Puigdemont, an¨®nimo en Hamburgo
El expresidente catal¨¢n apenas se ha dejado ver en la ciudad alemana, en la que se instal¨® hace unas semanas
Carles Puigdemont recibi¨® la noticia de que la justicia alemana ha decidido que puede ser entregado a Espa?a ¡ªpero s¨®lo por malversaci¨®n¡ª en alg¨²n lugar de Hamburgo o sus alrededores. All¨ª, en esa zona del norte de Alemania, se instal¨® hace menos de un mes, cuando supo que la batalla judicial ¡ªtras su detenci¨®n en marzo en el Estado de Schleswig Holstein despu¨¦s de cruzar la frontera desde Dinamarca¡ª pod¨ªa ir para largo. Desde Hamburgo firma los tuits con los que se mantiene activo en pol¨ªtica, y envi¨® este jueves un v¨ªdeo en el que calific¨® el delito de rebeli¨®n del que ha sido eximido por la justicia alemana como ¡°inadmisible¡±. Y desde aqu¨ª esperar¨¢ tambi¨¦n que se resuelva el recurso contra la decisi¨®n del tribunal alem¨¢n que sus abogados presentar¨¢n para evitar su entrega a Espa?a.
Hamburgo es tambi¨¦n la ciudad donde, una vez m¨¢s, se pierde la pista de Puigdemont. El expresidente catal¨¢n ha extremado las medidas de cautela y las maniobras de despiste que lleva practicando desde su huida a Bruselas el pasado oto?o y que perfeccion¨® durante su breve estancia, esta primavera, en Berl¨ªn. La capital alemana fue inicialmente su destino cuando el tribunal de Schleswig Holstein decidi¨® ponerlo en libertad condicional a comienzos de abril, tras pasar 12 d¨ªas en la prisi¨®n de Neumunster.
Berl¨ªn result¨® demasiado agitada para el ex president. Quiz¨¢ fuera el acoso medi¨¢tico: la mayor¨ªa de los corresponsales extranjeros ¡ªentre ellos los espa?oles¡ª trabajan all¨ª. O la afluencia de turistas a una de las capitales m¨¢s bulliciosas de Europa. El caso es que a mediados de junio se supo que Puigdemont hab¨ªa decidido mudarse a Hamburgo. Por una cuesti¨®n pr¨¢ctica, puesto que le resultar¨ªa m¨¢s f¨¢cil trasladarse desde all¨ª hasta el tribunal regional si fuera necesario. Y por su tranquilidad y seguridad, seg¨²n declar¨® uno de sus abogados, Jaume Alonso Cuevillas, a la televisi¨®n p¨²blica catalana. En Berl¨ªn estaba ¡°muy expuesto¡± y hab¨ªa sido ¡°increpado¡± en alguna ocasi¨®n, dijo el abogado. ¡°Hab¨ªa que tomar medidas¡±, se?al¨® sin dar detalles.
En Hamburgo ha podido llevar una vida m¨¢s tranquila. Y hasta el momento nadie parece saber d¨®nde se ha instalado. Tambi¨¦n en esto ha aprendido Puigdemont del episodio de Waterloo, la ciudad belga en la que alquil¨® un chal¨¦ que fue r¨¢pidamente asediado por la prensa, los curiosos y hasta por representantes de Tabarnia (el colectivo antiindependentista que reclama que, si alg¨²n d¨ªa Catalu?a se separa del resto de Espa?a, las provincias catalanas mayoritariamente no independentistas puedan separarse de Catalu?a).
Hasta la prensa alemana se ha preguntado en estas ¨²ltimas semanas si realmente Puigdemont estaba en Hamburgo, dado que se ha cuidado mucho de ser avistado en alg¨²n caf¨¦ o plaza. La ¨²nica vez que se dej¨® ver fue al recibir la Flama del Canig¨®, una tradici¨®n catalana asociada al solsticio de verano, el pasado 23 de junio. Una manifestaci¨®n de apoyo convocada este jueves en el centro de Hamburgo por la ANC habr¨ªa sido una buena ocasi¨®n para volver a verlo, pero finalmente no se present¨® a saludar a la quincena de manifestantes que reclamaban ¡°libertad para los presos pol¨ªticos¡±.
El silencio de su entorno cuenta con la complicidad de las autoridades judiciales. ¡°No puedo confirmar que est¨¦ en Hamburgo¡±, dijo una portavoz del Tribunal Regional Superior de Schleswig Holstein tras conocerse las palabras de Cuevillas. Lo m¨¢s probable es que Puigdemont se haya refugiado en una de las localidades aleda?as. En cualquier caso, subray¨® la portavoz, ¡°la justicia sabe d¨®nde est¨¢ el se?or Puigdemont, y eso es lo importante¡±. Importante porque, seg¨²n las condiciones por las que recuper¨® la libertad tras depositar una fianza de 75.000 euros, Puigdemont tiene que presentarse una vez por semana en una comisar¨ªa.
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