El fiscal pide c¨¢rcel para un m¨¦dico por el aborto sin anestesia de una prostituta
Acusa al ginec¨®logo, el due?o del burdel y un cliente, empresario de Lugo, de forzar a la joven de 18 a?os a perder el beb¨¦ que ella quer¨ªa dar a luz
"Tengo un problema muy gordo y hay que arreglarlo como sea", le dijo por tel¨¦fono a un polic¨ªa local vinculado al club Queen's de Lugo un empresario del sector de la construcci¨®n. Una trabajadora del burdel m¨¢s famoso de la ciudad le acababa de anunciar que estaba embarazada de ¨¦l, por esa exigencia supuestamente habitual del cliente de eyacular dentro de ella sin cond¨®n. La joven de 18 a?os, de nacionalidad colombiana y en ese momento sin familiares en los que apoyarse, deseaba tener ese beb¨¦. Pero el empresario, que ten¨ªa 45 y estaba casado y con hijos, habl¨® con el polic¨ªa. Este se lo dijo al gerente del burdel. Y el proxeneta acab¨® pidiendo cita para cuatro d¨ªas despu¨¦s, lunes 6 de abril de 2009 a las ocho de la tarde, en una cl¨ªnica ginecol¨®gica sin licencia del centro de la localidad. Seg¨²n relat¨® en el juzgado de Instrucci¨®n 1 de Lugo la presunta v¨ªctima de un delito de aborto ilegal bajo coacci¨®n, la interrupci¨®n del embarazo a la que fue forzada se llev¨® a cabo sin anestesia. Tambi¨¦n dijo que, como en la consulta no hab¨ªa enfermera, el ginec¨®logo le obligaba a sostener en su propia mano el instrumental mientras se retorc¨ªa de dolor. Ante la juez Pilar de Lara declar¨® que lo sent¨ªa todo como si el doctor le estuviera "arrancando la piel". Nueve a?os despu¨¦s de los hechos, el fiscal solicita la apertura de juicio oral y pide para cada uno ¡ªel m¨¦dico, el empresario y el proxeneta¡ª cuatro a?os y medio de prisi¨®n.
Se trata de uno de los truculentos cap¨ªtulos que recoge el mayor sumario contra la prostituci¨®n que se ha instruido en Espa?a, el de la Operaci¨®n Carioca (250 tomos despiezados en 52 partes, 1,2 millones de folios, 100 imputados y casi 400 testigos), y uno de los primeros que probablemente llegue a juicio. Entre las pruebas contra los acusados, est¨¢n los informes forenses y los pinchazos donde se puede escuchar al supuesto padre de la criatura, R.L.L.T., rogando sigilo a la hora de hablar del asunto por tel¨¦fono porque tiene a su mujer "mosqueada". Tambi¨¦n se oye al jefe del club Queen's de Lugo, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Ad¨¢n, cabecilla de la Operaci¨®n Carioca y ya condenado en 2014 a 21 a?os de prisi¨®n por maltratar a su esposa. "Las mujeres son unas guarras", proclama en las escuchas. Seg¨²n ¨¦l, su empleada de 18 a?os "es una hija de puta" que con el embarazo lo que consigue es "joderle un cliente".
En una de sus charlas relata la conversaci¨®n que tuvo con ella para empujarla al aborto. La muchacha le pregunt¨® que por qu¨¦ el empresario hab¨ªa recurrido a ¨¦l, y ¨¦l le responde: "Pues porque folla aqu¨ª, y tengo que preocuparme de mis clientes". Adem¨¢s, a¨²n supuestamente sabiendo que las prostitutas practican sexo sin preservativo a solicitud de los hombres, se jacta de haberla aleccionado para el futuro: "Lo m¨¢s normal es que te pongas un cond¨®n para no tener problemas".
El fiscal considera probado que, ante la negativa de la joven a abortar, R.L.L.T. contact¨® con Ad¨¢n "sabiendo que tendr¨ªa la capacidad de forzarla il¨ªcitamente", "prevali¨¦ndose de su superioridad" y "de la situaci¨®n personal de esta", sin familia en Espa?a ni "medio de subsistencia diferente a su actividad en el club". "Las presiones ejercidas" sumadas al "conocimiento que esta ten¨ªa de anteriores comportamientos violentos" de Ad¨¢n "motivaron que, temiendo que pudiera ocurrirle algo a ella o a su familia", la chica acudiera a la cita m¨¦dica.
