Deshielo en la periferia, atasco en Madrid
Acuerdos presupuestarios como los de Catalu?a permiten atisbar las primeras se?ales de desbloqueo pol¨ªtico
De una manera casi imperceptible y a pesar de los contratiempos que Pedro S¨¢nchez est¨¢ encontrando para cerrar el apoyo de ERC a su investidura, la pol¨ªtica espa?ola parece que empieza a salir del laberinto en que lleva enredada casi un lustro. Pactos presupuestarios como los de Catalu?a, donde las cuentas de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona llevan prorrogadas desde 2017, marcar¨ªan la senda a seguir.
¡°Esa es la sensaci¨®n, aunque muchas veces demos dos pasos hacia adelante y uno hacia atr¨¢s como los cangrejos. O al rev¨¦s¡±, reflexiona un alto cargo del partido en el Gobierno que mantiene sus reservas hacia Esquerra. Un zigzagueo caracter¨ªstico en unos tiempos que ¡°no son f¨¢ciles¡±, como reconoci¨® Felipe VI en su discurso de Nochebuena, en los que lo nunca visto ya dif¨ªcilmente sorprende ¡ªcuatro elecciones generales desde 2015, la moci¨®n de censura de 2018, la extrema derecha convertida en tercera fuerza en el Congreso...¡ª y en el que se acumulan todo tipo de problemas. Esas dificultades han empeorado el diagn¨®stico mientras permanec¨ªan semiocultas bajo el monotema del desaf¨ªo independentista. ?Cu¨¢l fue la ¨²nica comunidad a la que el Rey se refiri¨® expl¨ªcitamente el 24 de diciembre? Bingo: Catalu?a.
La crisis territorial contin¨²a acaparando todos los focos mientras la deuda p¨²blica sigue en m¨¢ximos, la natalidad se desploma a registros de hace 20 a?os y el d¨¦ficit y el paro siguen muy elevados para disgusto de Bruselas. El futuro Gobierno de coalici¨®n de PSOE y Unidas Podemos afirma tener muchas de las soluciones, como un sistema de financiaci¨®n auton¨®mico expr¨¦s en ocho meses y un ministerio ad hoc contra la despoblaci¨®n. Los reparos de Esquerra est¨¢n alargando los plazos de los socialistas, que tras casi 250 d¨ªas en funciones ¡ªel r¨¦cord lo tiene Mariano Rajoy, con 315 d¨ªas entre diciembre de 2015 y octubre de 2016¡ª se resisten a renunciar a una investidura la v¨ªspera de Reyes. Un escenario que cada d¨ªa que pasa gana m¨¢s esc¨¦pticos en el socialismo.
El PSOE, consciente del delicado territorio por el que transita, no se contenta con la abstenci¨®n de ERC en la investidura. Quiere asegurarse su apoyo a los Presupuestos de 2020 (siguen en vigor los de 2018). Un bal¨®n de ox¨ªgeno que, como m¨ªnimo, permitir¨ªa al primer Gobierno de coalici¨®n desde la Segunda Rep¨²blica llegar al ecuador de la legislatura.
Un pacto de investidura que no estuviera vinculado a los Presupuestos ser¨ªa una ¡°investidura en falso¡±, consideran en Ferraz y La Moncloa. Hasta Pablo Casado, que se niega a facilitar la investidura haciendo apolog¨ªa del ¡°no es no¡± de S¨¢nchez a Rajoy en 2016, dice que se implicar¨ªa en la gobernabilidad con el apoyo del PP en pactos de Estado sobre pensiones, violencia de g¨¦nero, defensa e infraestructuras. Y, c¨®mo no, Catalu?a.
A la espera de un remedio para el nudo gordiano en que se han convertido las investiduras en Espa?a, ya hay atisbos del final del desbloqueo pol¨ªtico. Frente al inmovilismo en Madrid, las primeras se?ales de la anhelada estabilidad se concentran en la periferia, con unos pactos presupuestarios en Catalu?a que antes del 10-N eran impensables.
Hasta ahora el bloqueo pol¨ªtico en Catalu?a ten¨ªa como m¨¢xima expresi¨®n los presupuestos prorrogados en la Generalitat y en el Ayuntamiento de Barcelona. Ambas instituciones funcionan con las cuentas de 2017. Este desfase con la realidad social y econ¨®mica ya ha pasado factura en la calle. Hace un a?o, el president Quim Torra se enfrent¨® a su primera huelga por la falta de recursos para revertir los recortes que se arrastran desde 2010. El acuerdo para las cuentas de 2020 se da por cerrado en ambas instituciones. Los comunes han logrado arrancarle al Govern, pese a la resistencia de los sectores m¨¢s conservadores del PDeCAT, algunos retoques fiscales que permitir¨¢n una subida de impuestos de 543 millones de euros cada a?o.
Podemos facilita los presupuestos del Pa¨ªs Vasco. El PNV y el PSE-EE sacaron adelante el viernes los presupuestos para 2020 con el voto en contra de PP y EH Bildu y la abstenci¨®n de los de Iglesias. Podemos ha creado un eje con el PNV y los socialistas en todo lo relativo a las pol¨ªticas sociales durante el proceso del articulado del nuevo Estatuto vasco en la Ponencia de Autogobierno, en el que se han aparcado las discrepancias identitarias.
Estabilidad en Andaluc¨ªa pese a Vox. La llave de la gobernabilidad la tiene Vox pero, al contrario de lo que ocurre en otras comunidades gobernadas por PP y Cs, como Madrid, donde se han prorrogado los presupuestos, el Ejecutivo de Juan Manuel Moreno presume de estabilidad. En 11 meses, ha aprobado las cuentas de 2019 y 2020, lo que le garantiza agotar el mandato usando la pr¨®rroga presupuestaria si Vox pone fin al pacto de legislatura.
Tripartito valenciano. La entrada de Podemos en el Gobierno que la legislatura pasada compart¨ªan el PSOE y Comprom¨ªs le ha aportado solidez en un contexto pol¨ªtico nacional de incertidumbre. Y permite interpretar distintos papeles en los acuerdos a m¨²ltiples bandas de los que depende el Gobierno de S¨¢nchez. A diferencia de otros barones socialistas, Ximo Puig ha expresado p¨²blicamente su apoyo a las negociaciones con ERC, al tiempo que Comprom¨ªs pone como condici¨®n a S¨¢nchez otro modelo de financiaci¨®n. El vigente est¨¢ obsoleto desde 2014.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.