Uno de cada cinco alumnos espa?oles de nueve a?os se siente inseguro al leer

Los estudiantes espa?oles han mejorado de forma significativa sus resultados en el informe PIRLS, pasando de 513 puntos a 528 en la ¨²ltima edici¨®n, el equivalente a adelantar un trimestre. Para el Ministerio de Educaci¨®n esta mejora ¡°pone claramente de manifiesto el car¨¢cter inclusivo del sistema educativo espa?ol¡±. A pesar de la mejora, Espa?a queda a m¨¢s de un curso de distancia de los Estados en cabeza de este informe: Rusia, Singapur y Hong Kong. Le adelantan tambi¨¦n los irlandeses, finlandeses o polacos y, en menor medida, los estadounidenses e italianos. Los espa?oles est¨¢n en un nivel equivalente al de Portugal y por delante de Francia y a 100 puntos de distancia de los dos ¨²ltimos de los 50 sistemas evaluados, Egipto y Sud¨¢frica.

El alem¨¢n Dirk Hastedt, director ejecutivo de la IEA, recomienda a los pa¨ªses medir sus resultados por su propia evoluci¨®n. ¡°Fijarse en un ranking no es dar informaci¨®n¡±, se?alaba recientemente en una visita a Madrid, adem¨¢s de recomendar a los pa¨ªses participantes ¡°no enfocarse en las clasificaciones¡± y s¨ª mirar m¨¢s su propia evoluci¨®n.

Jos¨¦ Saturnino Mart¨ªnez, profesor de Sociolog¨ªa en la Universidad de La Laguna, disiente de la conclusi¨®n del ministerio: ¡°La relaci¨®n entre equidad en los resultados y las pol¨ªticas educativas no es tan directa como dice Educaci¨®n. Parte es debido al buen resultado del alumnado de bajo origen social y eso no sabemos a qu¨¦ se debe¡±. Mart¨ªnez, autor del libro La equidad y la educaci¨®n (La Catarata, 2017), considera que PIRLS es ¡°coherente con los resultados del informe Pisa¡± que pon¨ªan de manifiesto que en Espa?a ¡°los ni?os de clases populares rinden m¨¢s de lo esperado y los acomodados menos¡±.

Esta homogeneidad con par¨¢metros socioecon¨®micos conlleva que haya menos excelencia en las aulas espa?olas, explica Mart¨ªnez, porque esta se suele concentrar en los entornos m¨¢s aventajados. Apenas el 8% de los ni?os espa?oles alcanz¨® en la prueba el nivel avanzado que supone poder interpretar un texto informativo complejo, relacionarlo con otros y entender el punto de vista del autor. En Singapur fueron un 29% o en Rusia un 26%. Y, en cambio, un 17% de los escolares espa?oles se posiciona en el escal¨®n m¨¢s bajo y no es capaz de entender textos simples y comprender sus ideas expl¨ªcitas. En Singapur y Rusia no superan el 10%.

Elisa Yuste, consultora especializada en lectura, no se sorprende de que un 20% de los espa?oles de nueve a?os flaquee en lectura. ¡°Es coherente con los entornos familiares. Los ni?os han estado consumiendo muchos contenidos digitales, sobre todo v¨ªdeos, y los padres se desentienden de las lecturas en cuanto aprenden a leer. Hay que hacer un seguimiento. Si no, se van a contenidos que exijan menos esfuerzos. Solo con lo que leen en la escuela no es suficiente¡±.

Hastedt ahonda en la idea de Yuste: ¡°Cuanto m¨¢s motiven y ense?en a los ni?os sus familias antes de que est¨¦n escolarizados, mejor¡±. Los datos as¨ª lo recogen. La diferencia general entre aquellos cuyos padres se?alaron que dedicaban tiempo a menudo a intentar ense?ar a sus hijos a leer antes de que empezaran el colegio es de m¨¢s de 100 puntos. En Espa?a, donde apenas el 1% reconocieron no dedicar tiempo con sus hijos beb¨¦s, las diferencias se reducen a 23 puntos.