El desaf¨ªo de las ciudades: combatir el calor para proteger la salud mental

¡°Despu¨¦s de d¨ªas, semanas, sin dormir, el agotamiento se convirti¨® en tristeza, frustraci¨®n y preocupaci¨®n por m¨ª misma y por mi familia¡±. ¡°Me encanta pasear por la ciudad, tengo mis rutinas, y las ¨²nicas horas a las que pod¨ªa hacerlo era muy temprano o por la noche¡±. ¡°Llegu¨¦ a pasar la noche en blanco en la playa para regresar a mi casa al amanecer y seguir sin poder dormir¡±. Estas son algunas de las experiencias que nos compartieron vecinas y vecinos de el Raval, Barcelona, tras un verano con tres olas de calor oficialmente reconocidas. El estudio de los problemas de salud ligados a las temperaturas extremas de la crisis clim¨¢tica es una de las principales preocupaciones actuales de los centros y agencias de investigaci¨®n internacionales y su personal investigador. Y los problemas de salud asociados a la crisis clim¨¢tica tambi¨¦n incluyen los trastornos de salud mental.

Cuando hablamos de salud mental es muy importante aclarar una serie de definiciones. La OMS defini¨® ya en 2004 la Salud Mental as¨ª: ¡°El estado de bienestar en el que un individuo realiza su propio potencial, puede hacer frente a las tensiones normales de la vida, puede trabajar de manera productiva y fruct¨ªfera y es capaz de contribuir a su comunidad¡±. Los trastornos de salud mental incluyen enfermedades diagnosticables y tratables de alta prevalencia como por ejemplo la depresi¨®n, la ansiedad, y los trastornos por uso de sustancias, as¨ª como enfermedades menos prevalentes, pero que pueden ser muy graves como la esquizofrenia y los trastornos bipolares entre otros.

Como m¨¦dico interesado en la investigaci¨®n y formado en Madrid y Berl¨ªn me fascinaban, por un lado, las enfermedades cr¨®nicas y por otro los trastornos psicosom¨¢ticos. Y as¨ª llegu¨¦ en 2002 a la escuela de salud p¨²blica de Johns Hopkins donde lo primero que hice fue pasear por todos los edificios y departamentos para entender la complejidad de este tipo de investigaci¨®n. Y una de mis mayores sorpresas fue descubrir lo grande e interesant¨ªsimo que era el departamento de salud mental, uno de los diez departamentos de la escuela. Este ¨²ltimo a?o ha comenzado el proyecto global Connecting Climate Minds con el objetivo de conectar personas de todo el mundo para comprender y responder a las profundas interconexiones entre el cambio clim¨¢tico y sus efectos sobre la salud mental que incluye grupos en siete regiones que cubren todo el planeta.

Un aspecto interesant¨ªsimo de este proyecto, financiado por Wellcome Trust y coordinado por el Imperial College London, ha sido la creaci¨®n de una Agenda global de investigaci¨®n y acci¨®n sobre Cambio Clim¨¢tico y Salud Mental donde investigaci¨®n y acci¨®n se complementan y trabajan codo con codo desde una perspectiva global que tambi¨¦n incluye el estudio de las experiencias vividas en diferentes poblaciones afectadas en todo el planeta. Y en este proyecto participa Pamella Collins, actual directora del departamento de Salud Mental de Hopkins, psiquiatra con 30 a?os de experiencia en investigaci¨®n internacional e interdisciplinar en salud p¨²blica y enfermedades mentales graves.

En una de las reuniones del proyecto discutimos c¨®mo en las zonas m¨¢s ricas del planeta se daban procesos demogr¨¢ficos y sociales simult¨¢neos como la desigualdad, el envejecimiento y la alta proporci¨®n de personas que viven solas. Estos procesos influyen en la distribuci¨®n, aparici¨®n y tratamiento de los trastornos de salud mental de sus habitantes. Y discutimos sobre un concepto que se utiliza en psicolog¨ªa ambiental en relaci¨®n con la crisis clim¨¢tica y que yo desconoc¨ªa; la solastalgia. Se refiere al dolor, la sensaci¨®n de aislamiento que nos causa la falta de reconocimiento, de ¡°solaz¡±, de nuestro propio hogar, nuestro propio territorio. Y me pareci¨® muy interesante porque este proceso apareci¨® tanto en el proyecto de El Raval sobre olas de calor y salud, como en otros estudios sobre gentrificaci¨®n, turistificaci¨®n y salud urbana.