El propio proxeneta concert¨® r¨¢pidamente la intervenci¨®n con "un ginec¨®logo amigo" y el d¨ªa fijado la mujer se present¨® en la consulta acompa?ada, seg¨²n declar¨®, por Ad¨¢n, la hija menor de edad de este y una amiga de la ni?a. Estos tres se marcharon y dejaron sola con el m¨¦dico a la joven. "Carec¨ªa de los medios sanitarios adecuados" y de "personal de auxilio o enfermer¨ªa de ning¨²n tipo", afirma ahora en su escrito la fiscal¨ªa de Lugo. No recab¨® el "consentimiento expreso de la gestante" y "puso fin al embarazo por el m¨¦todo de la aspiraci¨®n endouterina, destruyendo el producto de la concepci¨®n sin usar anest¨¦sico alguno".
"Estaba bien ilusionada con ese beb¨¦", declar¨® ante la instructora otra mujer que hab¨ªa ejercido la prostituci¨®n, cuando era menor de edad, junto a la v¨ªctima. En su declaraci¨®n tambi¨¦n explicaba que el empresario "siempre iba" al local a por la misma trabajadora y que gastaba much¨ªsimo dinero cada vez. Unos "400 euros solo en invitar a copas a las chicas" y hasta 1.000 euros en el club. La mujer que abort¨® a?ade que el hombre consum¨ªa coca¨ªna y que ella entend¨ªa que esa era la causa de que reclamase luego sexo sin preservativo. Ad¨¢n pag¨® la operaci¨®n al m¨¦dico. Seg¨²n los pinchazos, 600 euros que luego le reclamar¨ªa a este cliente que tanto le interesaba conservar.
El m¨¦dico, C.J.A.M., le coment¨® a la paciente que la intervenci¨®n durar¨ªa 15 minutos, pero a ella le parecieron "dos horas" por el dolor que padeci¨®, como si le arrancaran "la piel". Estaba desnuda de cintura para abajo y ten¨ªa las piernas amarradas a la camilla. La m¨¢quina, seg¨²n declar¨® en el juzgado, "funcionaba con agua, pero el agua fallaba y el m¨¦dico le daba golpecitos". Dijo que mientras ¨¦l daba estos golpes para ponerla en marcha, ella ten¨ªa que "agarrar la c¨¢nula y el succionador". Describi¨® que "gritaba de dolor" y que el ginec¨®logo protestaba: "Te tienes que agarrar fuerte porque para colmo eres muy nerviosa", "?joder!, eres la chica m¨¢s quejica que he tenido". Al acabar, la mujer regres¨® en taxi a su piso. Ad¨¢n telefone¨® a su cliente, que estaba jugando al golf, le inform¨® de que la chica estaba de cinco semanas y le asegur¨® que ya pod¨ªa irse "tranquilo" de viaje.
Tanto el presunto padre de la criatura, como el m¨¦dico y el proxeneta fueron arrestados cuando estall¨® la Operaci¨®n Carioca a finales de 2009 y cumplieron prisi¨®n provisional. El ministerio p¨²blico contempla ahora la circunstancia atenuante de dilaci¨®n para reclamar las penas, pero considera que los tres acusados pueden tener el mismo grado de culpabilidad. En el caso de que el tribunal no alcance a ver que era consciente de que la paciente abortaba bajo presi¨®n, pide que el m¨¦dico, que tambi¨¦n ejerc¨ªa su profesi¨®n en un ambulatorio p¨²blico del sistema gallego de salud, cumpla una condena de solo un a?o y dos meses y sea inhabilitado por dos a?os. En el marco de la Carioca, este ginec¨®logo fue investigado adem¨¢s por el aborto de otra prostituta, pero esa parte se archiv¨®.
Tras la traum¨¢tica experiencia, la mujer cay¨® en un estado de depresi¨®n, "desasosiego" e "insomnio" que fueron diagnosticados por los forenses durante la instrucci¨®n. Huy¨® a Murcia para trabajar en otro prost¨ªbulo y all¨ª acab¨® sangrando en un hospital: El ginec¨®logo de Lugo le hab¨ªa dejado dentro parte de la placenta. Ya de vuelta a Galicia, con el tiempo se puso a estudiar. Quer¨ªa acabar Secundaria y matricularse en FP.
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