La candidatura de Barcelona para la Agencia Europea del Medicamento esquiva el ¡®proc¨¦s¡¯

Al filo de las 17.30 hora arranc¨® con toda la pompa la presentaci¨®n de la candidatura en Bruselas. Realismo m¨¢gico en su m¨¢xima expresi¨®n: el Gobierno, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona se esforzaron por cerrar filas en favor de la capital catalana y por obviar el efecto negativo de la crisis pol¨ªtica por el desaf¨ªo independentista, que merma ostensiblemente las opciones de Barcelona, en un acto en el que evitaron las menciones al proc¨¦s.

La ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, el consejero de Salud de la Generalitat, Antoni Com¨ªn, y el teniente de alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, se vieron arropados por el sector del medicamento, eurodiputados, embajadores, representantes de las instituciones europeas y medios de comunicaci¨®n. La pregunta era inevitable: ?De veras tiene opciones Barcelona cuando la EMA se va de Londres por el Brexit y la crisis ha llevado a casi un millar de firmas a abandonar Catalu?a?

Respuesta corta: muy pocas. La larga es que Barcelona "cumple con brillantez los criterios t¨¦cnicos", como se encarg¨® de subrayar la ministra, tiene gran atractivo para los altos funcionarios europeos y es una brillante marca internacional. "La opci¨®n de Barcelona como sede de la EMA es un excelente ejemplo de c¨®mo se puede funcionar con di¨¢logo y cooperaci¨®n", dijo Com¨ªn. "Se trata de un proyecto de unidad entre las tres Administraciones que puede servir como ejemplo para superar la situaci¨®n actual en Catalu?a", secund¨® la ministra.

El proc¨¦s reduce tanto las opciones que el Gobierno reclama a la UE que base su decisi¨®n en criterios puramente t¨¦cnicos. Si esa decisi¨®n termina siendo pol¨ªtica, como suele suceder con las sedes de las grandes agencias, Espa?a tiene las de perder.