?Y qu¨¦ dicen los estudios?

Una revisi¨®n sistem¨¢tica sobre la asociaci¨®n entre las altas temperaturas y las olas de calor y la salud mental publicada en la revista Salud P¨²blica en 2018 encontr¨® 15 estudios que en total mostraban c¨®mo durante las olas de calor el riesgo de suicidio aumentaba un 18%. El calor tambi¨¦n hac¨ªa aumentar las visitas e ingresos hospitalarios en psiquiatr¨ªa. Otra revisi¨®n sistem¨¢tica y metaan¨¢lisis sobre factores clim¨¢ticos y trastornos mentales ha sido publicada en 2023 en la prestigiosa revista Science of the Total Environment. Los autores incluyeron 88 estudios en el an¨¢lisis conjunto de los datos de los estudios previos y mostraron c¨®mo que las olas de calor y las temperaturas extremadamente altas se asociaron con un 5% y un 18% de mayor riesgo de enfermedades mentales como la esquizofrenia, los trastornos del estado de ¨¢nimo, y los trastornos neur¨®ticos.

Con toda esta evidencia cient¨ªfica vuelvo a nuestros barrios y a nuestras vecinas. En una plaza del c¨¦ntrico barrio de Tetu¨¢n de Madrid unas vecinas nos dec¨ªan para el programa El Escarabajo Verde de RTVE llamado ¡°La cultura del calor¡±: ¡°En verano no hay ninguna hora buena para bajar al parque a jugar, hace demasiado calor en ese parque sin sombra, sin plantas y sin fuente de agua¡±. Cuando lo piensas dos veces, realmente es un urbanismo que castiga m¨¢s que cuida a la ciudadan¨ªa.

El calor en nuestras ciudades y nuestra salud, la mental tambi¨¦n, es un ¨¢rea de investigaci¨®n en constante desarrollo. La revista The Lancet public¨® en 2021 una serie especial sobre calor y salud en la que destacaron la importancia de investigar la especial situaci¨®n de vulnerabilidad con respecto a la salud mental de las personas con enfermedades previas que viven en ciudades. Algo que ya nos contaron las personas participantes de El Raval. Y dentro de esta serie se analizaron las diferentes estrategias de adaptaci¨®n y promoci¨®n de la salud donde los espacios verdes en las ciudades tienen un papel muy destacado. De hecho, la literatura cient¨ªfica muestra una evidencia cada vez m¨¢s clara entre la exposici¨®n a espacios urbanos naturales, la reducci¨®n del calor urbano, la disminuci¨®n de los niveles de estr¨¦s y la incidencia de trastornos de salud mental.

Los avances en investigaci¨®n son muchos, recientes y muestran todo lo que queda por entender. Y es interesante ver c¨®mo avanzamos tanto en la ciencia como en su traducci¨®n a la acci¨®n, y a las decisiones t¨¦cnicas y pol¨ªticas.

Como siempre en salud p¨²blica, el conocimiento cient¨ªfico por s¨ª mismo no ser¨¢ suficiente. Los medios de comunicaci¨®n tendr¨¢n que mejorar los mensajes que transmiten sobre temas complejos como son la crisis clim¨¢tica y los trastornos de salud mental. Y la ciudadan¨ªa, desde las organizaciones locales, nacionales y transnacionales seguiremos pidiendo que el conocimiento cient¨ªfico se traduzca en acciones que mejoren nuestra salud y bienestar. Cada d¨ªa es m¨¢s patente la conexi¨®n entre la salud ambiental y la salud humana, y nos urge proteger ambas. En este caso, protegernos del calor para proteger nuestra salud mental.

La salud va por barrios es una secci¨®n que explica en tono sencillo y amable los conceptos y avances de la investigaci¨®n en Salud Urbana, un ¨¢rea de la Salud P¨²blica necesariamente interdisciplinar. La investigaci¨®n en Salud Urbana tiene como objetivo mejorar nuestras ciudades para mejorar la salud de los millones de personas que habitamos las complejas y desiguales ciudades que hoy caracterizan la vida en nuestro planeta.

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