El abogado de Forn alega que el Govern ¡°abandon¨® el poder¡± tras la DUI

A Javier Melero, el abogado del exconsejero de Interior Joaquim Forn, poco le importa quedar mal con el independentismo si con ello logra salvar a su cliente del grav¨ªsimo delito de rebeli¨®n por el que la Fiscal¨ªa le solicita 16 a?os de c¨¢rcel. Fiel a su ret¨®rica mordaz, Melero ha afirmado este martes, en su informe final en el Tribunal Supremo, que el Gobierno catal¨¢n pr¨¢cticamente hizo dejaci¨®n de funciones despu¨¦s de la declaraci¨®n unilateral de independencia (DUI) del 27 de octubre de 2017. Y que cuando se aplic¨® el art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n, todos los consejeros lo acataron sin rechistar.

"El Govern no hizo ninguna declaraci¨®n de independencia" formal, ha defendido Melero. Y despu¨¦s de esa jornada, en todo caso, la Generalitat "hizo todo lo posible por abandonar" el poder "sin la menor resistencia". "No se arr¨ªa la bandera, no se comunica nada al cuerpo diplom¨¢tico. Soy consciente de que a alguien puede molestarle esta versi¨®n de los hechos. Pero esto es lo que ocurri¨®". La Generalitat, ha ahondado, incumpli¨® sus propias leyes de desconexi¨®n "para que nada de lo que hiciera tuviera validez normativa".

En realidad, ni Puigdemont ni Junqueras tuvieron nunca en sus manos la posibilidad de cambiar el statu quo. "El poder no es m¨¢s que imponer por la fuerza un marco normativo. Y el Govern no ten¨ªa ese poder", en opini¨®n de Melero. Una tesis que se vio reforzada tras la activaci¨®n, por parte del Senado, del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n. La iniciativa fue m¨¢s que suficiente para doblegar a Puigdemont. "S¨¦ que molesta en determinados c¨ªrculos, pero el 155 fue acatado de inmediato, funcion¨® perfectamente. Todo el mundo se adapt¨®".

Y poco m¨¢s le hizo falta al Estado para mantener el orden constitucional en Catalu?a, ha venido a resumir Melero, un veterano penalista que particip¨® en las reuniones fundacionales de Ciutadans en Catalu?a. El hecho de que el Gobierno de Mariano Rajoy no impulsara acciones m¨¢s contundentes -como la declaraci¨®n del estado de sitio o excepci¨®n, e incluso la movilizaci¨®n de las fuerzas armadas- para frenar lo que la Fiscal¨ªa considera un "golpe de Estado" prueba, precisamente, que no lo fue.

Melero ha dado la vuelta a los argumentos de la acusaci¨®n: si la rebeli¨®n es uno de los delitos m¨¢s graves, la respuesta del Estado que se defiende de ese ataque tiene que estar a la altura. Y no se produjo. "No se reforz¨® ninguna infraestructura cr¨ªtica, ni siquiera se pusieron m¨¢s patrullas de Guardia Civil en el aeropuerto de Barcelona", ha puesto como ejemplo. "Todo esto es un baremo para saber la entidad de la amenaza, la que va a habilitar al Estado para la m¨¢s radical de las respuestas, el poder militar".

El defensor de Forn ha entrado al fondo en el delito de rebeli¨®n y se ha esforzado por desactivarlo. Ha dicho que es un delito pensado para estamentos armados y que en ning¨²n caso puede aplicarse a los l¨ªderes independentistas. A menos, ha ironizado, que se haga una interpretaci¨®n "posmoderna" que exige "innovar". Melero, sin embargo, ha pedido que no se "banalice el concepto de violencia". Y, aunque ha admitido que los golpes de Estado pueden ser incruentos, ha ironizado con la comparaci¨®n que el fiscal Fidel Cadena hizo con el 23-F. El abogado ha recordado que Tejero dispuso de "divisiones de tanques" y que, por tanto, "su capacidad para doblegar al Estado a trav¨¦s de la violencia era notable".

Mientras el independentismo califica el proceso en el Tribunal Supremo como "juicio farsa", a Melero -siempre un verso libre- no le ha preocupado lo m¨¢s m¨ªnimo finalizar sus 90 minutos de informe dando las gracias al tribunal y especialmente a Paco, el funcionario encargado de exhibir v¨ªdeos y documentos en la sala. Y ha apelado a la benevolencia del tribunal al aludir a la pel¨ªcula Amanece que no es poco, en la que un guardia civil -de origen catal¨¢n- dice que el mayor problema de seguridad en el pueblo (la pel¨ªcula transcurre en Albacete) es criticar al escritor William Faulkner, al que todos adoran all¨ª. "Espero que reconstruyamos una Espa?a en la que solamente nos discutamos por William Faulkner".

Nadie quiso coordinarse el 1-O

En su discurso, en el que apenas ha consultado los papeles, Melero ha girado como un calcet¨ªn los posicionamientos de la Fiscal¨ªa. Por ejemplo, la actuaci¨®n de los Mossos el 1-O. Para la acusaci¨®n, el dispositivo de la polic¨ªa auton¨®mica fue un fraude que pretend¨ªa dar cobertura a las intenciones del Govern de Carles Puigdemont de celebrar el refer¨¦ndum. Para Melero, el "fraude" fue precisamente el dispositivo del Estado y el papel del te¨®rico coordinador, el teniente coronel de la Guardia Civil Diego P¨¦rez de los Cobos.

"El dispositivo de coordinaci¨®n era un fraude. Nadie en el Ministerio [del Interior] quer¨ªa coordinarse. Vinieron a hacer una intervenci¨®n unilateral", ha dicho el abogado antes de subrayar el "fracaso" del operativo para evitar la consulta. Su conclusi¨®n es que "ning¨²n cuerpo policial cumpli¨® la orden judicial" de impedir el 1-O. "La Guardia Civil y la Polic¨ªa no lograron que ning¨²n centro permaneciera cerrado". Adem¨¢s, tuvieron que realizar intervenciones "contundentes" que se podr¨ªan haber evitado. Melero no ha culpado a los agentes, sino la "ineptitud" de sus jefes en el dise?o de un dispositivo "aberrante" que les condujo a una "situaci¨®n endemoniada".

Como ha hecho a lo largo del juicio, Melero se ha esforzado en subrayar la distancia existente entre el cuerpo de los Mossos y sus responsables pol¨ªticos. No hubo, concluye "concierto en su actuaci¨®n". Con esa idea, quita a la Fiscal¨ªa uno de sus argumentos para la rebeli¨®n: que el Govern contaba con el control de una fuerza armada de 17.000 hombres y mujeres para proclamar la independencia. "A los Mossos les molestaban las declaraciones de los pol¨ªticos, pod¨ªan proyectar una sombra de duda sobre su actuaci¨®n". El abogado ha defendido a un tiempo al exconsejero y a los Mossos, que presentaron "el ¨²nico plan con cara y ojos" para el 1-O al que nadie se opuso.