Algoritmos que determinan si tu hijo necesita un refuerzo en matem¨¢ticas

Parece que existe cierto consenso entre los padres de todo el mundo, que pueden discrepar en todo tipo de asuntos, pero tienden a coincidir en un punto: sus hijos son especiales si se les compara con los dem¨¢s ni?os de la clase. Y no les falta raz¨®n. Pero el sistema educativo tradicional tiende a agrupar a todos bajo el mismo paraguas y apenas tiene en cuenta las diferencias que existen entre los j¨®venes en lo que respecta a sus capacidades y habilidades.

El colegio Urkide, en Vitoria, trabaja en un programa pionero que utiliza t¨¦cnicas de big data e inteligencia artificial para promover un modelo de educaci¨®n personalizada para sus alumnos de primaria. Por medio de la recopilaci¨®n y an¨¢lisis de informaci¨®n sobre los j¨®venes, los profesores pueden adelantarse a lo que va a ocurrir con cada alumno y proponer rutas formativas espec¨ªficas que permitan potenciar las virtudes y reforzar las carencias de cada uno para que puedan aprovechar todo su potencial. El deporte, la banca, los seguros¡­ en todo tipo de ¨¢mbitos se utiliza la estad¨ªstica para conseguir un mayor rendimiento y eficacia. ?Por qu¨¦ iba a ser diferente en la educaci¨®n?

¡°La escuela suele tener en cuenta las altas capacidades y las necesidades especiales, pero, por falta de recursos e informaci¨®n, trata a todos los dem¨¢s de la misma manera¡±, lamenta Aitor P¨¦rez, director del centro. ¡°Cuando matriculas a un ni?o en un colegio, das muchos datos sobre su situaci¨®n familiar. A medida que avanza de curso, vamos recogiendo informaci¨®n sobre su desempe?o en las diferentes asignaturas, pero estos datos apenas se aprovechan¡±.

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Partiendo de este razonamiento, el colegio decidi¨® recurrir a Iberm¨¢tica, una empresa que desarrolla soluciones tecnol¨®gicas para diversos sectores. Con los datos del colegio, la compa?¨ªa ha desarrollado un sistema que busca patrones para segmentar a los alumnos por similitudes. A partir del an¨¢lisis de sus resultados acad¨¦micos, las actividades extraescolares que realizan, sus intereses, su dominio de lenguas, sus caracter¨ªsticas familiares y otras variables que pueden recoger, el sistema agrupa a los alumnos por perfiles a partir de los cuales los profesores pueden trabajar mejor.

• Inteligencia artificial para educar a tu hijo de una forma y al m¨ªo de otra

¡°El sistema tiene tres comportamientos: descriptivo, predictivo y prescriptivo¡±, expone Aitor Moreno, responsable de inteligencia artificial de Iberm¨¢tica. ¡°El primero explica por qu¨¦ cada alumno est¨¢ en un perfil y en base a qu¨¦ indicadores. El segundo ayuda a predecir c¨®mo puede reaccionar un ni?o ante un determinado est¨ªmulo bas¨¢ndose en c¨®mo han reaccionado en el pasado otros chicos con perfiles similares. El ¨²ltimo puede ayudarnos a entender qu¨¦ est¨ªmulos han llevado a un alumno a superar las expectativas previstas y as¨ª ir puliendo nuestro modelo¡±.

Pero, ?no conocen los profesores lo suficientemente bien a sus alumnos? ?Es capaz un programa inform¨¢tico de descubrirles realidades que se les escapan a quienes pasan tantas horas con ellos? Tal vez, pero el valor diferencial de este modelo es que ofrece una valoraci¨®n diferente de la que representa la opini¨®n subjetiva de un profesor. ¡°Si tienes que hablar con los padres sobre el rendimiento de su hijo y la mejor manera de que mejore, da m¨¢s confianza mostrar un an¨¢lisis objetivo en base a unos patrones determinados y buscar soluciones que han funcionado a otros chicos como ¨¦l¡±, comenta Moreno.

¡°El sistema ofrece recomendaciones particulares para cada alumno, pero es orientativo¡±, matiza P¨¦rez. ¡°El peso debe recaer sobre el maestro, que debe saber suministrar la informaci¨®n adecuada en cada contexto ofreciendo a los j¨®venes contenido atractivo que genere impacto¡±.

El sistema ofrece recomendaciones particulares para cada alumno, pero es orientativo

Aitor P¨¦rez, director del colegio Urkide

Aunque el colegio lleva recopilando datos desde hace cerca de 10 a?os, emplea el sistema de Iberm¨¢tica desde hace poco tiempo y, por el momento, solo desde el equipo directivo para definir la estrategia del centro. Tambi¨¦n lo tienen en cuenta para decidir qu¨¦ alumnos ir¨¢n en la misma clase dentro de un curso, ya que cada dos a?os les cambian de grupo. En una segunda fase, que prev¨¦n que comience el pr¨®ximo a?o, piensan extenderlo a tutores y profesores.

• El riesgo de caer en la profec¨ªa autocumplida

Al conocer las debilidades y fortalezas de cada alumno, es posible guiarle desde una etapa muy temprana, lo que tiene sus ventajas, pero entra?a el riesgo de caer en la llamada profec¨ªa autocumplida. Si predices que a alguien se le dan mal una asignatura y decides que se centre en otras cuestiones, terminar¨¢s por conseguir que esta materia se le d¨¦ realmente mal.

El director del colegio rechaza que vayan a enfrentarse a este problema ya que, si se produce alguna clase de efecto Pigmali¨®n, ser¨¢ en positivo. ¡°A un ni?o que tiene problemas con las matem¨¢ticas habr¨¢ que reforzarle en esta materia en lugar de abandonarla y centrarse en otras que se le den mejor¡±, apunta.

P¨¦rez denuncia que los centros educativos trabajan con resultados que, cuando les llegan, pueden estar obsoletos. Est¨¢ convencido de que la soluci¨®n que est¨¢n poniendo a prueba consigue definir el nivel formativo de los j¨®venes de manera m¨¢s precisa, inmediata y cient¨ªfica que el informe PISA y permite reaccionar con m¨¢s agilidad cuando un alumno tiene un problema.

Pero para que este modelo sea realmente eficiente, necesitar¨ªa trabajar con un mayor volumen de informaci¨®n. ¡°Lo ideal ser¨ªa que varios colegios trabaj¨¢ramos en una plataforma com¨²n que aprendiera del comportamiento de todos nuestros alumnos¡±, indica el docente, que hace un llamamiento a otros centros para que se sumen al proyecto: ¡°Solos no podemos; hace falta red¡±.