Un ej¨¦rcito para luchar contra los elementos
La Unidad Militar de Emergencias tuvo que combatir a la vez las inundaciones de Levante y un incendio en Galicia
La rotura de varias motas de contenci¨®n en Almorad¨ª (Alicante) convirti¨® la Vega Baja del Segura en una inmensa laguna el d¨ªa 14. La Unidad Militar de Emergencias (UME) recibi¨® aviso de que un hombre se negaba a abandonar su vivienda, en riesgo de colapso ante el empuje de las aguas. "No tengo seguro; lo voy a perder todo' repet¨ªa aferr¨¢ndose a su casa", recuerda el teniente coronel Olaf Claver¨ªa, jefe del batall¨®n de intervenci¨®n de B¨¦tera (Valencia). "En esa situaci¨®n, mucha gente se bloquea. Hay que ponerse en su lugar, calmarlas y animarlas, con infinita paciencia. Cada persona que rescatas debe sentir que para ti es la m¨¢s importante", a?ade.
Un total de 860 personas fueron rescatadas (27 en helic¨®ptero) por el operativo militar durante las inundaciones provocadas por la gota fr¨ªa en el sureste peninsular. Seg¨²n las predicciones de los expertos, una inundaci¨®n de esas dimensiones se produce cada medio siglo en Murcia y cada 500 a?os en Alicante, aunque el teniente coronel Javier Moreno, jefe de Planes de la UME, teme que esos c¨¢lculos pecaran de optimismo.
Nunca hab¨ªan realizado las Fuerzas Armadas un despliegue conjunto de esta envergadura: 1.319 militares (977 de la UME y 342 de los tres ej¨¦rcitos) con 409 medios (helic¨®pteros, veh¨ªculos todoterreno, m¨¢quinas de ingenieros, embarcaciones o drones). Nunca se hab¨ªa enfrentado la UME a dos enemigos tan distintos y distantes: inundaciones en Alicante y Murcia y un incendio forestal en A Gudi?a (Ourense) contra el que se movilizaron 85 efectivos el d¨ªa 14.
La creaci¨®n de una unidad militar para luchar contra las cat¨¢strofes fue un encargo del entonces presidente, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, al ministro de Defensa, Jos¨¦ Bono, despu¨¦s de que miles de conductores quedaran atrapados por la nieve en la autopista AP-1 en el invierno de 2004 y de que 11 bomberos murieran en un incendio forestal en Guadalajara en julio de 2005.
Su nacimiento fue pol¨¦mico: el PP la ridiculiz¨®, tach¨¢ndola de "Ej¨¦rcito de Zapatero", y muchos mandos militares recelaban de ella, por verla como una competidora por los exiguos presupuestos de Defensa y por considerar sus misiones impropias de la profesi¨®n castrense.
Una unidad de ¨¦lite en proceso de renovaci¨®n
La plantilla de la UME es de 3.500 efectivos, cubierta en m¨¢s del 90%. Todos sus miembros proceden de los ej¨¦rcitos y el n¨²mero de candidatos supera las plazas. Los soldados destinados en la UME cobran unos 400 euros m¨¢s que en otras unidades, pero tambi¨¦n sus servidumbres son mayores. El problema de crear una unidad desde cero es que todos sus medios, flamantes al principio, envejecen a la vez. Defensa ha puesto en marcha un plan para renovar gradualmente su casi millar de veh¨ªculos, el llamado Plan Vital UME. La novedad es que los nuevos veh¨ªculos en vez de estar dedicados a un solo uso ser¨¢n polivalentes: a una misma plataforma se le podr¨¢n acoplar m¨®dulos autobomba, portacontenedores o quitanieves.
El Gobierno pudo haber optado por un cuerpo civil, pero el hecho de que las competencias de Protecci¨®n Civil est¨¦n transferidas a las comunidades aut¨®nomas hac¨ªa temer que cada una reclamara su parte y la puesta en marcha no habr¨ªa sido tan r¨¢pida ni econ¨®mica. Zapatero entendi¨® que, en una situaci¨®n desesperada, los ciudadanos no admiten que las Administraciones se echen la culpa unas a otras.
Ya nadie cuestiona la UME. Al contrario: se ha convertido en modelo para otros pa¨ªses, como Per¨², que quieren crear una unidad similar. Adem¨¢s de combatir cada a?o los incendios forestales, ha intervenido ante inundaciones o terremotos, en Lorca (Murcia) y en el extranjero (Hait¨ª, Nepal y Ecuador). Cuatro de sus miembros, dos en operaciones, han perdido la vida.
En Alicante y Murcia, han participado en tareas de b¨²squeda y rescate, reparto de alimentos y medicinas, achique de inmuebles, recuperaci¨®n de infraestructuras o patrullas de vigilancia para evitar el pillaje.
Se atribuye a Felipe II la frase "no envi¨¦ a mis naves a combatir contra los elementos" cuando conoci¨® el desastre de la Armada Invencible. Esa es precisamente la orden que ha recibido la UME. El jueves dio por concluida su intervenci¨®n ante la gota fr¨ªa: los vecinos de Los Alc¨¢zares (Murcia) los despidieron entre abrazos y aplausos.
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