol¨¢s.
Las ¨²ltimas escenas judiciales de la llamada polic¨ªa patri¨®tica tienen protagonistas coincidentes: el juez Jos¨¦ de la Mata y el antiguo director adjunto de la Polic¨ªa, Eugenio Pino. El magistrado ha citado para ma?ana al antiguo alto mando y al tambi¨¦n comisario Marcelino Mart¨ªn Blas para que declaren como testigos por el informe que la Brigada de An¨¢lisis y Revisi¨®n de Casos (BARC) hizo sobre el caso Fais¨¢n cuando este ya hab¨ªa sido juzgado. Las copias de este informe no han aparecido.
Esta decisi¨®n se suma al auto que el juez dict¨® la semana pasada para que se investigue al comisario Pino y a uno de sus subordinados, el inspector jefe Bonifacio Diaz, por prevaricaci¨®n, falso testimonio y fraude procesal por su relaci¨®n con un pendrive de origen desconocido que la polic¨ªa quiso incorporar al caso Pujol.
En este sumario, el juez se ha visto obligado a eliminar toda la informaci¨®n que conten¨ªa dicho dispositivo para evitar que la causa resulte contaminada. Pese a ello, los Pujol planean utilizar este hecho para adelgazarla. Su defensa no solo pretende que los m¨¢s de 800 documentos que conten¨ªa la memoria inform¨¢tica no puedan ser utilizados ¡ªcomo ya ha dictaminado el juez¡ª, sino tambi¨¦n que si aparecen en otras fuentes de pruebas sean igualmente rechazados. Adem¨¢s, estudian esgrimirlos como un elemento m¨¢s junto a las nunca aclaradas circunstancias que rodean las declaraciones de Victoria ?lvarez, exnovia de Jordi Pujol Ferrusola, y del empresario Javier de la Rosa, en las que planea la sombra de otro comisario integrante de la polic¨ªa patri¨®tica, Jos¨¦ Manuel Villarejo, para pedir m¨¢s adelante la nulidad.
?tico de Gonz¨¢lez
A estos dos casos se suman el de las supuestas amenazas denunciadas en un juzgado de Andorra por Higini Cierco, accionista mayoritario de Banca Privada d¡¯Andorra (BPA), y que salpica al sumario que se instruye en el Juzgado de Instrucci¨®n 38 de Madrid por el presunto blanqueo de capitales en el Banco de Madrid, filial del BPA. Cierco asegur¨® que en mayo de 2014 el entonces jefe de la Unidad de Asuntos Internos, el comisario Mart¨ªn Blas, le exigi¨® los datos bancarios de los Pujol bajo la amenaza de acabar con su banco. El banquero esgrimi¨® como prueba de estas maniobras unos documentos que el comisario Villarejo ha reconocido como suyos y veraces. Fuentes de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n se?alan que, pese a todo, la causa no est¨¢ ¡°en absoluto¡± contaminada y que se siguen practicando diligencias.
Tambi¨¦n se ha visto salpicado el sumario abierto en un juzgado de Estepona por la compra de un ¨¢tico por parte del expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Gonz¨¢lez. En 2012 la investigaci¨®n ya fue torpedeada por el entonces ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, quien orden¨® cerrar la Operaci¨®n Aiko solo 46 d¨ªas despu¨¦s de iniciada. Una vez reabierta, el comisario Villarejo irrumpi¨® con una grabaci¨®n y varias ¡°notas internas¡±. La presencia como testigo de este mando policial ha sido utilizada en dos ocasiones por Gonz¨¢lez para pedir el cierre del sumario. La ¨²ltima, el 29 de marzo, con un escrito en el que recuerda la ¡°implicaci¨®n de dicho comisario en investigaciones en las que se cuestiona la legalidad de su actuaci¨®n hasta el punto de ser imputado por alguna de ellas¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.