Ciudadanos tambi¨¦n juega en el congreso del PP

El desenlace del congreso del PP influir¨¢ en el futuro de su principal competidor electoral, Ciudadanos, pero el partido de Albert Rivera prefiere no hacer comentarios p¨²blicos. Sus dirigentes siguen a rajatabla la consigna interna de no influir con ninguna declaraci¨®n en "la crisis" popular. O si hablan, que sea para decir que todo seguir¨¢ igual: "Gane el que era portavoz de la ejecutiva de Rajoy o gane la que era vicepresidenta de Rajoy seguir¨¢ siendo el viejo PP", dice Jos¨¦ Manuel Villegas, secretario general de la formaci¨®n. La tesis es que el PP seguir¨¢ siendo lo que era y que la ¨²nica alternativa para sus votantes es Ciudadanos.

La intenci¨®n de la formaci¨®n de Rivera es mirar de lejos las primarias del PP. Pero la realidad es que la elecci¨®n de Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa o Pablo Casado ser¨¢ tanto o m¨¢s importante para su futuro que la moci¨®n de censura de Pedro S¨¢nchez. Aparte de UPyD, desde 2015 el caladero m¨¢s numeroso de votantes de Ciudadanos ha sido el de los decepcionados con el PP. Un 18% de los votantes de Ciudadanos en diciembre de 2015 hab¨ªan votado en 2011 al PP, seg¨²n el CIS. El pasado mes de abril, un 16,6% de votantes del PP en 2016 dec¨ªan que ahora votar¨ªan a Rivera. En la media de los sondeos que han aparecido tras la moci¨®n de censura, PP y Ciudadanos est¨¢n pr¨¢cticamente empatados detr¨¢s del PSOE.

Ning¨²n otro partido se acerca a esas cifras: Ciudadanos recoge viejos votantes del PSOE, pero con un porcentaje muy inferior. As¨ª que si el nuevo l¨ªder del PP da un nuevo aire al partido, Ciudadanos tendr¨¢ m¨¢s problemas ¡ªo problemas nuevos¡ª como alternativa. La formaci¨®n de Rivera conf¨ªa en que no est¨¢ claro c¨®mo puede darse una imagen de renovaci¨®n a un partido como el PP. La corrupci¨®n de la G¨¹rtel seguir¨¢ ah¨ª, sus viejos dirigentes continuar¨¢n hablando y sus antiguas decisiones seguir¨¢n pesando. Villegas lo explica as¨ª: "Los viejos partidos, por mucho que cambien de caras, siguen arrastrando las mochilas del viejo bipartidismo y sus pactos con los nacionalistas".

Pero a pesar de estas cautelas, y en conversaciones informales con miembros del partido, emerge que la victoria mejor recibida en las primarias ser¨ªa la de Casado. Hay motivos de estrategia pol¨ªtica: "La consolidaci¨®n de un espacio a la derecha nos abre el centro a nosotros", dice un diputado. El aspirante popular no esconde que los valores conservadores son importantes para su candidatura. En los asuntos vinculados a la religi¨®n, LGTBI o medio ambiente, Ciudadanos estar¨ªa marcadamente alejado hacia el centro de un PP liderado por Casado.

Otra de las presuntas amenazas electorales de Casado para Ciudadanos es que es un clon de Rivera. El argumento en contra es obvio: pocos votantes preferir¨¢n la copia al original. El caso de los estudios universitarios y el m¨¢ster del aspirante popular ser¨¢ un elemento m¨¢s que los otros partidos usar¨¢n para ligarlo a la corrupci¨®n. Casado insiste en querer recuperar los votos que se han ido a Ciudadanos, lo que pone el foco en el partido de Rivera y le concede que este ha ganado leg¨ªtimamente un espacio en el centroderecha. Santamar¨ªa ignora mucho m¨¢s a la formaci¨®n naranja como ya hizo, en gran parte, Rajoy.

Un PP dirigido por Santamar¨ªa estar¨ªa, al contrario, m¨¢s volcado en el espacio de centro que pretende ocupar Ciudadanos. Solo Catalu?a ser¨ªa uno de los argumentos que Rivera podr¨ªa seguir usando para distanciarse, por sus cr¨ªticas a la gesti¨®n del 155 que hizo la entonces vicepresidenta. La ventaja de Santamar¨ªa ser¨ªa su condici¨®n de mujer entre tres hombres.